¡ BASTA DE IMPUNIDAD!

La Corporación Jurídica Internacional solicita enérgica respuesta internacional contra difamadores de la nación y autoridades venezolanas.

Nota de Aporrea: Transcribimos textualmente la carta enviada por Ernesto Amezquita (presidente de la Corporación) con fecha 13 de Agosto; la misma fue dirigida al Presidente, Vicepresidente y Canciller de nuestro país. Desde aquí nos solidarizamos con la intención de fondo, démosle un parao a la impunidad. La razón se explica por sí sola ¡Con impunidad no hay justicia!.
Con mi habitual respeto acudo a Usted, indignado por el manejo dado por la gran prensa Colombiana a las temerarias e irresponsables afirmaciones del supuesto sargento que dijo llamarse MOISÉS BOYER RIOBUENO.
Tales venenosas y pagadas declaraciones, demuestran una vez más la urgente necesidad de crear un FRENTE JURÍDICO INTERNACIONAL, en el que yo tanto he insistido, en cada País, que de respuestas claras y contundentes en el terreno judicial a estos cobardes atentados políticos contra el proceso renovador que avanza en Venezuela y al que le temen sea ejemplarizante para los pueblos vecinos. Estas viles acciones serán cada vez más frecuentes e inconcebibles en la medida en que se profundicen las reformas y trate de aislarse aun más el modelo neoliberal y globalizante que pregona el capitalismo salvaje.
Es necesario utilizar las vías jurídicas y tribunales nacionales e internacionales para procesar a los autores materiales, en lo posible intelectuales y así mismo defender el buen nombre, la honra, a las autoridades legítimamente constituidas, como en este caso al señor Vicepresidente, con lo cual se está defendiendo expresamente es al país y a su revolución.
Según el principio de territorialidad de la Ley Penal, los delitos deben ser juzgados donde se cometan, y de acuerdo a esta jurisdicción; por tanto estamos frente a los tipos penales colombianas de falsedad, calumnia, injuria, entre otros, más los de la legislación penal venezolana en donde también deberá juzgarse a este mercenario.
De no tomarse medidas enérgicas y determinantes es perfectamente viable que proliferen miles de personajes de esta calaña que por supuesto existen en todo el universo, los que pagos y predispuestos a vociferar contra el avance incontenible y renovador de este heroico proceso no cesarán en su afán de desprestigiar los esfuerzos del gobierno y el pueblo trabajador venezolano.
Condenable es igualmente, la actitud de doble moral de la gran prensa que se deja utilizar a sabiendas de la falsedad de la fuente, por lo cual también deberá responder judicialmente, presos en la mayoría de los casos por lo que acertadamente llama nuestro Nobel de literatura “el síndrome de la chiva”.
Es tiempo, que el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela se haga respetar en todos los campos, que no asuma una simple actitud contestataria y se desgaste en aspectos que deben corresponder a la justicia.
Quedo pues, a su disposición como abogado penalista internacional, para proceder a favor de vuestros derechos y de la nación si así lo considerasen conveniente, por conducto de la Cancillería o del Señor Embajador en Bogotá.
De la manera más cordial, me suscribo con un fraterno abrazo Bolivariano, solicitando que no se permitan más estas vagabunderías.
Cordialmente,
ERNESTO AMEZQUITA CAMACHO.







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