Buceando en la historia oculta, desdeñada y cruenta de nuestra sagrada Venezuela

  1. He terminado de leer el libro del norteamericano John Lavin, titulado "Una aureola para Gómez". Viene en un formato de 1/16 de pliego, contiene 432 páginas y diez gráficas. Fue impreso en Madrid por Industrias Gráficas España, y llevado a las librerías de Venezuela por Distribuidora Continental. No trae fecha de publicación, pero puedo decir que debió haber salido a la luz pública en 1944, más o menos. Es un libro bárbaro y racista, pro-imperialista, con muchas incongruencias, que trata de ensalzar la figura del dictador Juan Vicente Gómez, y de decirnos que fue un tirano que nos hacía falta y que contribuyó mucho al "progreso", a la paz y a la armonía social de los venezolanos. Es tan bárbaro que describe con suma crudeza los métodos represivos y criminales de los verdugos de Gómez, y llega a decir que este Bisonte fue para nosotros un mal necesario para una Venezuela despedazada y sin rumbo. No obstante ser un libro "reaccionario" recomiendo su lectura para aquellos que saben leer entre líneas y que tienen criterios propios, y sentido de patria.
  2. Hay algunas revelaciones interesantes en este libro que iré desglosando poco a poco. Dice este racista John Lavin en la introducción a la guerra emprederán Cipriano Castro y Juan Vicente Gómez (p. 25): "La nueva raza que se formaba de la mezcla de español. Indio y negro, mostraba signos de un debilitamiento espiritual que retardaba el progreso nacional, y al estabilidad del gobierno. La masa de mestizos incultos tenían en su contra un resentimiento constante y carecían por completo de moderación y de conocimiento del arte del propio gobierno. Impulsivos y confundidos por estrechos razonamientos, su espíritu insubordinado rehusaba contribuir a la unificación de un partido nacional y al logro de propósitos comunes. Divididos por fuertes ambiciones particulares , los pequeños partidos existentes eran la camarilla de seguidores de líderes antes que organizaciones constituidas con base en filosofías políticas".
  3. Añade el autor un poco más adelante: "…ser enemigo del gobierno representaba una distinción de honor… los caudillos sabían cómo ganar adeptos con gran elocuencia y frases insinceras, despertándoles el deseo de aventuras y de glorias marciales… La historia de Venezuela es un círculo viciosos de rebeliones armadas".
  4. (p. 34): "Donde se mata el novillo, es el lugar para desollarlo, un dicho muy corriente entonces para finales del siglo XIX y principios del XX, que quería decir que cuando se recibía un insulto debía vengársele en el sitio sin demora… Para los sensibles venezolanos, el insulto podía consentir en cualquier expresión susceptible de ser interpretada como irrespeto o sarcasmo, aunque fuese a menudo necesario exagerar al extremo, para encontrarle una intensión ofensiva. El duelo era a muerte, a las primeras palabras provocativas los revólveres salían a relucir….".
  5. Venezuela siempre ha sido víctima de las agresiones terroristas de Europa y estados Unidos. A finales de 1887 Venezuela había roto relaciones con el imperio británico porque éste nos arrebató el trozo de la Guayana Esequiba, y entonces para completar sus crímenes el buque de guerra británico "Forward" llegó de Trinidad portando un ultimátum contra nuestro país. Nosotros veníamos enfrentando a los abusos de la canalla inglesa desde 1835. Venía aquel buque pirata el "Forward" para tomar represalias con una demanda de tipo material porque nosotros habían detenido "ilegalmente" a algunos miembros de esta tripulación. Llegaban los bellacos ingleses presentando un ultimátum que si en siete días no le pagábamos nos declararían la guerra. El imbécil de presidente que entonces teníamos, el montonero Hermógenes López, traidor y miserable, le pagó la supuesta indemnización a estos malditos corsarios.
  6. En 1895 la Pérfida Albión estableció un puesto de policía en el río Uruan, dentro de nuestro territorio. Como Venezuela detuvo a los intrusos ingleses, el pirata gobernador británico en Demerara lanzó un nuevo arsenal de amenazas contra Venezuela. Otra vez los piratas ingleses exigieron nuevas indemnizaciones, amenazando con que si no se las pagaban atacarían nuestros puertos y arrasarían con las poblaciones cercanas. El imbécil presidente que entonces teníamos, Joaquín Crespo, débil e ignorante, salió a pedirle ayuda a un degenerado peor que los ingleses, al presidente de los Estados Unidos y para que éste esgrimiera ante los piratas ingleses, la Doctrina Monroe. Aunque gringos emitieron la siguiente nota: "Los Estados Unidos son virtualmente soberanos en este continente y sus fallos representan la ley…", a la final acabaron por hacerse los locos, del mismo modo como ocurrió con el caso de Las Malvinas.
  7. Y otra vez, de nuevo, por el "incidente en el río Uruan", Venezuela, por tener un gobierno débil, también acabó indemnizando a los piratas británicos. A finales del siglo XIX en Venezuela se vivió en un ambiente fuertemente anti-británico. Frecuentemente los comercios ingleses eran boicoteados y apedreados, los editoriales de los periódicos nuestros estaban llenos de un sentimiento contra estos piratas, y se llegaron a instalar centros de reclutamiento para enfrentar cualquier arremetida del imperio inglés contra nosotros. De hecho, se creyó en una inminente invasión británica y se emplazaron baterías en las colinas de La Guaira para proteger la bahía de estos filibusteros. Durante los carnavales de 1895 hubo carrozas que se mofaban de los piratas ingleses e incluso soldados venezolanos que arrastraban efigies que simulaban marinos británicos. Por todas estas razones Cipriano Castro decía que Joaquín Crespo era un cobarde y un inepto. Castro estaba harto de la degenerada manera como ingleses, franceses y alemanes nos robaban exigiendo indemnizaciones por cualquier tontería.
  8. Levin dice, que finalmente en 1989, con ayuda de Estados Unidos se llega a un arreglo, ante un tribunal en París, nuestra disputa fronteriza con Guyana. Que la decisión fue concederle a Gran Bretaña 160 mil millas cuadradas que reclamaba y darle a Venezuela sólo Punta Barima y algunos yacimientos de oro. Que este veredicto sirvió para resolver ese viejo conflicto con Inglaterra y permitir así la reanudación de las relaciones diplomáticas entre los dos países. Como consecuencia de estos y otros problemas matan de un tiro a Joaquín Crespo teniéndose la certeza de que la bala provino de sus propias filas.
  9. En 1900, el viejo multimillonario de Manuel Antonio Matos, quien se consideraba eterno ministro de Venezuela de todos los gobiernos por obra y gracia de Dios, escribió una carta al presidente Cipriano Castro diciéndole que cambiara el gabinete según sus recomendaciones. Al terminar de leerla, Castro mando al imbécil de Matos a la Rotunda, a él, a comerciantes e industriales, y a los prominentes funcionarios de los principales bancos de Venezuela. Los hizo marchar por las calles de Caracas en fila india entre dos líneas de soldados desde la Rotunda hasta la estación de ferrocarril que los llevaría a la fortaleza de Puerto Cabello.
  10. En 1900, Colombia estaba destrozada por una guerra civil, y Cipriano Castro apoyaba al general colombiano Rafael Uribe Uribe quien se enfrentaba a la oligarquía de su país. castro permitió que los grupos revolucionarios al mando de Rafael Uribe Uribe se organizaran en Venezuela, y además les dio todo tipo de ayuda en armas y municiones, y además reconoció oficialmente a todos los cónsules nombrados por los revolucionarios neogranadinos para las ciudades de Maracaibo y San Antonio del Táchira. Luego de varias derrotas, Rafael Uribe Uribe se refugió en Venezuela.

(SEGUIRÉ NARRANDO ESTA IMPORTANTÍSIMA HISTORIA…)



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2379 veces.



José Sant Roz

Director de Ensartaos.com.ve. Profesor de matemáticas en la Universidad de Los Andes (ULA). autor de más de veinte libros sobre política e historia.

 jsantroz@gmail.com      @jsantroz

Visite el perfil de José Sant Roz para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: