Gran expectativa ha causado entre los usuarios del mundo del espectáculo, el anuncio hecho por la empresa de servicio Netflix, de llevar a la pantalla chica, en forma de serie, la espectacular y atrevida fuga de los opositores venezolanos, que se encontraban recluidos en la Embajada de Argentina en Caracas, Venezuela.

Los estudiosos de fugas temerarias, que se han producido en el mundo, no tuvieron dudas en ningún momento de compararla en su espectacularidad con la Fuga de Alcatraz, la de Casonava (aventurero italiano) y la de John Dillinger, que por cierto es héroe junto a Al capone, de la cultura estadounidense, por su acuciosa planificación, por la serie de recursos tecnológicos utilizados y por las fuerzas extranjeras que participaron en la operación.

La espectacular fuga, en cuestión, fue planificada en el propio Pentágono, coordinada por la CIA, la DEA, y de un pequeño, pero selecto grupo de opositores venezolanos, hoy cómodamente residenciados en los Estados Unidos, donde trabajan todos los días, las 24 horas, para derrocar la dictadura en Venezuela.

Dos venezolanos, que pasaran a la historia por haber sido protagonistas de fugas también notables, como Antonio Ledesma e Iván Simonovis, más un personaje que en nuestro país le dicen la Sayona, quien no se fugó, sino, que salió Venezuela por el Aeropuerto, sin ninguna dificultad, fueron los que urdieron meticulosamente el escape.

Estos planificadores, llevaron a la reunión de Pentágono, el plan, informando a los representantes de la CIA y la DEA, las coordenadas precisas donde se encontraban los opositores encarcelados y la ubicación de centenares de soldados que los custodiaban.

El mapa que llevaban, reflejaba la impugnabilidad del sitio: carros blindados apostados desde diferente ángulos, Drones volando en horas del día y de la noche alrededor de la Embajada de Argentina y cientos de soldados, agentes del CICPC uniformados y de la DISIP, vestidos de CIVIL, con rutinas de recorridos permanentes alrededor de todo el sector adyacente a la Embajada y un Ultra Radar Hipersónico que Putín había regalado al dictador venezolano.

Los agentes de la CIA y la DEA, se miraron las caras y con un gesto de preocupación dijeron, al unísono, el lugar es casi, inexpugnable.

En ese momento, Simonovis, ex agente de seguridad venezolano, quien había sido protagonista de otra fuga espectacular, saltando un muro con una pértiga, dijo, Uds., lo han dicho "casi inexpugnable", pero yo tengo una idea, para que la exploremos y podamos llevarla a la práctica en el Mes de Mayo, mes, de intensas lluvias en Venezuela.

Y a continuación, sin pérdida de tiempo, Simonovis, se explayó: bombardeamos las nubes en el sector de la embajada para incrementar al máximo las lluvias, provocaremos una inundación descomunal y dotaremos a nuestros compatriotas de equipos de buceo, para que puedan cruzar a nado el lodazal. Los esperaremos al frente en la avenida, inmediatamente, en un decir Jesús, los sacamos por Colombia, con el apoyo, que ya concertaremos de Uribe y Duque, que no dudaran en apoyarnos y en 48 horas estarán en los Estados Unidos.

La verdad fue, que los agentes de la CIA y la DEA, a pesar de su gran experiencia en estos operativos, se habían quedado lelos, ante la ingenioso y audaz Plan presentado por el ex agente venezolano, que les ahorraba recursos y enfrentamientos inútiles que enrarecerían, más aún, las relaciones entre Venezuela y los Estados Unidos.

Así que sin objeciones, se aprobó el audaz plan, agregándole algunos detalles, de menor importancia. Los cerebros de CIA y la DEA se frotaban las manos de sólo pensar en el resultado.

¿Cuál sería el día más apropiado se preguntaron?

Allí fue donde se destacó la genialidad de la que llaman la Sayona, quien de inmediato dijo, pienso que debe ser el Miércoles, en horas de la madrugada, porque ese día, Diosdado Cabello, se estrasnocha con su programa "Con el Mazo Dando", y lo agarramos desprevenido. Ledesma, que había permanecido de observador, con un gesto afirmativo, dio su aprobación a la idea.

Y así amigos, por todos los recaudos que obtuve, fue que se ejecutó el espectacular plan de fuga de los opositores venezolanos que hoy mantiene de cabeza a todos los organismos de seguridad del país.

Diosdado, al ser informado de la fuga, se quedó patitieso, con los ojos claros y sin vista. Le habían dado un Mazazo, sin darse cuenta y ahora tendría que rendirle cuentas a Maduro, quien confiado en su engranaje dictatorial, había salido del país, para asistir de asomado a la celebración del Día de la Victoria, en Moscú.

La oposición celebra ahora, con bombos y platillos la espectacular fuga. Sus voceros en el exterior, en Redes y Portales alaban la osadía de los prisioneros y el ingenioso plan urdido para extraerlos. El gobierno está arrinconado y acusa a Marco Rubio, de esa fechoría, porque Elón Musk, parece estar ahora de bajo perfil.

Así están las cosas. No sabemos las repercusiones que estos hechos van a tener en las próximas elecciones a realizarse en Venezuela, se espera con ansias el regreso del presidente al país para ver qué medidas serán tomadas por tal afrenta.

Venezuela está realmente convulsionada por este escape, el régimen se tambalea, mientras que los organismos de seguridad se echan la culpa mutuamente, por lo que se espera que habrá cambios radicales a nivel de estos altos mandos.

Mientras tanto, vía Colombia, donde los fugados disfrutaron de un frugal almuerzo a base de "Bandeja Paisa, con Uribe y Duque, ya fueron recibidos en los Estados Unidos, allí festejan y relatan lo sucedido a los argumentistas de Netflix, para dar los detalles de la fuga y grabar la Serie que será estrenada en los próximos días.

Se espera con gran expectativa esta súper producción, a la cual los medios venezolanos ya le han puesto un nombre "Operación Guacamaya". "Se piraron de la Chirona y dejaron al país en una encerrona".