Debo admitirlo: caí por inocente sin ser 28 de diciembre. Como buen cristiano, quise pensar bien. Imaginé que la diputada de la sonrisa impostada había entrado en el carril, pero me caí de un coco y ahora, a punta de hojas de mango, me espanto los“moraos” que por manso muy bien tengo ganados.
La diputada que se sienta en el lado derecho de la Asamblea Nacional se afincó por enésima vez. China en mano arremetió de nuevo contra Hugo Chávez y el país todo, país que cada vez menos parece ser su país. ¿Será que en el fondo de su corazón –que ojalá no sea impostado– siente que no es suyo? “¡Oh, yes!” diría cualquier pitiyanqui majunche.
Esta señora, cuya firma decora el decreto que en abril de 2002 agujereó a la democracia venezolana, declaró –con placer, suponemos– a un diario gringo una molestia que en otras latitudes sería un acto de elevado y orgulloso patriotismo: que mujeres y hombres de este país –que no sé si será el suyo– estamos dispuestos a encaramarnos en los cerros y despellejarnos bajo el sol y la lluvia para defender esta Patria –que no sé si es la suya– en caso de que la gringada de hoy decida penetrar y profanar nuestro suelo.
La expresión “guerra popular prolongada”, para ella huele a comunismo y en consecuencia le para los pelos, pero lo que le congela la sangre es que esa guerra popular prolongada “es un planteamiento de una guerra total, es una guerra de todo el pueblo, que convierte a los ciudadanos en combatientes” según reportó el Correo del Orinoco el 10 de agosto.
Si se tratara de otra persona, uno diría que la inocentona es ella; que piensa que en lugar de bombas, lo que van a caer son tomates, que además no son tomates inteligentes porque, a la hora de lanzarlos sus congéneres del Norte, arrasarían hasta con casotas como las que seguramente tiene ella.
Vergüenza debería darle con Leopoldo López (sí: leyó bien) quien (tal vez con algún dejo de sinceridad) mostró desacuerdo con las ganas de invadirnos (qué empeño) que quedaron en Álvaro Uribe. ¡Qué pena con esta “representante” del pueblo! Definitivamente, anda en una de beta, de negativa beta.
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