A propósito de Monseñor Lückert hace bastante tiempo que no oigo hablar a Monseñor Urosa Savino aunque sí a uno que llaman Vicente Díaz, por lo que da igual.
Bueno, al grano, es que Pablo Mármol bautizó una avenida de Maracaibo con el sonoro nombre de “Monseñor Luckert” y eso es pulirle el bronce al referido personaje del alto clero escuálido y tal vez sea un paso inicial para lanzar su candidatura presidencial dentro de seis años porque la verdad es que Capriles no vio luz.
La próxima inauguración del Gobernador Pablo podría ser bautizar el Paseo del Lago como “Paseo Álvaro Uribe Vélez” en homenaje a los buenos oficios –para con el Zulia- del destacado Ex Presidente colombiano y ahora, posible aspirante a la misma investidura pero acá en Venezuela, por las malas o por las buenas, porque para eso él es guapo y apoyao por los gringos, suficiente credencial.
Si acaso, el único problema que Monseñor Lückert podría tener para optar internamente en la MUD -Masacote Ultra Derechista- por la candidatura presidencial 2019- 2025, sería Uribe Vélez, a menos que para entonces éste se lance a gobernador del Zulia en vez de a presidente de Venezuela.
Ya Uribe amenazó con invadir a Venezuela desde Colombia y eso es señal de que él pretende amedrentarnos, imponernos su ley y hacer con nosotros lo mismo que hizo Cristóbal Colón.
Pero, volviendo al tal Lückert, de éste llegar a presidente de Venezuela es seguro que su primer decreto podría ser una “Misión Piernas Cerradas” en sustitución de la otra “Misión”
Su lema sería probablemente que “En boca cerrada no entran moscas”.
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