En esta coyuntura que vive la Revolución Bolivariana - Revolución retomada desde las raíces del pueblo mismo, impulsada con el acompañamiento de ese pueblo y sembrada para siempre por el Comandante Eterno Hugo Rafael Chávez Frías - el Movimiento Electoral del Pueblo (MEP), en este año 2015 que se cumplen 113 años de haber nacido su fundador principal: Luis Beltrán Prieto Figueroa; se sacude desde sus raíces, con la firme intención – según sus nuevos voceros – de rescatar el Pensamiento del Maestro Prieto.
A los Camaradas lectores de esta importante página de opinión, les digo que el pensamiento del Maestro Prieto sigue siendo JOVEN. Sus ideas continúan EMPINADAS para guiar a la Juventud de la Patria de Bolívar, a la Juventud de la Patria de Hugo Chávez, a quienes dedico su vida; pues su gran preocupación y ocupación fue la educación y la preparación de la Juventud para enfrentar los retos de desarrollo del País.
Siempre vio a la Juventud como una fuente renovadora y como una fuerza creadora, ambas necesarias para forjar el desarrollo de Nuestra Patria Venezuela. Características que hoy más que nunca necesitamos en nuestra Juventud para poder lograr de una vez por todas, el parto de la Patria Buena y que la misma se EMPINE con las fortalezas que la hagan irreversible, como la dibuja Alí Primera en sus canciones: "buscando darle a la Patria, caminos de dignidad",
El Maestro Prieto fue el fundador – entre otras instituciones – de dos grandes centros de enseñanza: Las Escuelas Técnicas y del Instituto de Cooperación Educativa (INCE). En estos centros se formaron en las décadas de los 60 y 70 la mano de obra técnica calificada del País. Lamentablemente en la década de los 70 – durante el primer gobierno del Dr. Rafael Caldera – se cambio la misión original de las Escuelas Técnicas.
Por décadas el venezolano ha protestado por el mal funcionamiento de los servicios públicos: salud, agua, gas y electricidad, por la falta de instalaciones para la educación, por la falta de presupuestos justos para las universidades, por la inseguridad, falta de vivienda, etc. El Maestro afirmaba: "Los jóvenes, en general, recogen este inconformismo con mayor angustia. Son como esponjas, a los cuales les llega el rumor de la calle como un río de aguas turbias que los empapa". Sin embargo, ante esta situación El Maestro Prieto planteaba la necesidad de generar en los jóvenes las fuerzas de resistencia suficiente para conducir sus propias energías; cuando los objetivos precisos no existen.
Intentando definir quienes son JOVENES, el Maestro Prieto escribió: "Pudiera intentarse una definición diciendo que se es joven por el generoso impulso del corazón, por la desprendida forma de adhesión a la lucha por la justicia, por la renovada manera de entender la vida como proceso de creación para alcanzar metas altas de felicidad para los demás; se es joven cuando se tienen las manos abiertas para dar, cuando se ponen al servicio de los otros toda la voluntad, toda la inteligencia y cuando se es capaz de sacrificarlo todo por un ideal de redención humana. Ahora bien, en diferentes épocas de la vida pueden darse esas aptitudes."
El Maestro Prieto planteaba el necesario equilibrio en los procesos de cambios y que el mismo se lograba si la educación era capaz de adaptarse permanentemente a los cambios que ocurrían en la sociedad; y afirmaba: "Las transformaciones se producen en el medio físico, en el medio social y en el individuo que vive en ese medio. La educación es un proceso de cambio que tiende, sin embargo, a conservar aquello que resulta útil para crecer. El cambio se produce porque el hombre lo requiere y lo procura. Cuando se pierde el impulso renovador es porque la capacidad creadora ha dejado de funcionar y la sociedad entra en una etapa de decadencia o ve entorpecido su desarrollo."
Hoy más que nunca esta vigente la expresión que dio origen al titulo de uno de los libros escrito por el Maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa - ¡JOVEN EMPINATE! – "EMPÍNENSE, JÓVENES, PARA QUE CONCURRAN AL TRABAJO DE CONSTRUCCIÓN DE UNA PATRIA NUEVA"