Duélale a quien le duela, el Presidente Nicolás Maduró será reeelecto por mayoría de votos el 20 de mayo y su gobierno será legítimo de acuerdo a las normas del Derecho Internacional. Por lo tanto, cuando uno o varios presidentes extranjeros descalifiquen al gobierno venezolano, sólo estarán dando una opinión política aunque ciertos medios de comunicación mentirosos intentarán hacerlo ver como un acto jurídico internacional.
Es común ver imperios aplaudiendo dictaduras en sus países lacayos y a la vez calumniando a democracias de naciones independientes. En medio de la polémica planteada, mi propuesta es propiciar relaciones de paz y respeto mutuo entre Venezuela y EEUU. Siempre lo ratifico desde cualquier tribuna pues no soy anti estadounidense, sino revolucionario antiimperialista. Video desde VTV, Doctor en Derecho .@Jesus_Silva_R manda mensaje de paz en inglés a Donald Trump https://youtu.be/3N4xBct9d9w
Ahora bien ¿quien tiene autoridad legal para reconocer a un gobierno? podemos decir que la Asamblea General de la ONU se aproxima a ello y por debajo de ella nadie. Esta puede medir la legitimidad de origen de un gobierno, mediante un debate que genere un pronunciamiento formal, se trata de un acto jurídico complejo acompañado de un análisis que incluye la legitimidad de ejercicio del gobierno señalado, es decir, determinar si el comportamiento de ese gobierno es democrático.
En cuanto a criterios de evaluación formal, hay puntos concretos que se deben tener en cuenta.
Primeramente, es menester conocer que la unión de territorio, población y poder político organizado es lo que construye a un Estado. Hay Estados donde la soberanía reside en el pueblo y reciben el nombre de República, ejemplo, Venezuela.
Seguidamente, la representación jurídica del Estado la ejerce un gobierno, es decir, un grupo de personas elegidas o nombradas para esa función de acuerdo a la Constitución de cada país. Hay elecciones de primer grado, donde los ciudadanos escogen directamente a su Presidente, esto ocurre en la república presidencialista.
Pero hay también elecciones de segundo grado o indirectas, donde el pueblo vota por intermediarios que luego designan a un presidente, así pasa en repúblicas parlamentarias, caso Italia; y en aquellas donde hay colegios electorales, caso EEUU.
Existen países sin elecciones donde el poder pertenece a un monarca. Cada vez quedan menos reyes de este tipo pues la mayoría de ellos en el siglo XXI comparten el poder con jefes de gobierno elegidos de alguna manera más o menos democrática, caso Reino de España.
Dicho esto, la propuesta internacional es: defender la Carta de la ONU para que prevalezca la legalidad entre países, ir a la Asamblea General de la ONU exigiéndole pronunciarse contra agresiones o amenazas de potencias imperiales que no reconozcan al Gobierno Bolivariano, y en definitiva, rechazar las falacias de entes no autorizados para descalificar a la democracia de otras naciones.
