El discurso de Gustavo Cisneros: ¿un paso al frente?

Eso lo sabremos en un futuro cercano. Lo que sí debemos reconocer por ahora es lo significativo del discurso que empieza con un aparentemente sincero, “Amigas y amigos”. Este discurso es importante por lo que dice tanto explícita como implícitamente.

Explícito está el reconocimiento de los errores cometidos por los medios de comunicación: “Después de los acontecimientos de abril de 2002 y del referendo revocatorio de 2004, me convencí aún más que un canal de televisión no puede, ni debe tomar la posición de ser protagonista de un conflicto político, por mucho que favorezca o se oponga al gobierno.” Cisneros expresa que los canales de televisión no pueden ser parcializados políticamente y que esta actitud, “no ayuda a resolver el conflicto, sino más bien a extenderlo”.

Explícito está lo que en opinión de Gustavo Cisneros debe ser el papel de la televisión: “entretener, suministrar información y reportar noticias de la manera más equilibrada y objetiva que sea posible”.

Pero lo más significativo del discurso del magnate venezolano es lo que dice implícitamente.

Por un lado, Cisneros parece distanciarse de aquellos empeñados en contrariar al gobierno venezolano a lo que cueste y a como de lugar. Cuando Cisneros expresa que, “Venevisión cumplió los procedimientos burocráticos establecidos por la nación para solicitar la renovación de la licencia”, al mismo tiempo, por el momento histórico, está dando a entender que hubo “alguien” que no los cumplió.

Por otro lado, y quizás lo mas importante, implícito en su discurso está finalmente el claro reconocimiento del actual gobierno como autoridad legítima de la República Bolivariana de Venezuela. Eso da a entender con sus palabras: “Venevisión no logró la licencia por los 25 años que solicitó... Venevisión está analizando la apelación a esa decisión, a través de los procedimientos regulatorios establecidos”.

Con esto Cisneros acepta la decisión del gobierno de darle licencia por solo 5 años. Y, aunque en desacuerdo con la decisión de solo 5 años, la apela a través de los procedimientos legales establecidos, no a través de lloraderas, marchas y protestas como lo hubiese hecho “alguien”.

Veo un par de pequeños problemas en el discurso de Gustavo Cisneros. Uno es de concepto.

Es un error meter en el mismo saco a los medios de comunicación privados y a los que son manejados por el estado venezolano. A pesar de que la responsabilidad social es la misma, ambos tienen diferentes propósitos. Es claro que los medios del estado trabajan a beneficio del estado. Además, es imposible exigirle a un empleado público, quien en algunos casos tiene acceso a información sensitiva relacionada con la seguridad nacional, que “imparcialmente” la exprese a través de los medio. Por otro lado, también es claro que las emisoras privadas funcionan, y así debería ser, con el principal propósito de hacer dinero.

El otro problema que tengo con el discurso de Cisneros es Cisneros mismo.

No olvidemos que este caballero es amigo personal de la familia Bush quienes pertenecen al partido Republicano. Este caballero también tiene amigos de igual o más influencia en el partido Demócrata. En un pasado no muy lejano Cisneros fue condecorado por Madeleine Albright, la ex Secretaria de Estado en los tiempos de Bill Clinton.

También es imposible dejar pasar desapercibido el hecho que Gustavo Cisneros tiene lazos familiares con “alguien” a través de la familia Phelps.

Quizás sea cierto que Cisneros cambió su posición respecto al gobierno venezolano. Pero, sus verdaderos “amigos y amigas”, los que desde el Norte todavía apoyan a “alguien” y a algunos de sus familiares, NO la han cambiado.

No pasará mucho tiempo antes de que nos enteremos si el discurso de Cisneros fue un paso al frente hacia la resolución del conflicto político. Mientras tanto, prohibido bajar la guardia. Reconocer al chavismo como gobierno es para algunos diferente a tener que reconocer a Chávez como presidente. En su discurso, Cisneros reconoció SOLO al gobierno.

Considerando la realidad política, “chavismo sin Chávez” puede convertirse en el común denominador que une a los que añoran tolerancia y reconciliación, especialmente con sus familiares y amigos. Seguiremos informando…

Elio@vheadline.com




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Elio Cequea


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