Son tiempos de mástiles fuertes, de otra forma el viento de la política nos llevará a uno de los dos bandos de la derecha, nos devorarán. Hoy leemos lo que siempre sospechamos, los débiles se corren como la veleta, se los lleva la primera brisa. Un grupo que se denomina, por sinvergüenza, "chavistas críticos y democráticos", se pasa al bando de la derecha externa, al lado de la mud. Siempre ha sido así, los débiles, los que profesan el "centro" terminan en la derecha. Son tiempos de definición, de principios claros, no caben medias tintas, justificaciones; son tiempos de crítica fuerte y de lealtad al Comandante Chávez, a sus principios, al Plan de la Patria, a la Constitución del 99. La ambigüedad, el "centro", es contrarrevolucionario.
La política no es negociación, oportunismo, pragmatismo, esas frivolidades conducen a la derecha, ya lo estamos viendo. Los chavistas son socialistas, antiimperialistas, anticapitalistas, con terror a las oligarquías, luchan contra la lógica del capital, internacionalistas, solidarios con la Revolución Cubana. Los chavistas creen que la base del Socialismo es la propiedad social de los medios de producción, y la conciencia del deber social.
Son tiempos muy difíciles, las dos bandas capitalistas han convertido a la política en un torneo de chismes, mentiras, rasguños sin mayores consecuencias, jaladeras de pelo; en un reality show de televisión, regresaron a la conducta de la cuarta república, pelear para que todo siga igual. Así han educado a la masa, en la trivialidad, el fanatismo, así acepta cualquier absurdo, justifica cualquier barrabasada. El fascismo ya actúa en las dos bandas: tanto prende fuego a un adversario como le cae a palo a un diputado; lanza una bomba contra un muchacho, como ataca con un arma casera.
Las dos bandas del protofascismo ocupan la escena, la crisis explota, y las convicciones se ponen a prueba. Los dos campos de la derecha son en esencia iguales. No se puede por estar contra uno de las bandas aliarse con la otra; por estar en desacuerdo con el gobierno, aliarse
con la gente de "tradición familia y propiedad"; por estar en contra del madurismo ir a parar al campo de ramos allup, los culpables del asesinato de Fabricio, de Lovera.
Es necesario, hoy más que nunca, construir un polo chavista que haga frente al madurismo y a la mud, que rompa la falsa polarización. En esta empresa ponemos nuestros modestos esfuerzos, seguros de que el Chavismo resurgirá del marasmo en que la falsa lealtad, y las excusas tontas lo han colocado. Son momentos estelares para la Revolución, los campos se definen, ya la lucha ideológica no es sólo teórica, la práctica define.
Es momento para un pronunciamiento definitorio, un manifiesto chavista que ponga las cosas en su santo lugar, que sirva para reencontrarnos con el rumbo que nos dejo Chávez. Los líderes históricos deben tomar la iniciativa. Son tiempos de la audacia del 4 de Febrero, de la firmeza contra el sabotaje petrolero. No son tiempos de medias tintas, de negociaciones claudicantes, de oportunismos vergonzantes.
