IV (¿y ultimo?) Congreso del Psuv: Sin pena ni Gloria

"No es responsable la cuarta república, no es responsable Carlos Andrés Pérez. Somos responsables nosotros porque tenemos 19 años en revolución"

Freddy Bernal

"No nos echen la culpa a nosotros"

Diosdado Cabello.

Preguntas orientadoras

  • ¿Quién desearía ser responsable de dar por muerto el "proyecto socialista chavista"?

  • ¿Quién sería capaz de "decretar" su imposibilidad?

  • ¿Es o no es la corrupción el principal problema de la sociedad venezolana?

  • ¿Qué ha hecho el Psuv para eliminar de cuajo el flagelo de la corrupción?

  • ¿Puede un partido como el Psuv transformarse en una organización donde fe, razón y espiritualidad sean sus verdaderos "motores"?

  • ¿Tienen o no los "dirigente "y "lideres" del Psuv sus corazones poseídos por MAMONA?

I. Introducción

La historia nos ha enseñado duramente que no existen posturas "químicamente puras": todas pueden ser pervertidas. La posesión de la verdad última no es solamente una pretensión ingenua, sino además peligrosa. Sin duda, existen certezas científicas -¿cómo podríamos de otro modo montarnos en un avión? -, pero son certezas parciales, están referidas únicamente a la dimensión empírica, contable, matemáticamente formulable de la realidad.

Sólo el fanático, adicto a la peor moral de principios, no ve contradicción entre fines y medios porque sus conceptos poseen un significado estático, inalterable por las circunstancias. La realdad nos desborda, la sensación de impotencia, de incompetencia y desamparo es total. La mucha distancia entre lo que se declara y lo que se cumple, descorazona.

La profunda crisis que en esta etapa histórica está atravesando Venezuela, nos impone la tarea de analizarla para aportar en la búsqueda de salidas. La crisis atraviesa todos los niveles de la sociedad, el educativo, el económico, el ecológico-ambiental, el social, el político, el religioso, el familiar ,el moral. Entre esos niveles nos interesa aquí señalar el de la conciencia en el sentido amplio, abarcativo, que consideraremos englobados en general, en el concepto de racionalidad.

II. ¿Socialismo?

¿Por qué es importante el socialismo ante el futuro justo y libre de la sociedad venezolana? Según Giorgio Agamben en la vida de los conceptos hay un momento en que éstos pierden su inteligibilidad inmediata y, como cualquier término vacío, pueden cargarse de sentidos contradictorios. Cualesquiera que sean las formas que haya revestido históricamente el socialismo, siempre ha significado un modelo alternativo de sociedad y, por tanto, una meta a alcanzar a una aspiración a cumplir. El socialismo como alternativa al capitalismo resulta así no solo un producto histórico posible y necesario, sino un ideal fundado objetiva e históricamente. Pero, en cuanto no se realiza todavía, funciona como una hipótesis que ha de ser verificada en la práctica. Ahora bien, ¿cuál el contenido de esa hipótesis? El socialismo es un movimiento de talante ético, no es una determinada estructura social. Está claro que en Venezuela no hay ni socialismo, ni capitalismo, ni siquiera socialdemocracia. Por socialdemocracia se entiende un proceso de reformas permanentes dentro del sistema capitalista.

III. Psuv, un partido sin raíces y espiritualmente seco

Dice el gran pensador judío Martin Buber que "en tiempos de crisis hay que volver a las raíces". El camino hacia las raíces es largo y está sembrado de escollos y espejismo, ese camino es una empresa de enormes desafíos teóricos y prácticos.

Esta experiencia o constatación de la crisis obliga a "buscar" una nueva espiritualidad revolucionaria, de esperanza, solidaridad y resistencia. Necesitamos espiritualidad como el oxígeno, de agua, de pan. Espiritualidad es el empeño asumido y consciente por integrar la propia vida en el horizonte de trascendencia de aquello que uno percibe como valor último de la existencia. Hay que intentar dar con una espiritualidad que permita responder a los retos de la nueva situación. No para adaptarse a ella. Pero sí para responder a sus necesidades .Y ninguna tan apremiante como la falta de sentido, la falta de episteme, la pérdida de ideales, la falta de amor patrio, la pérdida del sentido utópico del socialismo. La espiritualidad no es un conjunto de creencias más o menos articuladas, aunque las creencias pueden existir e incluso inspirar. La espiritualidad no es una serie de ritos, aunque los ritos pueden ser bellos y sanadores. La espiritualidad no es un sistema de normas morales, aunque unos principios morales pueden ayudar a mantener abierto un horizonte ético sin el que la espiritualidad es puro engaño. La espiritualidad es vivir en el Espíritu que habita en todos los seres, en el Espíritu que acompaña y consuela, que libera y da anchura, que nos hace prójimos y compasivos, nos hace capaces de paz y de armonía, nos enseña a mirar a todos los seres con atención y respeto. La espiritualidad combina el conocimiento, la intención y la práctica. En resumen: la espiritualidad tiene que ver con el proceso de nacer de nuevo (una y otra vez).

¿Fe? La virtual identificación de la fe con creer en un conjunto de afirmaciones constituye un serio empobrecimiento de la palaba "fe". Esta palabra tiene una riqueza de significados; ver la fe como creencia no solamente oscurece los otros significados, sino que también distorsiona la noción misma de la "fe". Estamos muy acostumbrados a pensar la fe en clave religiosa, a asociar la fe con una actitud religiosa del ser humano hacia Dios. Se nos olvida con frecuencia que el contexto de la fe es mucho más amplio que el contexto específicamente religioso. La fe es inicialmente un fenómeno antropológico, una forma de ser y de relacionarse las personas entre sí. "Constituye una parte intrínseca de la experiencia humana". Es un supuesto antropológico, una condición imprescindible para garantizar unas relaciones auténticamente humanas entre las personas. Y, por supuesto, la fe en las personas es una condición de posibilidad para una convivencia justa, armoniosa y gratificante en los grupos humanos. El ser humano es, en principio, un ser esencialmente creyente y, con frecuencia crédulo. Gran parte de su aprendizaje lo realizan las personas creyendo. Muchas de sus supuestas seguridades se basan más en la fe que en el saber científico o en la propia experiencia. Son seguridades atribuibles más a la fe que a la verificación. La mayor parte de sus certezas en todos los ámbitos del saber se basan en la fe o confianza en otros. No solo somos prójimos de los demás o sujetos morales responsables de los demás. También somos sujetos necesitados de los demás, beneficiarios de los demás. Por eso nuestra plena realización nos exige salir de nosotros mismos, salir al encuentro del otro, ejercitarnos en la fe y en la confianza en el otro, vivir en un constante dialogo de ida y vuelta, en un continuo dar y recibir.

  • ¿Es la fe la respuesta a los peligros, amenazas y debilidades que acechan al Psuv? ¿Cómo? ¿Qué aporta la fe a los socialistas? ¿En qué se diferencia la vida de un socialista de alguien que no lo es?

III. El "Socialismo Chavista" (SoCha) NO es socialismo

Por "socialismo chavista" (SOCHA) entiendo el "socialismo bolivariano realmente existente" con que se llenan la boca los defensores de este estado de cosas por la que atraviesa la sociedad venezolana. Todos sabemos que la corrupción ha llegado hasta el tuétano de la sociedad venezolana, en todo lo que significa la palabra. El proceso de descomposición abarca desde el sistema político, las instituciones públicas y empresarios hasta algunos aspectos de las instituciones encargadas de la cuestión espiritual.

  • El SoCha es una falacia y una falsedad histórica enorme. Es simplemente una especie de Opio que ha llevado a la sociedad venezolana a un estado generalizado de Acedia. El SoCha no es socialismo porque no ha profundizado, ampliado, perfeccionado ni mejorado la democracia venezolana.

  • El SoCha es una aberración que no puede denominarse socialismo. El SoCha es simplemente un militarismo burocrático y no capitalismo ni socialismo.

  • El SoCha no es socialismo, porque el socialismo es precisamente la negación de la opresión, de la injusticia y de la sustitución elitista de la mayoría de los ciudadanos.

  • El SoCha no es socialismo, porque no postula un país ecológicamente reconciliado con el hombre, igualitario y libre.

  • El SoCha no es socialismo, porque sus impulsores (¿sochavistas?) prefieren el espectáculo grotesco y ridículo de la politiquería demagógica (claps, motores, operación cambalache, etc...) a la gestión racional, científica de lo social.

  • El SoCha no es socialismo, porque los dirigentes (¿sochavistas?) nunca han sabido (entendido) que la clave de una verdadera racionalidad económica consiste en planificar, producir y distribuir bienes y servicios ajustándose a una rigurosa jerarquía de necesidades considerando que los beneficios residen en el ajuste entre ofertas racionales y demandas racionales.

  • El SoCha no es socialismo, porque los dirigentes (¿sochavistas?) sucumbieron ante Mammona al decidir de manera arbitraria, irracional, irresponsable, cruel , inmoral, vender parte del país (fauna,flora,agua) por un puñado de dólare$( Arco Minero del Orinoco-AMO). Con el AMO el Psuv demostro un gran déficit de Solidaridad Diacrónica. Estamos ante un ejemplo evidente de falta de desarrollo moral de los promotores del AMO.(Digo desarrollo, y no conciencia moral, porque estoy convencido de que ellos saben perfectamente lo que hacen, y que no está bien hacerlo. Pudiendo optar por un comportamiento decente y honesto, decidieron obrar de manera equivocada. Tienen, conciencia moral, pero son incapaces de actuar de acuerdo a la misma, como consecuencia de su escaso desarrollo moral. Se quedaron en el ESTADIO 3 NIVEL II: CONVENCIONAL de Lawrence Kohlberg.

  • El SoCha no es socialismo, porque los dirigentes (¿sochavistas?) no han aportado soluciones técnicas a los grandes y complejos problemas que nos aquejan. El SoCha no es socialismo, porque los dirigentes (¿sochavistas?) no han sido capaces de crear una cultura política a la altura de la realidad, ni tampoco han pensado un proyecto (viable) común de sociedad fundado sobre valores éticos ampliamente compartidos. Muchos de los dirigentes (¿sochavistas?) son adoradores de MAMOM y están movidos por la Codicia y la Avaricia.

  • El SoCha no es socialismo, porque los dirigentes (¿sochavistas?) no han sido capaces de lograr que la solidaridad cuaje en modos de ser de los ciudadanos venezolanos, dificultándose así la construcción de una sociedad solidaria y decente.



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Luis Antonio Azócar Bates

Matemático y filósofo

 medida713@gmail.com

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