El rendimiento de una revolución se logra con un liderazgo fuerte en equidad y justicia

Partiendo que los factores, son parámetros (valores que sustituyen variables en conceptos de trabajos y dependiendo de los resultados, anima a ampliar las secuencias con un nuevo plan, con la finalidad de incrementar aun mas la producción) o variables que altera el desempeño de un producto y proceso o servicios.  Se puede decir, como primera inferencia, que una revolución es un proceso, donde se forma una fuerza social que tiende a producir un rendimiento creciente en el sentido dinámico, actuando en forma persistente y con tendencia en sentido general. Y mediante la tecnología y la organización, siempre lucha para aprovechar mejor sus energías y reducir el costo que demanda la consecución de un cierto resultado.

A medida que un pueblo internalice voluntariamente, los conceptos ideológicos de una revolución, en esa medida se produce un rendimiento creciente en sentido dinámico. Esto lleva a una segunda inferencia: que la revolución crece, cuando se cuenta con recursos de diversas índoles, ya que para optimizar el proceso, hay que desarrollar un ser integral para así obtener un rendimiento creciente y continúo. Sin embargo, como lo dice el economista Paúl A. Samuelson, en su libro "Curso de Economía Moderna" (publicado por primera vez en 1945 y ampliado en 1983) en ella conceptúa  la Ley de crecimiento decreciente, como: El aumento de factores, en relación con otros comparativamente fijos, causara un aumento de producción, pero a partir de cierto momento la producción adicional resultante como consecuencia del incremento en los factores será cada vez menor, disminuye los rendimientos.  La consecuencia de este hecho, es que las nuevas dosis de las variables intervinientes, tienen cada vez menor cantidad de  factores constantes.

Todo proceso como parte inherente a su naturaleza, tiene sus límites de bordes. A partir de este principio, se puede desarrollar una tercera inferencia: una revolución como proceso, tiene un límite superior, donde en forma espontanea se rebela un sector de la población. Aunque  existan los mecanismos para aplacar la rebelión, se produce las condiciones para un cambio. Ese es el momento donde hombre y mujeres, involucrados se organizan para diseñar estrategias para la  toma el poder y desarrollar un fuerte liderazgo en equidad y justicia. Indudablemente, que ese liderazgo debe de soportarse, por un proceso ideológico, que tiene como objeto lograr los objetivos de la revolución.

Cada líder en su entorno, va creando una fuerza social en busca de su cota de poder para lograr los objetivos de la revolución. Se requiere no dejar al azar los liderazgos locales, porque ellos garantizan que las fuerzas sociales parciales sea un valor agregado  para el proceso revolucionario. Además, mediante un liderazgo fuerte surgen las fuerzas de las ideas, que incrementa la magnitud de las masas con una inquebrantable voluntad de mantener la dirección. Un líder que debe ser capaz de sumar esas fuerzas, cuya resultante enrumba a la revolución a cubrir sus objetivos originales. En caso que se requiere un cambio en el proceso, es menester desarrollarlos como  proyectos estratégicos en una segunda etapa.  Indudablemente, que el error es parte de la naturaleza humana, pero hay errores que dejan cicatrices y causa a corto y mediano plazo, inconformidades, desaliento y descontento.

Sin embargo, no solo se requiere un liderazgo fuerte, sino también que el líder debe dotarse de herramientas que le permita manejar información confiable.  La intencionalidad del líder es hacer en implementar políticas para resolver situaciones que puede alterar el orden y debe estar fundamentada, en beneficiar a un sector mayoritario del pueblo. Sin embargo, tiene que estar consciente de las debilidades humanas.  En base a la ley de crecimiento decreciente, existen humanos que se motivan o lo motivan  a desviar parte de los recursos y pretende obtener mediante el engaño los objetivos, con la diferencia, provocando la ineficiencia del proceso, seleccionando como actores a individuos que no tiene la mínima conciencia de organización y tecnología.

En un supuesto caso, se determina desvío del proceso revolucionario. Es imperante diagnosticar, predecir y reconocer a los líderes que requieren.  Si el  diagnostico se desarrolla en las comunidades donde no se resuelven los problemas Basta con analizar el entorno de las personas más influyente en la comunidad, para identificar al hombre y a la mujer que esta obstruyendo. Este mismo escenario permite identificar al hombre o a la mujer que han evitado el descalabro del proceso, ayudando a reducir los costos, organizando y aportando su energía gratis. Esos son los lideres que requiere el proceso revolucionario, con la finalidad de oxigenarlo y continuar con su crecimiento o para iniciar un nuevo crecimiento o establecer estrategias que evite la desaceleración.

(*)  Ing.Esp

basilioalezama@gmail.com



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Basilio A Lezama (*)


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