En una sociedad cada vez más materialista, escéptica, se nos trata de imponer la cultura bélica desde EEUU y Europa, pueblos que confían mas en sus ejércitos como instituciones que en los Parlamentos, incluso, en las campañas presidenciales predominan las imágenes de guerra, lo hizo Reagan lo hace Obama; si no fuera por rebeldes como Gadafi, Hussein, Castro, Chávez, Correa, Morales, Ortega, Ahmadinejad, la homogeneidad y la obediencia dejaría al mundo esclavizados al servicio de las naciones mas desarrolladas.
Todo esto se sabe lo que pasa es que la gente tiene mala memoria y otras veces los gobiernos utilizan esa desmemoria en sus beneficio mediante programas de influencia psicológica masiva; EEUU tiene estos planes desde hace 100 años y todos esos datos ilustran miles de libros pero no se ha podido encajarlos entre si para crear una mejor conciencia colectiva, porque, los videos juegos, la TV basura, las crisis económicas, los conflictos, guerras, la sobrevivencia absorben el tiempo y la mente de las personas que olvidan los complots y el espionaje usando satélites en el espacio exterior hasta las conspiraciones que son permanentes.
Julián Assange el 1 de diciembre del 2011 en una rueda de prensa dijo “hace una década la tecnología de vigilancia era encubierta, secreta, pequeña, hoy, es una industria internacional” informo el fundador de Wikileaks a los medios en Londres.
“Empresas de occidente venden esta tecnología también a dictaduras, estas a su vez usan esta tecnología para buscar a las personas o hasta asesinarlas” según revelaciones de Wikileaks, “la venta de esta tecnología alcanzo parámetros tales “que el mundo se acerca a un estado de vigilancia totalitario y global”.
“Suena como su fuera una película de Wolliwood, pero, a partir de ahora los sistemas de intercepción masiva creados por empresas que laboran para los servicios de inteligencia occidentales son una realidad“añadió Assange.
En el ultimo año Wikileaks sanaba con mucha frecuencia lo mismo que Assange por el juicio y la extradición a Suecia, ahora, Wikileaks revelo documentos que prueban que empresas de EEUU y Europa ganan dinero con la tecnología de vigilancia que, entre otros países es usada por gobiernos árabes para perseguir a sus ciudadanos, se presume que esta tecnología fue utilizada para dar con Gadafi, la pregunta es ¿Cuánto falta para que esta tecnología llegue a los carteles de la droga, bandas criminales o sea utilizada por los EEUU con ganas de encontrar a un millón de terroristas en la lista del FBI?
Los programas sirven para escuchar,
conseguir acceso a datos y correos electrónicos y hasta sacar fotografías
con teléfonos móviles, pero, como esta tecnología ya existe, ahora,
las victimas no se darán cuenta que fue instalado un software en sus
móviles por la CIA, el Mossad, MI6, por la ONU, por el vaticano, o
por la mafia, como todo, esta tecnología tiene que masificarse para
venderse en el mercado como un celular; la humanidad corre el riesgo
de ser ubicada o metida en una conspiración desde las cedulas con micro
chips.
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