No compartimos la opinión del Alcalde Rangel Avalos de que el problema de la recolección y disposición de los desechos sólidos se resuelva con incrementar las tarifas.
Allí hay una falacia mayúsculas que quienes somos vecinos del Municipio Sucre no podemos calificarla de otra manera, pues no sólo es que ya desde algo más de seis u ocho meses que se incrementaron los recibos del servicio dizque por un llamado “servicio plus”, cuya mayor eficiencia no la hemos visto por ningún lado, sino que, por el contrario, desde que se impuso ese aumento inconsulto y sin aviso ni protesto, ya los camiones recolectores no pasan todos los días por la zona donde vivimos, como antes lo hacían.
De manera que eso hay que revisarlo con lupa y no basta que la burocracia municipal lo haga, sino que en esa tarea bien importante de control debe participar la colectividad y en representación de ella voceros estudiosos de los temas de los servicios públicos, aquellos especialistas profesionales en materia de costos que los debe haber en gran cantidad y, obviamente, de todos aquellos otros vecinos que estamos seguros manejan ideas y propuestas interesantes en la dirección de lograr que cada día ese servicio sanitario se preste con la mayor eficiencia y calidad.
No puede ser que todo haya que resolverlo a realazo limpio que es lo que siempre ha ocurrido en el país. Hay que averiguar con certeza y con ojos bien agudos qué problemas están ocurriendo en los procesos de contratación de servicios vitales como ese que nunca se han prestado a satisfacción de las comunidades y que han significado el manejo de cuantiosas sumas de dinero que no solamente reditúan de forma satisfactoria a los empresarios del ramo, sino que habría que averiguar a quienes más, pues no descartamos que detrás de esos contratos mil millonarios deben estar medrando unos cuantos zamuros de la burocracia municipal.
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