De engreídos comunicadores oficiosos hasta los chavistas se cansan

La actitud de quienes se consideran autosuficientes es contraria a la simpatía y contraproducentes en política. Con nostalgia, "pena" ajena, hasta algo de tristeza y desilusión me siento obligado a criticar por extremista en sus conceptos a alguien, a quien sin conocer hemos seguido con asiduidad y devoción chavista y ahora por sus últimas prepotentes intervenciones, a mi juicio poco objetivas, que han afectado mi creencia en, quien por respeto no cito por su nombre, saquen sus conclusiones; debo referirme a una presentación que presumo sería la última del 2018 en una televisora local; Él, según la introducción que hace de sus programas, realidad que nunca critiqué aunque me parecían exageradas, pero que ante las circunstancias presentes y la necesaria autocrítica, las califico como altisonantes y alabanciosas a través de terceros que, en alguna oportunidad hace ya tiempo, expresaron una opinión favorable de su persona y que ahora rebuscando en el pasado y reuniéndolas todas, repite haciendo ver que él es: el más seguido, lo dicen los números, el más veraz, un verdadero gladiador, Chávez lo tenía en la más alta estima, y hasta hábilmente mete a Fidel en las alabanzas, mostrando engreída petulancia , y como infalible actuante, nunca hará uso de la autocrítica o será objeto de contradicción de parte de sus copartidarios, porque "nunca se equivoca" a pesar de algunas sospechas sobre la salida de sus coequiperos en sus programas iniciales y algunos traspiés que han perjudicado gravemente al chavismo y hasta fue temporalmente sacado del aire.

Las salidas de sus círculos de trabajo de defensores del chavismo: Vanesa Davis, Alberto Nolia, Jorge Giordani, Héctor Navarro quizá Maripili Hernándeze etc. y posiblemente algunos más, entre los cuales pudo encontrarse Andrés Izarra muy revolucionario y encargado por Chávez para la fundación del exitoso canal, Telesur, igual que el redimido, probablemente por un contrito "mea culpa" presentador de marras y hasta Walter Martínez por su actitud un tanto engreída respecto a un viaje a la ONU, que para los últimos y aquéllos, crearon divergencias "imperdonables" sobre la conducción de las actividades político partidistas, según criterios personales de los "perfectos" conductores de la política del PSUV, respecto a chavistas venezolanos activistas de Prensa Escrita, Televisión etc. Que, quizá emitieron opiniones no plenamente aceptadas por los censores del partido y fueron siquitrillados en lugar de ser simplemente reconvenidos, por el reconocimiento que debido a su trayectoria merecían.

El citado personaje se permitió atacar a Aporrea, indudablemente un bastión de la pluralidad de la libertad de prensa, para mí sin razón, porque el conductor entiende que sólo es verdad lo que él dice, y cuando se equivoca en sus conceptos calla como casi todos los pronosticadores, que cuando aciertan indican con bombos y platillos su predicción, pero cuando se equivocan callan como si nada hubiera ocurrido, cosa que le sucede aun durante sus programas ya que, con frecuencia se desvía de la idea principal que esté desarrollando y deja al oyente preguntándose ¿qué pasó que perdió el hilo? o cuando ofrece desarrollar una idea durante el programa y luego lo olvida dejando al interesado en las nubes sobre el tema con el que, captó originalmente el interés del usuario.

Concretamente en relación a Aporrea tildó a la publicación de sesgada, cuando haciendo uso de habilidad periodística, recurrió a publicar la posibilidad de que la Federación Rusa estableciera una base en nuestra isla La Orchila, repicando publicación hecha en una revista moscovita, según su propia manifestación, además de oposición a Putin, y como si tal circunstancia los haría mentir, aquí podríamos recordar aquello de, "cada ladrón juzga por su condición" y el presentador, califica al periódico digital caraqueño como mentiroso, aunque no con estas palabras, Para el conductor en cuestión el buscar el conocido "tubazo" ocurriendo a lo publicado por una revista rusa supuestamente seria y ateniéndose a cable emanado de la agencia oficial de noticias rusa TASS, Aporrea es la negación del periodismo y hiere su "profundo apego a la verdad", como si no se supiera de su parcializado fanatismo político.

Cuando algún medio ha publicado el contenido de un cable de las agencias internacionales de noticias: Reuter Up, Ap, Tass etc., siempre se ha dado por sentado que se trata de una información veraz, y se consideraba obligatoria su publicación, cualquiera que hubiera sido la tendencia, pero para el conductor, tal comportamiento ceñido a la imparcialidad del periodismo de información, es una agresión al Gobierno y una irresponsabilidad y con su sonrisa jojanosa ataca a Aporrea, cuando él debe saber que la información acogida como buena por la redacción de Aporrea es sólida de acuerdo al origen mencionado, y tiene suficiente base para ser transmitida como tal, y seguramente, hubiera merecido aceptación si no se tratara de Aporrea, periódico digital con el cual no comulga, seguramente por razones muy personales.

Abundando en el caso como ya he escrito en otras oportunidades es necesario que alguien haga de "conciencia" dentro del PSUV , que haga ver los errores del Gobierno para que todos no sean irresponsablemente áulicos y se atrevan a sugerir cambios de funcionarios, de comportamiento y de políticas según se requiera, en lugar de favorecer la permanencia en el error y entrabar el necesario refrescamiento administrativo, especialmente el tren ministerial el que, con intensas esperanzas debe ser profundamente renovado a partir del 10 de enero y ahora el susodicho, presentador tomó el papel de gran defensor de la más desastrosa, administración a nivel de consumidor, nunca vista, en un país que tiene todo lo que se necesita para salir adelante con sus programas de producción agroalimentaria, e ingentes recursos financieros para importar lo que fuere menester,(a pesar de la preocupante caída a menos de la mitad en la producción de petróleo). Reconocemos la guerra económica en su apabullante agresión, pero no aceptamos la derrota que nos están infligiendo en el campo de la economía especialmente la "microeconomía" por incapacidad e inacción del tren ejecutivo, la cual constituye la base del golpe "suave y continuado", hasta ahora imparable, consecuencia de nuestra falta de reacción, por la escandalosa incapacidad para adelantar una política adecuada y eficiente en lo que yo he llamado de las "ventas al menudeo, las ventas directas al consumidor", aunque las defienda bajo la premisa sofística y engañosa de que la Sundde , no tiene sino 2000 funcionarios para atender varias centenas de miles de expendios de alimentos e insumos del hogar; ¡si resultan pocos, auméntenlos hasta donde sea necesario! para evitar que pulverizen cada incremento de salario o bono que otorga el Ejecutivo y no pretenda que, sea el público quien ejerza el control porque, como es sabido quien no tiene autoridad, no consigue obediencia y en nuestro caso que, de forma irrespetuoso lo manden a freír espárragos a Miraflores porque Maduro vende barato.

Amigo no sea inconsciente, la responsabilidad de controlar los abastos y expendios de productos de la cesta alimentaria es del Gobierno, concretamente del Ejecutivo, que tiene la OBLIGACIÓN ineludible de proteger al pueblo y piénselo mejor y contribuya con su crítica objetiva y constructiva a la solución del problema y no lo alcahuetée, porque así como se ofrecieron 20.000 becas para estudiantes universitarios colombianos, ¿por qué No se destinó esa partida o una similar para subir a 22.000 lo supervisores de la Sundde? y elaborar un programa que permitiera a los Consejos Comunales y Comunas, adquirir la formación necesaria y concederles autoridad real para, que pudieran colaborar con los funcionarios oficiales y detener la cruel explotación que a nivel de consumidor último, se sigue cometiendo en lugar de con su retórica sin fundamento defienda lo indefendible.

Ya en anteriores artículos he recontrainsistido en que hemos estado llenando los bolsillos de los especuladores con los dineros de la nación, dineros de todos los venezolanos, dilapidados inconsciente e irresponsablemente, por la incapacidad, primero en los "acuerdos de precios al detal", a juicio de la mayoría muy mal negociados por Tareck el Aissami, siempre sorprendentemente altos, y para colmo sólo "un saludo a la bandera", porque nunca los han respetado y al buscar incrementar el ingreso a la clase trabajadora con aumentos salariales y bonos especiales, parecieran haberle entregado una mina a la especulación, cuando se ha hecho presente la voracidad incontrolable de los precios, por la incapacidad en la acción, al no crear un sistema de control eficiente.

Entendemos que por alguna razón, especialmente que por fanático a ultranza o algún temor, sostenga tales ideas, pero cuando sugiero que en vista de que la Oposición desapareció por su propia incapacidad, y como escribiera en artículo pasado, que la democracia sin oposición corre peligro, ante esta circunstancia debo criticar en el mismo sentido que, quienes se convierten internamente dentro del estamento gubernamental, tanto gobierno como partido, en defensores a ultranza de actuaciones equivocadas, no solo perjudican profundamente a la Nación sino que, arriesgan la democracia, y hasta perjudican a su propia organización partidista, ya que el control sobre el Gobierno que abandonó la Oposición, debe asumirlo con seriedad y responsabilidad el partido de gobierno, obviando la peligrosa circunstancia, única de la Administración Chavista, que el Presidente de la República es también el presidente del Partido en el poder, el PSUV, por consiguiente su máxima autoridad, quizá explicable en su momento por la presencia del incontrovertible Hugo Chávez, pero ahora ¿quién puede pretender encausar y ayudar a corregir políticas gubernamentales?, si al mismo momento el Presidente se convierte como en el Imperio Romano, en un Procónsul, pero peor aún sin Senado que lo controle.

Con todos los defectos que se le puedan achacar a la 4ª República, durante sus gobiernos: Primero.- Se liberaba al Presidente de la disciplina partidista con el fin de que pudiera ejercer su primera magistratura para todos los venezolanos, alejado de tendencias partidarias de su organización política y Segundo.- Su desarraigo de las posiciones de preponderancia que pudiera haber tenido dentro del partido gobernante, permitía al menos en teoría y frecuentemente en la práctica, ejercer control sobre el Ejecutivo, evitando dentro de lo posible, desviaciones administrativas, que pudieran perjudicar a la Nación. Hay que recordarle al Gobierno y al PSUV, que CAP fue enjuiciado por AD y condenado por irregularidades administrativas en una ayuda al gobierno de Nicaragua; sin abordar el fondo del asunto, queda claro que el partido de gobierno podía encausar la Administración y al propio Presidente, al punto de someter a procesos judiciales presuntas desviaciones o errores administrativos imputables y estimo que en nuestras actuales circunstancias tal conducta sería honorablemente recomendable por parte del PSUV.



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Edgar Valero Díaz

Ingeniero Agrónomo.

 edgarvalerodiaz@gmail.com

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