La frase que sirve de titular esta semana corresponde al presidente Nicolás Maduro, quien en nueve días se refirió dos veces al mismo asunto, ratificando los nexos de amistad con las colombianas y los colombianos.
El Libertador siempre propicio esa relación: en 1815, propone la creación de un solo país entre Caracas y Bogotá. Militares ambiciosos, como Santander desde 1813 en el Táchira y Páez cuando dividió a la Gran Colombia, se opusieron al esfuerzo de Bolívar.
Por ello el Libertador pide en diciembre de 1830, el cese de los partidos (de la división) y que se consolidara la unión entre los dos países.
El presidente Hugo Chávez, continuador del pensamiento de Bolívar hizo siempre planteamientos de acercamiento hacia el pueblo colombiano y replanteó en nuevas condiciones la unión entre Colombia y Venezuela, una sola nación entre los dos países. Y en el Plan de la Patria pide una relación especial con Colombia.
Supo diferenciar a los Uribe y a las camarillas políticas y militares anti venezolanas del resto de los colombianos.
Sin embargo, con motivo de las guarimbas y ahora en la lucha contra el contrabando, han surgido en el Táchira posiciones de rechazo a ultranza a Colombia y a los colombianos.
No se critica a sectores empresariales causantes de niveles inflacionarios muy altos, no hay denuncia al gobierno de EE.UU., se niega la historia al desconocer los vínculos familiares fronterizos, suponiendo que los puentes dividen realidades humanas incompatibles.
Se asocia a los vecinos y su país a cualquier delito, infracción o situación anómala que se presente en la frontera. Debe añadirse que el embajador de Colombia Luis Eladio Pérez no lo ha recibido ningún funcionario regional, en sus tres visitas al Táchira.
Esto al lado de oposición a Bolívar y Chávez, crea fisuras entre los pueblos, lo cual facilita los planes de agresión que sectores norteamericanos y uribistas, tienen contra Venezuela.
