Rastros del tiempo (LXVIII)

El Mayo Francés: un ejemplo de lucha por la reivindicación social de los pueblos

El Mayo Francés, también conocido como "Mayo del 68", fue una serie de protestas estudiantiles y huelgas generales que sacudieron a Francia, entre los meses de mayo y junio de 1968. Este movimiento, que comenzó en las universidades de París, rápidamente se extendió a otros sectores de la sociedad francesa, desafiando las estructuras políticas y sociales establecidas. Aunque no logró derrocar al gobierno de Charles de Gaulle; aunque de acuerdo a los hechos y acuerdos, el Mayo Francés no buscaba hacer una revolución, sino conquistar sus "propias vidas", como lo afirma Daniel Cohn-Bendit, quién se convirtió en vocero de los estudiantes de Mayo del '68, haciendo énfasis en el sentido de la consigna: "Queremos vivir como lo concebimos", destacando que "El movimiento emerge como un movimiento que quiere ante todo hacer énfasis en la autonomía y las opciones de vida de los individuos (…) en realidad y ante todo, una revuelta por la vida cotidiana, la música, la relación entre hombres y mujeres, la vida, la sexualidad, la liberación. Esto es lo que hace el '68...". Sin embargo, El Mayo Francés, tuvo un impacto profundo en la cultura, la política y la sociedad francesa, como ejemplo de lucha para los pueblos del mundo.

Entre las causas del Mayo Francés, se encuentran: el descontento estudiantil con el sistema educativo; la falta de oportunidades laborales para los jóvenes; el autoritarismo del gobierno de De Gaulle y la influencia de las ideas de izquierda y del movimiento contracultural. Las protestas comenzaron en la Universidad de Nanterre, cerca de París, y se extendieron rápidamente a otras universidades y facultades. Los estudiantes ocuparon edificios, organizaron debates y exigieron reformas educativas y sociales.

Era el 6 de mayo en las calles de París se manifestaba una combativa multitud de ciudadanos franceses. Unos 400 estudiantes se encontraban apostados dentro de La Sorbona, y otro tanto alrededor de la Universidad, resistiendo la entrada de la policía a la institución. El presidente Charles De Gaulle declaró el estado de sitio, y los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, cada momento se hacía más violentos. En la noche del 10 de mayo, las fuerzas especiales de la Compañía Republicana de Seguridad, reprimieron a los estudiantes. Fue uno de los episodios más violentos, recordado como "la noche de las barricadas en el Barrio Latino". Los estudiantes respondieron ante la represión policial con adoquines, que se convirtieron en un ícono de aquellas revueltas. Las centrales obreras y sindicales, el 13 de mayo convocaron a una huelga general, sumándose a la protesta estudiantil.

Representantes del Partido Comunista y del Partido Socialista salieron a las calles. Pararon los trenes, las fábricas, los aeropuertos, las industrias, paralizando la economía francesa. Millones de trabajadores se declararon en huelga, exigiendo mejores salarios, condiciones laborales y derechos sindicales. Las protestas y huelgas se extendieron por todo el país, desafiando la autoridad del gobierno y generando un clima de incertidumbre y tensión, que hasta ese momento, no había registrado precedentes, de huelgas tan multitudinarias en Francia, que hubiesen logrado reunir alrededor de seis millones de huelguistas: un pueblo en acción de protesta, por el logro de reivindicaciones, que en gran parte fueron logradas.

El gobierno de De Gaulle, inicialmente respondió con una combinación de represión y concesiones. En un principio, intentó disolver las protestas con la represión policial, pero la violencia generó aún más apoyo a la protestas. Posteriormente, De Gaulle ofreció algunas concesiones a los estudiantes y trabajadores, pero estas no fueron suficientes para calmar la situación. Luego de casi un mes de protestas y huelgas, el 27 de mayo, como resultado de las negociaciones entre el gobierno, los sindicatos, las organizaciones empresariales y las centrales obreras, firmaron los "Acuerdos de Grenelle", donde acordaron un aumento salarial del 35%, la reducción de la jornada de trabajo, y aumento de los días de vacaciones, entre otras conquistas. La Sorbona se mantuvo ocupada hasta el 16 de junio.

Durante casi un mes de protestas, millones de personas se movilizaron dejando un saldo de siete muertos y centenares de heridos, se logra la consigna "vuelta a la normalidad", y finalmente, De Gaulle convoca elecciones anticipadas, para el 30 de junio, que ganó su partido: la Unión por la Defensa de la República (UDR), con una amplia mayoría, poniendo fin al Mayo Francés, siendo electo George Pompidou, quién había sido su primer ministro durante la revuelta, asumiendo la conducción del gobierno francés, como presidente, desde 1969 hasta su muerte en 1974.

El Mayo Francés tuvo un impacto significativo para la sociedad francesa y el mundo. El movimiento generó un debate profundo sobre la autoridad, la libertad, la igualdad y la participación ciudadana. También impulsó reformas educativas y sociales, y contribuyó a la modernización de la sociedad francesa. El Mayo Francés sigue siendo un símbolo de la rebeldía juvenil, en defensa de los pueblos y la lucha por un mundo justo y libre, ya que desde entonces, para el mundo entero las calles se convirtieron en el escenario político para las luchas populares.



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Reinaldo Chirinos

Licenciado en Educación Mención Desarrollo Cultural. Facilitador del INCES.

 reinaldoc06@gmail.com

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