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Ahora, Netanyahu, busca desesperado la Bati Cueva de Batman o el Barril del Chavo para esconderse de la lluvia de misiles que le envían en respuesta defensiva desde Irán.
Como una capa protectora invulnerable, capaz de contener cualquier ataque enemigo, resistente a toda prueba, una especie de malla irrompible, así era presentada por los medios estadounidense e israelitas la red impenetrable, que supuestamente los protegía, mientras ellos hacían y deshacían, cometiendo arbitrariedades contra otros pueblos del mundo.
El Criminal de Guerra, Benjamín Netanyahu, cada vez que podía lo decía a todo pulmón: Tenemos una Cúpula de Hierro” a la que no le entra ni coquito, no es necesario, que nuestros ciudadanos se ubiquen ni siquiera en refugios, frente a un ataque enemigo, la Cúpula se encargará de todo.
Bastó una primera ofensiva de respuesta a la agresión Israelí, contra el pueblo Iraní, para que la tal Cúpula se cristalizara y los misiles lanzados en defensa, la penetraron como si fuera mantequilla, se cristalizó y el primero que salió a esconderse fue Netanyahu y su cúpula, que corrieron como ratas a su escondrijo, cuando vieron la lluvia de misiles que les caía encima y no era precisamente fuegos artificiales.
Luego, desde su escondrijo y al sentirse seguro, llamó a su pueblo a refugiarse, en un país que prácticamente todo es un refugio porque los edificios y hasta las casas tienen un refugio, es decir que se puede decir que son un “Centro de Refugio”.
Le tienen tanta confianza los israelitas a su presidente, que mucho antes de que el corriera, se escondiera y llamará a refugiarse, todos se había ido a sus refugios, donde viven más a diario, que en sus propios edificios y casas. Una gran confianza en su presidente y en la cacareada “Cúpula de Hierro”.
Mientras tanto, el “Cara e´Tabla”, presidente de los Estados Unidos, quien prestó el “pega lo todo”, para juntar las vigas de la Cúpula de Hierro, con el desparpajo de siempre se burlaba de los militares asesinados en la primera ofensiva israelí, esto dijo a los medios:
"No murieron de gripe ni por el covid", fue la respuesta sarcástica del mandatario a la pregunta de una periodista de la CNN.
Esperemos que de la misma repuesta cuando se contabilice a los militares y civiles que puedan caer en la parte israelí.
Con respuestas como esta y con conductas guerreristas como las de su apéndice Netanyahu, los imperios demuestran su verdadero rostro desnaturalizado.
Poco les importa la vida de miles de jóvenes soldados y civiles que utilizan como carne de cañón para la guerra, en su afán de dominar y hegemonizar el mundo.
Así que la Cúpula falló, ni el Mossad, máxima organización inteligencia israelí, sabía que los misiles iraníes, venían revestidos de Kriptonita, el mismo mineral ficticio que afecta a Súperman, héroe de las comiquitas estadounidenses.
Tampoco la bendita cúpula, que había sido construida con los mismos planos de la Bati-Cueva de Batman, que lo protege junto a su carro y su fiel Mayordomo, pudo protegerlos y se derrumba como un castillo de naipes.
Por lo pronto, a Netanyahu, lo que le sale es encuevarse, a lo mejor “El Chavo”, le presta el Barril donde se esconde, luego que hace una travesura, a Kiko, porque de su país solo puede salir, solo va donde sus amos del Pentágono, ya que sobre él pesa una condena como Criminal de Guerra y si hay algo de justicia todavía en la tierra, ha de ser juzgado y encarcelado.
Si le falla también el Barril del Chavo, como le ha fallado su Cúpula de Hierro, le recomendamos entonces, que acuda al Baúl del Cuervo de la célebre comiquita “El Zorro y El Cuervo”, para que busque allí, un disfraz adecuado, que lo esconda de toda mirada, porque después de esta guerra que ha provocado, quedará más rayado que un tigre y todo el mundo lo señalará, tal cual es: COMO UN CRIMINAL DE GUERRA.
