El Secretario del tesoro de Estados Unidos Scott Bessent declaró al preguntársele si la política de aranceles era efectiva, declaro entre otras cosas, que el Presidente de los mismísimos Estados Unidos "debería poder usar aranceles para impedir que el veneno cruce la frontera" entendiendo por veneno a la droga fentanilo. Lógicamente hasta el lector más distraído se preguntará ¡quiere decir que el fentanilo pasa por las aduanas libre de impuestos! Con esto el propio Secretario dijo dos cosas, una que el fentanilo ingresa por las Aduanas y lo segundo que parece que su mayor preocupación es ¡Que no paga impuestos¡ Esta todo muy claro, subamos los impuestos de Aduana al Fentanilo y listo resuelto el problema¡ Nada más fácil.
Y surgen dos temas colaterales, uno son las enseñanzas para Venezuela de las declaraciones de este funcionario y la otra es que hay veces vemos como aquí nuestros altos funcionarios en algún momento parecen no manejar bien su materia de desempeño y se les critica fuerte, entonces uno se pregunta ¿cómo puede ser que en el país, que de las 100 universidades mejor calificadas en el mundo dice tener 50, un Secretario del Tesoro no tenga una explicación técnica y convincente sobre un problema? Me hace pensar cual es la calidad del equipo de Trump, parece que los escoge por cual baila mejor la música country.
Con la argumentación, de que el presidente debería poder usar aranceles para evitar que el fentanilo entre al país Bessent está enredando más la cuestión pues el fentanilo al ser una sustancia controlada e ilegal su importación es un delito que se combate con incautaciones, arrestos y otras medidas policiales, no con el pago de aranceles. Los agentes de Aduana deberían decir algo para defenderse. Pobre Trump después tiene que salir a proteger a sus funcionarios.
El fentanilo no debe cruzar su frontera libre de impuestos porque es un producto prohibido. Simplemente no está permitido. El uso de aranceles que menciona Bessent sería o una medida alternativa, propuesta para combatirlo o algo dicho más para salir del paso, pero a todas luces ilógica e inefectiva y por lo tanto sin procesos para hacerla más efectiva. Resultados esperados de esa idea que beneficien al pueblo de los Estados Unidos, ninguno. Y uno empieza a darse cuenta que así como manejan el fentanilo manejan las otras drogas, como la cocaína.
Se entiende que el problema del fentanilo es tan grande que parece que los funcionarios no saben cómo manejarlo y lo que dice el Secretario del Tesoro, refleja esa magnitud, pero que se hace mayor si los funcionarios de alto nivel tienen una torta en su cabeza y la relacionan con otros temas que no tienen nada que ver, aranceles vs fentanilo. No hay solución a la vista. Me recuerda esta situación a la frase de Madonna cuando tuvo una niña que al presentarla a la prensa dijo, ¡nunca permitiré que mi hija sea pasante en la Casa Blanca! A los jóvenes de USA los padres deberían dar un consejo similar, nunca seas un asesor del presidente.
Aunque debemos pensar, que el gobierno no quiera tocar ciertos "intereses" y aceptamos que es un problema complejo. Y entonces ¡Qué quiso decir el Secretario del Tesoro? Él lo que está haciendo es buscarle trabajo al nuevo Departamento de Guerra al usar los aranceles como herramienta y como una forma de presionar a países y empresas que, según el gobierno estadounidense, no están haciendo lo suficiente para detener el flujo de la droga.
Lo que se propone es "Si no colaboras para detener el fentanilo, te impondré aranceles en otros productos que sí quieres exportar legalmente a Estados Unidos". Le falto agregar que si no lo hacen según mi real gusto y entender usaré mis fuerzas armadas y mis buques para convencerte.
En estas declaraciones se traslucen los problemas de gobernanza en los Estados Unidos. Muestran que, a pesar de los esfuerzos, los métodos tradicionales o no están siendo suficientes para detener la crisis del fentanilo o no están buscando realmente soluciones. Lleva eso a los funcionarios a las soluciones improvisadas. E insistiendo en la benevolencia, interpretemos la declaración como una señal de la desesperación por encontrar nuevas formas de atacar ese problema de salud pública pero que refleja también como están tratando todos los problemas de ese país. Porque si a un Secretario le fue bien diciendo un embuste, entonces los demás dirán, ¡yo puedo hacer lo mismo! ¡Mintamos todos¡ y sale Marco Rubio de primero.
Por eso aquí no me refiero solo al fentanilo, el cual al vincularlo con los aranceles no aclara sino que les enreda el problema pero que a nosotros nos muestra sus intenciones. Me refiero es a la gobernanza de Estados Unidos. El Secretario debería explicar al pueblo de EEUU como los aranceles, que no se aplican al fentanilo, va a ayudar a resolver el problema¡¡ Aquí en situaciones similares decimos ¡Misterios de la Ciencia¡
Tampoco van a resolver ese problema culpando a Venezuela, ya nos están culpando de otro con el que no tenemos relación ¡¡