Binóculo Nº 481

Narcotráfico = Estado + Gobierno + Sociedad

Los nuevos teóricos de la economía, necesariamente deberán incluir el narcotráfico como una de las variables más importantes en el mundo de hoy, en el desarrollo de las estructuras económicas de los Estados. Por lo que los nuevos textos de economía, hablarán de narcotráfico a diestra y siniestra, como un elemento más del desarrollo económico. Ya nada se escapa al narcotráfico, responsable de, al menos, dos tercios de los problemas del mundo. Los testigos de Jehová, aseguran que está pronto el fin del mundo, los evangélicos también, pero ninguno dice que el narcotráfico es el gran responsable. Porque el hecho es que hasta las instituciones religiosas están metidas en eso. No como estructuras jurídicas, pero si algunos... y en algunos casos muchos de sus miembros. Porque uno de los elementos más importantes, es que los capitales del narcotráfico, han entrado, o se han mezclado con los capitales de las grandes trasnacionales del mundo, sobretodo con la de los medicamentos. Es mucho dinero en efectivo que, en esencia, en sus manos no significa nada, a menos que se disfrace con los dineros de la sociedad. Una interconchupancia que hoy es real, y muy activa.

El narcotráfico es una suprapoderosa estructura, que opera por sí misma y es además, atomizada. Es decir, compiten entre ellos, Po r lo que un cristiano diría gracias Dios, pues cómo sería si estuvieran unidos y definieran el camino por el que todos debemos ir. Por ello en la necesidad de lavar las brutales masas de dinero en efectivo, debieron buscar alianzas en las estructuras legales: la banca, las trasnacionales y las inversiones en grandes estructuras; además de que una parte muy importante, quizás un 30% de esos ingresos, están destinados a formar una rígida estructura militar que, aunque no son uniformados, tienen una disciplina, cuya violación se castiga de inmediato con la muerte. Y, además, es un hecho que quien se vincule a él, no le es posible salir después. Algunos reflexólogos aseguran que, si el narcotráfico invirtiera tan solo el 15% de sus ingresos en política sociales, ya serían los dueños del mundo, incluyendo el control de toda la estructura nuclear. Pero a final de cuentas, lo único importante para el narcotráfico es su propia acumulación de riquezas, sin que tan siquiera una parte de esa riqueza, sea invertida para mitigar la pobreza.

En realidad, nada escapa al narcotráfico, porque es un instrumento político, diplomático y económico; y afirmar que solo beneficia a los traficantes colombianos y mexicanos de la droga, es una simplificación, extremadamente ingenua.

En 1994, hace 28 años, en una de las mejores investigaciones que yo leí, escritas por mis colegas periodistas Mylene Sauloy, marroquí, e Ives Le Bonniec, francés, publicadas en el libro "A quién beneficia la cocaína", prologado nada menos que por Gabriel García Márquez, quien por cierto estaba de acuerdo con la legalización de las drogas "No es posible imaginar el fin de la violencia en Colombia sin la eliminación del narcotráfico, y no es imaginable el fin del narcotráfico sin la legalización de la droga, más próspera cada instante cuanto más prohibida", dijo, aseguran los investigadores que para esa fecha, el narcotráfico empleaba a 500 millones de personas en todo el mundo, siendo propietario de estructuras legales que nadie podía imaginar. El Gabo decía que Los desplazados, a quienes llamaba fugitivos de sí mismos, son los síntomas primarios del mar de fondo que "asfixia a Colombia. Dos países en uno, no sólo diferentes sino contrarios, en un mercado negro colosal que sustenta el comercio de las drogas para soñar en los Estados Unidos y Europa, y a fin de cuentas en el mundo entero". Decía que su país llevaba cuatro décadas viviendo con toda clase de turbaciones del orden público, una situación que absorbió "a más de una generación de marginados sin un modo de vivir distinto de la delincuencia común".

28 años después de esa publicación, sabemos por ejemplo que ningún combate a la droga ha tenido éxito, que las nueve bases militares que se instalaron en Colombia para combatir el flagelo, no hizo otra cosa que aumentar el narcotráfico, que el mayor cartel de la droga en el mundo, es la Drug Enforcement Administration (DEA), que el mayor consumidor en el mundo es Estados Unidos, con 70 millones, más del doble de la población venezolana, que las mayores siembras de marihuana en el mundo, están en Estados Unidos, que por cierto ya está legalizada en varios estados de ese país, cuyo comercio anual asciende de 17.900 millones de dólares. Tan solo en Nueva York, el puro comercio legal de marihuana, produce 4.000 millones de dólares al año. Y las taquillas de los impuestos se tapan los ojos porque esos ingresos aceitan las maquinarias del Estado. Si hace 28 años tenían 500 millones de empleados en el mundo, de qué tamaña será esa cifra hoy día.

Pero es un hecho que el combate al narcotráfico, no solo no ha dado resultados, sino que éste se incrementa y cada vez ocupa más estratos de la sociedad, si es que queda alguno libre de la droga y su lavado. En 2016, En la sesión especial de la Asamblea General de la ONU sobre el Problema Mundial de las Drogas (UNGASS), quedó claro el desastre global y la total ineficacia de la política "antidrogas" impuesta por los Estados Unidos hace algo más de 50 años. Ante la fuerza de los hechos y la crudeza de la realidad, incluso presidentes y representantes de la derecha y aliados de los Estados Unidos como Ollanta Humala del Perú y Juan Manuel Santos de Colombia, tuvieron que coincidir con los organismos independientes, gobiernos de izquierda o progresistas, campesinos, indígenas, defensores de derechos humanos, ambientalistas, entre otros, que durante décadas se opusieron a que se implementaran las acciones punitivas, violentas y colonialistas de la llamada guerra contra las drogas en sus países.

Me comentaba un amigo que vive en República Dominicana cómo las empresas de su país, abrían sus puertas sin una sola venta de sus mercancías, pagando personal, servicios y mantenimiento. "No tienes ideas, amigo, mi hermano de cómo se lava dinero en este país. Creemos que el 50% de los jóvenes de entre 18 y 35 años, están vinculados al narcotráfico de una u otra manera. Todo el mundo se tapa los ojos, porque este es un país pobre y los gobiernos de turno, se preocupan por darles algún tipo de ocupación a sus jóvenes, pero como es una economía dependiente, donde el dólar rueda igual que el peso, algo tienen que hacer porque el gobierno no les da salidas. Por eso de la noche a la mañana, aparece un casino por el Malecón. En ellos consigues no solo cualquier tipo de drogas, sino la muchacha que tú quieras, incluso si la quieres de 14 o 15 años. Todos se tapan los ojos, y tú no sabes si en realidad eso es un tráfico humano. No quiero contarte lo que pasa en Haití, donde estuve hace como un año".

Casi lo mismo me explicaba una amiga que hace un estudio sociológico en Costa Rica. "No Rafael, no existe nada en Costa Rica que no esté tocado por el narcotráfico. De aquella Costa Rica que no tenía ejército, donde la vida era paradisíaca, ya no queda nada, si acaso grupos defensores de animales que operan en montañas muy alejadas de la cotidianidad. De la noche a la mañana comienzan a construir un mall, y nadie sabe de quién es y porqué lo construyen en un sitio donde con seguridad no habrá un tránsito importante de clientes. Pero nomás construirlo, ya están todos los locales ocupados. Abren el lugar con una tremenda inauguración, y efectivamente te das cuenta de que el flujo de clientes no genera ingresos como para tener ese negocio abierto. Eso para no decirte ferreterías, mueblerías, y un montón de etcéteras".

No está diciendo nada nuevo mi amiga. Un venezolano que estudia en México me dice que el narcotráfico en universidades, liceos y escuelas, está a la par de bares, prostíbulos, garitos, casinos y restaurantes. "La dirigencia política es consumidora. Hay un diputado de la derecha, que todo el mundo sabe, porque se comenta en los más altos círculos sociales, que es un capo de la droga, y nadie dice nada. No viste como el hijo del Chapo amenazó con derramar un baño de sangre si lo intentaban extraditar. Ese es un poder combinado: dinero y armas, o como decía Pablo Escobar "plata o plomo". Una noticia que comienza a prender las alarmas es la cantidad de deserciones en las fuerzas armadas, porque imagínate que le den a un capitán 30 millones de dólares por llevar un camión del ejército lleno de droga a otro estado. Transporte gratis y seguro". Fue la explicación de mi amigo, quien me asegura que, al terminar su posgrado, se regresa a Venezuela.

Ni hablar de los narcoestados como lo era Colombia, o Paraguay, cuyo presidente llena años en las listas de la DEA. O lo que estará ocurriendo en esas islitas del Caribe donde las economías no soportan ningún tipo de presión.

Cuántos gobiernos se tapan los ojos, en aras de ver el circulante de verdes, que de alguna manera disfraza la supuesta reactivación económica, que no es más que una manera de engañar a la población.

La ejecución del general Ochoa en Cuba, un héroe de guerra, peleador en Angola, fue reconocida por el propio Fidel como un error, confesado a Ramonet en su excelente entrevista Fidel, pero qué hubiera ocurrido en la isla si no se tomaba esa decisión en ese momento. He leído en internet a gente que se dicen de izquierda, justificar el narcotráfico como una forma de solventar las necesidades del pueblo y como una manera de sabotear las economías de otras naciones, especialmente la gringa. Cosa que me parece tremendamente peligrosa e ingenua porque el narcotráfico no respeta nada más allá de sus propios intereses. Y tampoco es cierto que pondrá su dinero a circular a cambio de nada. Porque quizás la característica más destacada del flagelo es su conducta violenta, la cual está soportada en un enorme y despiadado ejército con lo más moderno de la panoplia bélica. Ya sabemos que son capaces de fabricar submarinos artesanales pero eficientes, casi todo tipo de explosivo y algunos grupos han incursionado en las armas químicas, porque, además, otro elemento importante es su alianza temporal con distintos grupos bélicos que aparecen en el panorama: sicarios, guerrillas, pandillas, militares, policías y una larga cadena de etcéteras, para lograr su cometido.

No hay duda, los dineros del narcotráfico ya se mezclaron con los de las trasnacionales y con los capitales de algunos Estados, por lo que ejercen una enorme influencia en las sociedades de hoy. Es un elemento indiscutible que deberá ser incluido en todos los análisis que se hagan de aquí en adelante. Sobretodo en los conceptos teóricos.

Caminito de hormigas…

"Coño hermano el hampa está tan arrecha dentro del propio gobierno, que tu no hayas cómo entrarle. El descaro es de antología. Y ni se te ocurra decir nada, porque te siquitrillan de una vez, te acusan de agente de la CIA", me comentó un dirigente la alianza chavista, quien además es amigo.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1668 veces.



Rafael Rodríguez Olmos

Periodista, analista político, profesor universitario y articulista. Desde hace nueve años mantiene su programa de radio ¿Aquí no es así?, que se transmite en Valencia por Tecnológica 93.7 FM.

 rafaelolmos101@gmail.com      @aureliano2327

Visite el perfil de Rafael Rodríguez Olmos para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Rafael Rodríguez Olmos

Rafael Rodríguez Olmos

Más artículos de este autor