Una sencilla y corta explicación de “Software” pudiera ser: “El alma que le da vida al computador”. Digamos que un cuerpo humano se puede tocar, pero ese cuerpo tangible no es nada sin el alma que le da vida. De igual manera lo que conocemos como “computadora” puede tener dentro poderosos componentes electrónicos que no son nada sin la vida que le da el “Software”, o para hacerlo más criollo, el “programa”. Así pues el programa es el que indica al computador lo que tiene que hacer.
Ahora imaginemos que llegamos a nuestro lugar de trabajo y encendemos el computador. En seguida arrancan varios programas. El más reconocido (y menos valorado) por todos los usuarios no informáticos es el sistema operativo. El sistema operativo es el programa más importante del computador pues es quien administra los recursos como la memoria. El nos ayuda a interactuar con la máquina de forma más fácil. Gestiona los archivos, las tareas, nos permite administrar los componentes internos del computador. Sirve de puente a los demás programas por lo que hace las veces de supervisor para que el computador no colapse entre otras cosas.
Luego iniciamos nuestro procesador de texto (aquel programa donde hacemos nuestros documentos) y escribimos un informe sobre la situación de la institución pública que presidimos. Terminado el informe, utilizamos una opción para colocarle clave al documento y lo guardamos (Así nos enseñaron para hacerlos seguro). Abrimos ahora nuestro navegador de Internet, buscamos nuestra página de cuentas de correo electrónico y entramos a nuestra cuenta personal, redactamos el asunto y el cuerpo del mensaje, incluimos el informe en el correo y lo enviamos. ¡Click! Listo.
Creemos tener todo bajo control. ¡Y la gente de informática y redes también creen tener todo bajo control! En fin, utilizamos “Microsoft Windows 7” como sistema operativo, “Microsoft Word 2.007” como procesador de texto y “Microsoft Internet Explorer 8.0” como navegador de Internet para enviar el correo. Pero… ¿Qué hicieron estos programas por dentro? No lo sabemos. Y… ¿Para qué lo vamos a saber? ¡No somos de informática! Ahora el problema está que la gente de informática tampoco está para nada claro en lo qué hacen estos programas en su interior. ¿La razón? Esos son programas “propietarios”. Es decir programas que medio esconden y medio muestran su alma. Sabemos lo que hacen, pero no cómo lo hacen. La empresa Microsoft vendió a la institución los programas ya creados, pero sin opción a revisarlos por dentro (Auditarlos), ni modificarlos.
Ahora si en vez de usar “Microsoft Windows 7”, usáramos “Linux Ubuntu 9” como sistema operativo, en vez de usar “Microsoft Word 2.007”, usáramos “Open Office Writer 3.0.” como procesador de texto y en vez de usar “Internet Explorer 8.0.” usáramos “Mozilla Firefox 3.7” como navegador de Internet, entonces… ¡Igual no sabríamos qué hacen estos programas en su interior! Pero la gente de sistemas si lo sabrían. O al menos tendrían opción a saber lo que hacen y cómo lo hacen… ¿La razón? Estos programas son “libres”, o de “código abierto”, es decir enseñan su alma entera y permiten ser modificados. Y como si esto fuese poco. ¡Son gratis! Pero eso y más sobre software propietario y libre lo comentaremos en otro artículo.
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