04-06-23.-Armando Benedetti, quien fue destituido el viernes de su cargo como embajador de Colombia en Venezuela, no podrá viajar a Estados Unidos debido a que le fue revocada su visa por el país norteamericano.

Según una fuente del alto Gobierno que habló con Noticias Caracol, la decisión se tomó porque el exembajador habría hecho un uso indebido de su pasaporte diplomático.

Además, el exembajador está involucrado en el escándalo de las supuestas interceptaciones ilegales a extrabajadoras domésticas de Laura Sarabia, la exjefa de gabinete del presidente Gustavo Petro.

La salida de Benedetti

Benedetti habló sobre su salida del Gobierno a través de una carta dirigida al mandatario, que publicó en su cuenta en Twitter. En ella, le agradeció la confianza que le brindó al designarlo como embajador en Venezuela, una de las tareas más importantes para su administración.

“Agradezco, presidente Gustavo Petro, la confianza que me brindaste al designarme una de las más importantes tareas para tu gobierno: restablecer las relaciones entre Colombia y Venezuela. ¡Lo logramos! ¡Gracias!“, escribió.

En el documento, Benedetti expresó su admiración por el presidente Petro y dijo que se unió a su proyecto político con plena convicción y que se va satisfecho por sus logros.

“Ha sido un gran honor acompañarte en estos meses de gobierno como embajador ante Venezuela. Reabrir las relaciones con este país hermano, que acogió durante tantos años a miles y miles de compatriotas que por diversas circunstancias encontraron refugio allí, reiniciar una relación comercial tan intensa y beneficiosa para ambos países fueron grandes logros y satisfacciones. Espero que Colombia sepa valorar y aprovechar la gran oportunidad que tu gobierno representa”, concluyó.



El escándalo de las chuzadas

La renuncia de Benedetti se produjo luego de que el fiscal general de Colombia, Francisco Barbosa, afirmara en una conferencia de prensa que integrantes de la Policía habrían realizado interceptaciones ilegales a particulares.

“Hoy es un día muy lamentable para el Estado de Derecho en Colombia. Hoy podemos decir con claridad que las chuzadas, las interceptaciones ilegales, han retornado a Colombia”, sostuvo Barbosa.

Entre las víctimas de estas chuzadas estaría Marelbys Meza, exempleada de Laura Sarabia, quien denunció en declaraciones a la revista Semana el 27 de mayo que en enero fue llevada a un edificio de la Presidencia de Colombia donde asegura, fue sometida a un interrogatorio y a una prueba de polígrafo por un dinero que fue hurtado del apartamento de la funcionaria.

Según el fiscal Barbosa, agentes de la Dirección de Investigación Criminal de la Policía (Dijin), habrían pedido de manera irregular a un fiscal del departamento del Chocó una orden para interceptar el teléfono de Marelbys Meza haciéndola pasar por integrante del Clan del Golfo, una banda criminal al servicio del narcotráfico.

Mediante un comunicado la policía nacional dijo que está averiguando los hechos.

Por este caso, también fue destituida Laura Sarabia. Al conocer la decisión del mandatario, quien la defendió hasta el final, la funcionaria dijo en su cuenta en Twitter: “Tengo plena tranquilidad de haber obrado correctamente, con integridad y sin ningún interés particular. Estaré presta a rendir todas las explicaciones necesarias para el esclarecimiento de los hechos y lucharé profundamente para defender mi reputación, mi buen nombre de todas las acciones malintencionadas que han rodeado todos estos episodios”.