Para qué sirve el PCV y en provecho de qué o quién existe

Jactarse de comunista es tan arriesgado que más de la veces parece una exquisitez que no se saborea, pero es de una importancia tal que sus miembros supongo dormirán todas las noches si es que duermen bien, aburridos quizás de no tener el consuelo de ser alguien importante y de ser oídos como tal, ni valeroso de tomar acciones conducentes y prácticas que ningún otro partido lo haga y, mire usted que están bien escorados y hasta bien guiados si mejor les parece por Marx y Engels quizás y tantos otros que han hecho historia que, hay bastante tela que cortar, pero, parece que los de acá son como un estorbo si es contra del socialismo mejor que, hasta se preguntarán qué socialismo, cuál socialismo, porque además de cegatos son olvidadizos bien distraídos que hasta llegado el momento hasta las manos esconden para no levantarlas y cuando hablan parece en otro idioma que, no es el usual del momento y, lo más grandioso dentro de lo real maravilloso que de nada pierden el apetito y hasta el olfato político por causas que parecen más bien extravagantes, sí eso son, bien raros al participar cuando de tomar decisiones se trata pues, están siempre amargados con mal de rabia como faltos de entusiasmo de buen semblante, o sea más bien malcriados, es decir, son unos malcriados no asalariados, porque tampoco se sabe de qué viven, pero, agentes de la CIA no son, aunque parece ser que Teodoro y Pompeyo Márquez que como político no pasó de ministro de Estado para Asuntos Fronterizos con Caldera, murió como un engañador al igual que Teodoro, no comunistas.

Si escarbamos con calma en el tendedero político de la resistencia y demás culebrones del drama de la Venezuela en apuros, unos se vendían de pulcros idolatrados más de las veces y otros carraspeaban cuando desollaban a los Estados a su antojo que, arrimados a Cuba flameaban de alegría para después odiar a Fidel y al Che Guevara a quienes desplumaron era pocos si los enterraban vivos y, ese ha sido el camino a seguir hoy con ellos y mañana no, y para qué, si dejan guindando a la intemperie en el cuenta con nosotros, es decir, que contar con su apoyo es algo fenomenal que hasta a Chávez con todo y lo bien que los trató más de una vez, lo desairaron por decir lo menos, porque contar con ellos es difícil que más fácil es caer en manos de los gringos con la bandera de la tragedia de la emoción.

¿Existe el PCV? Pareciera que sí, porque son y andan más escurridizos que Jorge Olavarría apoyando el socialismo de Chávez y, hasta le cabe decirles, pero ustedes bien caros se venden y si es en dólares es más y, además nadie sabe para qué ellos como partido existen, si les da lo mismo apoyar que no apoyar el entorno político cercano y siempre están inconformes como niños sin teta de la madre que, eso es lo fenomenal son confusos hasta en su modo de mirar las cosas.

Tienen representante en la AN -no sé cuántos- pero quién sabe para qué, cuál es su papel, a Jorge Rodríguez no lo apoyaron en estos días para continuar como presidente de la AN, se abstuvieron, quizás porque ellos no tienen velas en ese entierro que a lo mejor no es de pobres ni para los pobres o quizás lo tildan de loco enchufado a lo Capriles y, en Barinas quedaron por fuera como si tuvieran firmeza de alcanzar la gobernación que lo más seguro que no, pero se volvieron oposición en no estar de acuerdo con el candidato chavista-psuvista Jorge Arreaza que, como alarmados por un terremoto político nunca visto, de parecer no vivir en Venezuela, sino en las terrazas oscuras de la confrontación sin esperanzas que les cuadra mejor, pasaron de largo y, lo peor que acá no cabe preguntar qué será lo que quiere el negro o será eso, salir del chavismo y que Barinas sea tierra de nadie, de palpitar oposicionista y dentro de un pasado engañoso que se acerque a los adecos que alguna idea queda.

Para ser comunista y pertenecer al PCV debe ser de un progresivo derroche solo de entusiasmo, porque tapar el sol con un dedo es posible que lo consigan, pero llegar al poder ni que Miraflores quedará en las travesías de no estar solo para autoproclamados que ya con Guaidó basta, aunque los gringos lo mantengan chupando medias de la injerencia de nunca acabar con una AN no pasada de moda sino de tiempo.

Una pregunta que pudiera acercarnos en saber lo que no sabemos y, es que, qué hacer para llegar a ser líder dentro del PCV, cursos de qué y cómo qué, porque parece ser que de los que han pasado por la corriente del PCV -ricos y pobres y pelas bolas algunos- este de la actualidad no perdió el Norte, sino la brújula por completo y necesita que lo metan lo más pronto posible en terapia intensiva, si es que tiene chance alguno de sobrevivir para algo...

¿Y entonces, para qué sirve el PCV? Ya sé: para soplar botellas posiblemente, pero para hacer política en este país, parece que no.



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Esteban Rojas


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