El Fraude se consumó punto. Fue planificado en los Estados Unidos, durante la visita que Daniel Noboa hizo a Donald Trump, días antes de que se realizaran los comicios presidenciales.

Así lo informó la agencia Reuters que publicó el encuentro con nota y foto:

"Trump se reunió con el presidente ecuatoriano Noboa en Florida el sábado[".

Eso fue el 29 de Marzo de 2025, visita informal y sorpresiva, que se intento camuflajear con la supuesta firma de un convenio para combatir las drogas.

Allí en esa reunión, se decidió el destino electoral de los comicios electorales de la República de Ecuador, y se pactó el fraude que hoy escandaliza a toda nuestra región y el mundo.

El plan de Noboa fue director negociar la entrega de la Soberanía del país, con la presencia de bases norteamericanas en la Isla de Las Galápagos, a cambio de que Donald Trump, apoyará el fraude que ya preparaba, con una Comisión Electoral parcializada.

Donald, pragmático y con la mirada puesta en el control de nuestra región, sobre la base de expandir bases militares, lo aceptó y le garantizó el apoyo.

Y así fue, el presidente Noboa, que ni siquiera tuvo la gentileza de dejar el cargo transitoriamente, para darle por lo menos un rostro de imparcialidad al proceso, luego, cerró las fronteras para impedir que observadores internacionales acudieran a supervisar el proceso electoral y decretó para sorpresa de todos, sin que hubiere condiciones para ello, un nuevo Estado de Excepción; incluyendo alteraciones de última hora en los lugares de votación, uso arbitrario de recursos estatales con fines clientelistas, exclusión deliberada de veedurías internacionales, y la «inaceptable suspensión del voto de miles de ecuatorianos en el exterior».

En otras palabras y no hay que ser buen entendido para comprenderlo, preparó el terreno para ejecutar el Fraude, con el consentimiento de la Comisión Electoral y el apoyo del gobierno estadounidense, acordado en la susodicha reunión.

Pueden olvidarse, de que Estados Unidos pedirá presentación de actas o reconteo de votos, eso lo hacen contra los presidentes que son electos y no quieren ser marionetas imperiales.

De la OEA, pueden olvidarse, allí se reciben órdenes directas de los Estados Unidos y darán la espaldas o se harán los locos, para que pase el tiempo y todo se olvide.

Los países, europeos, ni con el pétalo de una rosa, ellos bailan también al son que les toca el gobierno de los Estados Unidos y dirán, ciérrate boca. Ya de hecho portales internacionales informar a ultima hora que la OEA y la Unión Europea, validan el fraude.

El escandaloso fraude se consumó, quedará el reclamo de la Confederación de Estados Latinoamericanos (CELAC), como una letanía, sin eco, hasta que el tiempo también la borre.

Lo cierto es que como en un tablero de Ajedrez, Ecuador en manos de Noboa, le hará el juego a los Estados Unidos para su logar su hegemonía en la Región y eso está clarísimo, el que no lo quiere ver no es porque es ciego político, sino, siervo y en esa tónica están los gobiernos de Argentina, El Salvador, Ecuador, la Dictadura Peruana y las ambivalencia de otros gobiernos regionales que le dan un tirito al imperio y otro a la revolución.

La candidata Luisa González fue clara al respecto, declaró que:

"….había aceptado sin ambages su derrota mucho más estrecha frente a Noboa en las elecciones extraordinarias de 2023, pero en esta ocasión no lo hizo al verse sorprendida por una contundente derrota que no se había previsto en ninguna encuesta ni sondeo a boca de urna"

Por ello, denunció el Fraude y su no reconocimiento a la nueva elección.

De la conducta de su partido y del pueblo ecuatoriano quedará a futuro, cual debe ser la respuesta adecuada a semejante fraude. La gran mayoría de las encuestas incluso las oficiales la daban ganadora. Pero se fue la Luz y, zúas, todo se apagó. La Dama Tapada, con su velo negro, leyenda muy popular de Ecuador, vino con su mano pelúa y todo lo cambió.