La década de los años 90 ya mostraba un mundo bajo la opresión del gobierno imperialista de las tinieblas, cuando el Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 echó su suerte, desafiando al bipartidismo nacional y a la hegemonía de un pacto sombrío gestado entre la mal llamada Internacional Socialista y el Vaticano. La iniciativa del Comandante Chávez hizo frente a la barbarie del modelo económico neoliberal que condujo a la humanidad al límite de sus probabilidades reales de destrucción y que trajo desastrosas consecuencias para Venezuela y Nuestramérica. Las explosiones sociales que presenciamos y protagonizamos en ese período decadente del capitalismo más salvaje, fueron una muestra clara de las inequidades sociales y económicas, patentes en el deterioro de las condiciones de vida de grandes contingentes humanos y en el dispendio de nuestros recursos naturales regionales y planetarios.

En 20 años de esta lucha emprendida por el Comandante Chávez, Venezuela ha alcanzado y rebasado las Metas del Milenio, poniendo en evidencia la hipocresía del sistema y la profunda ruptura histórica con el bipartidismo transnacional. Se trata del surgimiento de un nuevo horizonte paradigmático y un nuevo liderazgo ético en materia de políticas sociales, económicas y medioambientales.

Se avecina una Revolución mundial marcada por la Pluripolaridad, apoyada en los fundamentos de la estructura política del Estado democrático y en la base material y energética de Estados que pasan de ser los más explotados, a ser cada vez más soberanos y conscientes.

La actual correlación de fuerzas a favor de Venezuela, dibuja el escudo latinoamericano que hoy convoca efectivamente a un significativo y creciente número de países de todos los continentes, se incrementan los movimientos sociales, nuevos gobiernos de izquierda se levantan, alianzas regionales de nuevo corte empiezan a aparecer como alternativa y se organiza la acción en bloque de países cuyos intereses comunes confluyen en la paz, la democracia y la justicia social.

El proceso revolucionario en Venezuela alcanzó con Chávez su punto de no retorno y al mismo tiempo las fuerzas históricas populares mundiales reclaman una Carta de Paz basada en los Derechos de los Pueblos y en el Derecho Internacional, que exprese la voluntad y la fuerza política para hacer el nuevo mundo, unirse en la diversidad, alzar la bandera de la verdad, exigir el respeto a la dignidad humana y actuar con una nueva moral diplomática internacional.

El Pueblo Venezolano llora la partida física de nuestro Comandante Hugo Rafael Chávez Frías, digno de nuestro amor y gratitud, la República a su Presidente invicto y la humanidad a un gran líder de la construcción de la paz mundial. Sufrimos un dolor terrible y al mismo tiempo una euforia inesperada en declarar que de nuestro dolor hoy nace un mundo nuevo y el sacrificio deviene en una nueva era de logro para la humanidad.

Por algo hemos sobrevivido: vinimos a transformar este mundo injusto por uno de paz. En honor al trascendente legado del Comandante Chávez, a la solidaridad de los pueblos del mundo demostrada con la presencia de la tercera parte de los gobiernos del planeta representada en las 62 delegaciones de los países asistentes a los actos protocolares motivados a sus exequias y unidos en la defensa del principio de autodeterminación de los pueblos, creemos que es el momento de crear el polo de la dignidad, un pacto, un COMPROMISO INTERNACIONAL de luchar con más fuerza por la salida de las bases militares estadounidenses o de la OTAN de América Latina -existentes o en plan de instalarse-, en especial las 7 bases norteamericanas en Colombia, la liberación de los 5 héroes cubanos, el cese de la intromisión de la CIA (EEUU), el Mosad (Israel) y otras corporaciones imperiales de espionaje para la guerra, en los asuntos de nuestros países y gobiernos legítimos y soberanos y el cese inmediato de las agresiones contra Palestina, Siria, Afganistán, Paquistán y cualquier otro país soberano o que esté siendo agredido en cualquier forma, extensible a organizaciones que luchan por una mejor vida para la humanidad.

Prueba del logro del objetivo propuesto por nuestro Comandante, es el sentido apoyo de los pueblos del mundo, sus gobiernos -los cuales representan más del 70% de la población mundial-, los movimientos sociales por la causa de la humanidad, influyentes personalidades religiosas, artistas, pensadores, las marchas de venezolanos y allegados de otros países que se han protagonizado en las últimas horas, en pueblos y ciudades de todas partes del mundo, que con su presencia y demostraciones de amistad, han colmado los espacios de la solidaridad mundial.

Vemos en esta movilización sin precedentes en la historia, la necesidad de una resolución, de un Manifiesto de Caracas por la Paz Mundial, de un llamado a la renovación de la conciencia, a la solución pacífica de controversias, a la aplicación del Derecho Internacional, donde se coloque el derecho de los pueblos por encima de los intereses de las corporaciones y del expansionismo del capital transnacional y el ascenso de una alternativa civilizatoria que mundialice la solidaridad, la soberanía, la autodeterminación y la preservación de la vida en el planeta.

“Contribuir al desarrollo de una nueva geopolítica internacional en la cual tome cuerpo un mundo multicéntrico y pluripolar que permita lograr el equilibrio del universo y garantizar la paz planetaria” es uno de los objetivos históricos más grandes que nación alguna se haya atrevido jamás a plantearse, un objetivo liberador destinado a perseguir la justicia política, económica y social mundial, para salvar la vida en el planeta y que define en gran medida la Nueva Era Diplomática y el Liderazgo Ético Bolivarianos, en suma, es la alternativa estratégica al sistema de dominación mundial.

Nuestro compromiso y al que invitamos a todos los pueblos del mundo, es a construir las bases internacionales del derecho a una existencia política digna e igualitaria, por la educación, la salud, el agua potable, la vivienda, el buen vivir y alcanzar la mayor suma posible de felicidad para todos nuestros pueblos sin distingo de etnia, credo o género. Esta es la base indiscutible del liderazgo nacional e internacional del Comandante Chávez.

¡Chavez vive, la lucha sigue!

Reciban un agradecimiento fraterno y un abrazo bolivariano las 62 Delegaciones de Estado presentes en Caracas, 32 de las cuales estuvieron presididas por sus jefes de Estado:

Angola,

Antigua y Barbuda,

Argelia,

Argentina,

Aruba,

Australia,

Belice;

Bielorusia,

Bolivia,

Brasil,

Canadá,

Chile,

China,

Colombia,

Costa Rica,

Croacia,

Cuba,

Curazao,

Dinamarca,

El Salvador,

Eslovenia,

España,

Estados Unidos de América,

Finlandia,

Francia,

Gambia,

Granada,

Grecia,

Guatemala,

Guinea Ecuatorial,

Guyana,

Haití,

Honduras,

Irán,

Jamaica,

Jordania,

Korea del Norte,

Korea del Sur,

Líbano,

Libia,

México,

Nicaragua,

Palestina,

Panamá,

Paraguay,

PD Korea,

Perú,

Portugal,

República Dominicana,

Rusia,

San Cristóbal y Nieves,

Santa Lucía,

Serbia,

Siria

Slovenia,

Sri Lanka,

Surinam,

Trinidad y Tobado,

Turquía,

Ucrania,

Uruguay,

Vietnam,

Así como los organismos internacionales multilaterales: Mercosur, OEA, Cumbre Iberoamericana, ALADI, Unasur, CAN, CPAL, FAO, UNICEF, PNUD; a los distinguidos Buen Abad, Lula, Sean Penn, Ramonet, José Sócrates, Jesse Jackson, Zelaya, Lugo, Timerman; movimientos sociales: MST del Brasil y los de Grecia, España y Francia.

mariannyrosado@gmail.com