4 de julio de 2025.-La empresa, fundada en 1886, anunció que se acogerá voluntariamente al Capítulo 11 de la ley, alegando el aumento de la deuda, las dificultades económicas y los cambios en el gasto de los consumidores, informó Los Tiempos de Nueva York.com
Del Monte Foods, la empresa con casi 140 años de antigüedad conocida por su amplia gama de frutas y verduras enlatadas, se declaró en bancarrota el martes tras lidiar con el aumento de los costos de financiamiento, los errores de la pandemia y la cambiante economía global.
La empresa con sede en California, que enfrenta una deuda garantizada de más de 1200 millones de dólares, anunció que había llegado a un acuerdo de reestructuración con los prestamistas que exige que Del Monte venda la totalidad o la práctica totalidad de sus activos. La empresa, que también produce caldos College Inn, salsas de tomate Contadina y té de burbujas Joyba, informó haber obtenido 165 millones de dólares para ayudar a continuar sus operaciones durante el proceso de bancarrota del Capítulo 11.
"Tras una evaluación exhaustiva de todas las opciones disponibles, determinamos que un proceso de venta supervisado por un tribunal es la manera más eficaz de acelerar nuestra recuperación y crear una Del Monte Foods más sólida y duradera", declaró Greg Longstreet, director ejecutivo de la empresa, en un comunicado.
Del Monte se ha enfrentado durante varios años a diversos problemas económicos y preocupaciones geopolíticas.
Durante la pandemia de coronavirus, cuando más personas comían en casa, la demanda alcanzó máximos históricos, según declaró Del Monte en el documento, y la compañía se comprometió a aumentar los niveles de producción. Una vez que la demanda comenzó a disminuir, Del Monte se quedó con un inventario excesivo que se vio obligada a almacenar, amortizar y vender con pérdidas sustanciales.
La compañía también afirmó haber acumulado una gran deuda desde que fue adquirida en 2014 por Del Monte Pacific Limited, que solicitó préstamos para financiar la adquisición. Los tipos de interés siguieron aumentando y el gasto anual en intereses en efectivo de la compañía casi se ha duplicado desde 2020.