Rafael Ramírez: ¡Ay el 8! ¿Y después del 8 Fucho, guabineaste?

Entre el 08/05/2017 y el 09/12/2018, un día después del 8/D. hay un callejón largo y oscuro Rafael.

No es muy fácil proponerse construir una reflexión en función a un artículo escrito muy reciente por Rafael Ramírez con el título: ¿Qué paso el 8 de diciembre? No lo es, por razones diversas. Es parte de una historia contada por uno que estuvo  en medio de esa historia y juega al poder y otra razón (entre otras muchas razones), es que en esta historia ahora cuenta Rafael Ramírez, hay situaciones en las que Rafael Ramírez afirma con total seguridad unos hechos o conductas de Chávez y en otras, no está muy seguro. Ahí surgen las dudas sobre el juego que juega Rafael Ramírez. No voy al tema, si Chávez se equivocó o no con su decisión. Trato de ver cómo juega Rafael Ramírez en este juego, jalando brasa para su sardina. Tampoco cuestiono (creo) el juego de Ramírez.

Por ejemplo, Rafael Ramírez está convencido en esta historia de esto:

“Lo que quiero resaltar, y así lo creo firmemente, es que la alocución y decisiones del 8 de diciembre, corresponden a las de un hombre preocupado, por supuesto, pero convencido de que volverá, de que saldría, una vez más, victorioso de ese compromiso de salud (…) No era la despedida del Comandante, ni las palabras de un hombre derrotado, que entonces proclamaba quién sería su "sucesor", ante su partida definitiva”[i]

Inmediatamente, pasa de la certeza  a otra certeza no muy certeza porque su interés en colocarnos en la duden un momento de dudas y lealtades fingidas. Rafael Ramírez nos deja frente a esta conclusión sin certeza: “El Presidente Chávez no decidiría un tema tan delicado como ese, sin tener una mínima discusión con su equipo político, incluso para dar instrucciones después de su partida física, si es que estuviese seguro de ella” Aquí no hay  certeza para Rafael, porque tuvo que haber sucedido una discusión “con su equipo político”. Él da por descartado que no la hubo, pero cómo sabemos, si Chávez no tenía distintos equipos políticos y que el equipo que lo rodeo en Cuba (como dice Rafael) no fue ese equipo. Pudo ser un equipo de dos: Chávez y Fidel.

Vaya a saber, por el control que hay sobre el hecho, si Chávez el jueves antes de dejarnos físicamente, estaba en esas condiciones de realizar una reunión de trabajo de cinco horas. Hay penumbras en esta historia. “Siempre pensó en volver, seguro como estaba y le habían dicho, que superararía esta etapa de la enfermedad”.

Concuerdo con Rafael Ramírez que Chávez habló el 8 de diciembre y eso se convirtió en una decisión que tenemos que correar al infinito. El 8 de diciembre, como lo dice Rafael Ramírez ha servido para legitimar a los grupos que van atornillando. La figura de Chávez no se queda en esto, sirve para legitimar todo.

También comparto de alguna manera con Rafael Ramírez, su idea del cheque en blanco. Efectivamente Chávez dejó un cheque en blanco  que endosaron todos los acomodados y ello incluye a Rafael. Los que se quedaron con el físico del cheque en blanco cobran con él y los excluidos reclaman su herencia. El cheque en blanco le da un vuelco a la historia porque es como esa historia donde los hijos se matan por la herencia y no por la vida que se fue. Parece se juegan la vida por el que se fue, pero es por el chequen en blanco.

Después del 8 Rafael vino una coexistencia pacífica entre grupos, que debía tener este desenlace, que pudo ser calculado porque toda lucha por el poder tiene estas montoneras. Importa mucho saber que pasó el 8 de diciembre, pero es clave entender Rafael,  qué paso después del 8 hasta que sentiste que no cabías en el grupo. Ahí creo que está el error.

Fíjate Ramírez como es la vida de curiosa y traviesa, que sin querer permite, que uno deje su huella en el área del suceso. Tú te enteraste que existía Aporrea, sólo después del 08/05/17  y comenzaste a contarnos la historia o tu forma de ver esta historia a partir de ese momento, cuando  lo ético y responsable era haber asumido tu responsabilidad muy temprano en esta situación que parece torcida. Creo que el 08/05/17 fue tu primer artículo en Aporrea[ii] y ya las cosas para antes de ese momento se veían complejas.

En esa “Línea Roja” que has debido escribir mucho antes y no el 08/05/17 está muy mal dibujada. Si leemos nuevamente esta “línea roja”, vemos que jugaste sin precisión. Fuiste muy difuso ¡Guabineaste! No se ve una “línea roja” nítida, cuando has debido marcárnosla  muy nitidez  y usando color rojo fosforescente para que viéramos lo que supongo ya comenzaba. En esa “línea roja”, te quedaste como el aparato  guabineando.

Las oportunidades Rafael, son eso, oportunidades. Son como un tren, pasan y hay que poner la pata en la escalera.

REFERENCIA


[ii] https://www.aporrea.org/actualidad/a245586.html



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Amaranta Rojas


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