No les arriendo ganancia a los contrarrevolucionarios a quienes he combatido desde antes del arribo de Hugo y luego su primer heredero Nicolás, lo escribo así para que se mueran de envidia y frustración, porque en sus desconocimientos macabros antes y después de las campañas electorales pifian, dejaron de mencionar a la maricori, menos al Edmundo beodo y tambaleante, como opositores disociados pecan por traer luto, miseria de conducta humana y un pitiyankysmo antidemócrata horroroso y diplomáticamente disparatado.
Cabe una acotación interesante a estas alturas del proceso bolivariano y socialista de cambios en la Venezuela siglo XXI, en términos legislativos sabemos del primer logro de la revolución, la Asamblea Nacional aprobó la Ley Especial de Regularización Integral de la Tenencia de la Tierra de los Asentamientos Urbanos y Periurbanos, así tuvieron acceso los sectores populares a la posibilidad de viviendas propias, porque en tiempos adecos y copeyanos en el poder, las declaraban zonas verdes sin importar si las mismas tenían décadas bajo la propiedad de terrófagos, negociantes quienes en conchupancia con funcionarios venales se las vendían al Estado por precios varias veces más altos es decir, onerosos e ilegales haciéndose de fortunas a todas luces mal habidas, era política de Estado habían comprado de los allegados a AD y COPEI en 40 años de corruptocracia impune.
Cuando acertadamente la revolución ha insistido en considerar a un cúmulo de individuos, gente sin conciencia patria, hay ejemplos elocuentes de su pésima cobertura informativa y de la manipulación disociada en las noticias de sus medios, escriben o transmiten lo que les venga en gana ocultando o deformando con opiniones el fondo de las noticias poniendo en duda el significando de beneficios oficiales decretados, o implicando sospechas de ser cierto el beneficio colectivo dispuesto por el gobierno revolucionario en favor de la salud, educación, vialidad, o cualquier necesidad comunal sugerida por los organizados en barrios y urbanizaciones, pueblos y ciudades, para exigirle al ejecutivo nacional, a las gobernaciones, alcaldías, concejalías, diputaciones, etc., hacer como dice Maduro Moros a la población sin discriminación, más calle y menos escritorio.
Al momento de redactar la presente leo que en el año 2011 el Parlamento en manos rojas rojitas se desplegó en importantes leyes, entre ellas la Ley Orgánica de Emergencia de Terrenos en La Gran Misión Vivienda Venezuela que, permitió la recuperación del suelo urbano en pro de los más necesitados, por algo la oposición siempre descocada quiso en las 47 horas donde derrocaron momentáneamente a Chávez en 2002, hacer aprobar una Ley que pasara los terrenos ocupados por la Misión Vivienda Venezuela, a manos de la banca privada, como era la fórmula en los gobiernos blancos y verdes.
La Asamblea Nacional ocupada por la derecha opositora impuso una única Ley a fin de privatizar los apartamentos ocupados por quienes fueron favorecidos por la Misión Vivienda Venezuela, que alcanza a millones de venezolanas y venezolanos, no lo lograron y en el correr del tiempo caen en una ayuda indirecta por culpa de las perversiones de la oposición endemoniada, a nutrir la mayoría elocuente y a la vista con votos hacia el Polo Patriótico, frenados los escuálidos malévolos por decisiones del Tribunal Supremo de Justicia, se les frustraron sus ansias de dominar al pueblo que estuvo desasistido por la adecopeyanquicracia vigente hasta 1999.
Los adversarios políticos del bolivarianismo inspirado por Chávez desde el triunfo en las elecciones de 1998, remordidos porque el mapa nacional en cualquier elección los votantes prefieren legalmente a los chavistas, tras comicios observados nacional e internacionalmente, a los contrarrevolucionarios, no se les ocurre darle el visto bueno por ejemplo al retorno de compatriotas traídos desde cualquier lugar del mundo, incluidos en vuelos pagados por nuestro gobierno chavista en disposición bolivariana de aprendizaje global, respuesta nuestra a quienes entusiasmaron a compatriotas de cualquier parte de Venezuela para marcharse y una vez vejados en el exterior, se olvidaron de ellos desde la oposición.
Los aguajeros dirigentes agarraron dinero de la USAID gringa, plata en dólares que va a parar a los bolsillos de los líderes ladrones opositores conocidos integrantes de un gobierno interino, aceptado y aceitado por el anterior período de Donald Trump, quien recibió por unos minutos al Juan Guaidiota venezolano, posterior granuja de la banda de malhechores politiqueros ladrones venezolanos de oposición, asaltantes que, no solo se apropiaron de ganancias y pertenencias petroleras en el exterior, robaron también a los EEUU donde están sus amos de influencia, engañaron y esquilmaron a jefes europeos y de diferentes partes del mundo, alborotaron con el cuento de una "dictadura en Venezuela", inexistente, les quedó fue repartirse el botín y pelearse entre ellos a la hora de hacerlo, ladronzuelos de corbata y esmoquin pero a la hora de la verdad vende patrias, irresponsables que, con su conducta granuja ayudan a la formación de mando casi total por los revolucionarios bolivarianos leales siempre y traidores nunca a su terruño natal.