A la segunda va la vencida, dice un refrán por ahí. La segunda vez que proponen a Kirchner el cargo de Secretario General de UNASUR, acepta, en esta postulación Rafael Correa es el principal ejecutor. En agosto del 2008 Correa propuso a Néstor Kirchner el cargo de secretario una vez que el ex presidente ecuatoriano Rodrigo Borja declinara el ofrecimiento, en la quinta de Olivos, en el mismo 2008 Correa se reunió con Cristina y Néstor Kirchner para solicitarle a Néstor que sea el Secretario General de UNASUR, lo cual acepto.
Sin embargo, Tabaré Vásquez, se opuso por la pugna que Uruguay sostiene con Argentina por la planta de celulosa ubicada en el corte de rutas en el puente que conecta a los dos países, pugna que la Haya resolvió a favor de Uruguay, motivo por el cual don Pepe Mujica “fallo” a favor de Kirchner.
Brasil juega un papel importante en el futuro de UNASUR, por sus aspiraciones hegemónicas en la región y por su cercanía comercial-militar con los Estados Unidos, que lo podrían llevar como contratista del pentágono una vez consolidado el mercado del etanol de miles de millones de galones.
UNASUR, no esta legalmente constituida por la mayoría de sus miembros quienes no han ratificado el tratado para que tenga vigencia, esa la primera labor diplomática de Néstor Kirchner, legalizar a UNASUR, una vez que su trabajo debe tener dedicación exclusiva, además, no solicitara ni recibirá instrucciones de ningún gobierno ni entidad ajena a la Organización de Naciones del Sur, y se abstendrá de actuar en forma incompatible con su condición de funcionario internacional, responsable únicamente ante UNASUR. Prácticamente lo mismo que reza el reglamente interno de la OEA.
La postura de Colombia, Chile, Perú, es mas que obvia a favor de EEUU, la incógnita es Brasil, Argentina y Paraguay, cundo de votar se trata considerando los antecedentes de voto que posibilitaron que Colombia no tenga ninguna sanción por las bases militares estadounidenses. Y, por la rivalidad sin solución entre los dos grandes en MERCOSUR, aranceles que marcan el estancamiento del Mercado Común del Sur. Esta claro que Brasil tiene el respaldo del G7 para ser el imperio regional, pero Argentina forma parte también del G20 o 33. Esta claro que el Departamento de Estado no ha descuidado a Argentina, pues desde hace un mes la presidenta Cristina no cuenta con mayoría en el Congreso, la pugna con la Corte de Justicia continua así como con el Vicepresidente con aspiraciones presidenciales.
En la parte administrativa es positivo el nombramiento de Kirchner como Secretario General, pero, en la parte política, si los países miembros aceptan o no a Lobo como presidente de Honduras, es una trivialidad que busca desviar los reales problemas que se avecinan en la región: el regreso de miles de inmigrantes a cada nación, la llegada de Santos a la presidencia de Colombia y su política de extraterritorialidad, el tratado de defensa de EEUU con Brasil, la postura de Paraguay, respecto a las bases norteamericanas y su represión interna con el EPP.
La caótica situación económica de Ecuador y Uruguay, a la cual la Unión de Naciones del Sur, debería ayudar a resolver esos problemas para que no acudan a organismos crediticios del imperialismo, o los nuevos tratados bilaterales “contra el narcotráfico” entre Paraguay y Brasil, en donde EEUU tiene mucho que ver, paso previo para meter la “lucha contra el terrorismo”, elementos diplomáticos legalizados internacionalmente que la casa blanca utiliza para controlar regiones como México, mas de 21000 muertos en tres años del plan Mérida o el plan Colombia extensamente conocido por todos, o los 81 millones de dólares entregados a Ecuador desde el 2001 para combatir el narcotráfico cuando a Colombia le ha entregado mas de 6500 millones de dólares en el mismo periodo.
Grandes diferencias políticas manipuladas con los tratados de lucha contra el narcotráfico y contra el terrorismo promovido por EEUU, para interferir política y económicamente en los países, son elementos que debe resolver UNASUR, una vez legalizada para que pueda contar con peso especifico como organización en la región.
Hay desgaste en la confianza pública con respecto a UNASUR, las bases en Colombia son un golpe duro a la unidad del Sur. Este organismo hasta ahora ha tratado hechos consumados: el golpe en Honduras y el avance norteamericano en el continente con los tratados del narcotráfico con cada uno de los países, la carrera armamentista desde Colombia a la región, las trasnacionales petroleras y mineras con China a la cabeza, no ofrecen alternativas para el crecimiento social de los pueblos.
Néstor Kirchner debe realizar una auditoria profunda a UNASUR, convocar a una reunión de presidentes, delinear parámetros de aquí en más y actuar en consecuencia aplicando la soberanía de la unión del Sur. Este es el eslogan de UNASUR, la coexistencia pacifica entre los pueblos del sur, al menos.
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