¿Hay paz? Pero primero ¿Qué es la paz? Si seguimos a Frank Brentano, como valor, la paz es tranquilidad, quietud; y su ausencia es violencia, guerra.
Ahora bien, si decidimos seguir a Jesús, entonces esa paz sobrepasa nuestra percepción, y pasa a ser el tutor de nuestras intenciones y nuestros pensamientos, es decir, Jesús mismo es la paz.
Nuestro Simón Bolívar lo llama en su Discurso de Angostura: "el genio tutelar de Venezuela", "luz celestial de la perfección".
Resumen: la paz humana es un estado de tranquilidad, quietud. La paz espiritual es Jesús mismo como sustancia vivificante en el ser humano.
Contexto venezolano: tasa de homicidio en alza cada año, multitud diaria de robos, atracos, secuestros, divorcios, separaciones afectivas, ansiedades de todo tipo (alimentos, agua, medicinas, desalientos), en fin: angustia generalizada.
¿Hay Paz en la Venezuela cotidiana?, y ¿hay paz en la mesa del diálogo político? Ahora puedes responder: ¿Qué tienes tú que ver con la paz? ¿Tus pensamientos y acciones están orientadas a fomentar la paz?
¿Qué nos impide conocer a la Paz verdadera y permanente como sustancia vivificante?
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La religiosidad predicada y accionada seca la vida. Jesús no está en un crucifijo. Hace tiempo salió de allí. Él no es un símbolo con pretensión para dominar masas humanas.
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Las ideologías: del dinero (capitalismo) o del antropocentrismo, esa que predica que el ser humano puede desarraigarse por sí mismo, y perfeccionarse en sí mismo por la lógica materialista, esa élite siempre termina en la primera lógica: el amor al dinero, y ¿el pueblo?
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La otra forma de dominación es la incredulidad propia en cada ser, eso es una decisión propia de cada quién y es trascendental para quién.
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Y por último, pero la más extendida: la ignorancia espiritual, el desconocimiento de Jesús, del genio tutelar, de la luz celestial de la perfección venezolana. Recordemos: "un pueblo ignorante es instrumento ciego de su propia destrucción" ¿Quién dijo esto? ¿Cómo estamos hoy?
La evidencia del presente nos señala el Camino, la Verdad y la Vida a seguir en el ser cristiano bolivariano auténtico.
La educación académica no nos ayuda a acércanos a Jesús. La prueba es el contexto venezolano, ¿y tu vida, cómo está? ¿Qué tienes tú que ver con la paz?
Todo tiene el potencial para ser transformado: Vuélvete a Jesús, conócelo y establece una relación de amistad con él. Él es amigo fiel y verdadero. Ahora conoces a la Verdad y a la Paz: Jesús como proveedor de todas nuestras profundas necesidades.
¡Qué tengas un bendecido día de aquí en adelante!
"Sólo el pueblo virtuoso se salva"