Por ahí va la cosa señor ministro Héctor Rodríguez: “sin prisa pero sin pausa…”

Quienes bregamos humildemente con “pasión patria”—parafraseando al Comandante-- en la educación básica oficial, nos causó gran satisfacción las declaraciones e iniciativas realizadas recientemente por el novel ministro Héctor Rodríguez sobre áreas neurálgicas dentro del ministerio, que a nuestro entender, deben ser atendidas con urgencia como lo señaláramos en anterior entrega (Carta al Ministro de Educación Héctor Rodríguez. Aporrea17/01/2014) para no correr el riesgo de que se diluyan los grandes avances que en materia de inversión socio-educativa (becas, programa de alimentación escolar PAE) y didáctico-pedagógico (Colección Bicentenario y canaimitas ), entre muchos otros, se han logrado en Revolución.

El primer aspecto señalado por el ministro Rodríguez tiene que ver efectivamente con hacer una gran Consulta Nacional por la Calidad Educativa con el ineludible propósito de iniciar una evaluación integral de la Educación Bolivariana con la participación de todo el país, sobre todo de sus principales actores, estudiantes, docentes, padres y representantes y comunidad local. Consulta que necesariamente deberá tomar en cuenta diferentes aristas, factores y programas como el PAE, lo cual este último, a nuestro criterio, debe pasar primero por una profunda revisión a razón de que dicho programa-insistimos- se ha convertido en un importante foco de corrupción en donde mafias de viejo y nuevo cuño se han apropiado indebidamente de los recursos destinados alimentar a más de 4 millones de estudiantes: Cooperativas de alimentación en donde se pagan y se dan el vuelto, inconsistencias abismales entre órdenes de pago y entrega de alimentos, desviación de productos alimenticios hasta destinos inconfesables, etc. Toda esta deleznable operación ha sido documentada en los informes de la Contraloría General de la República en reiteradas oportunidades, desde hace algún tiempo, sin que haya habido, pareciera, voluntad política de gestiones anteriores recientes en darle curso a una multiplicidad denuncias con el propósito de establecer responsabilidades penales y administrativas que ayuden adecentar tan importante programa y garantizar así su eficiencia. Por lo tanto proponemos que este servicio sea definitivamente administrado por el Ministerio de Alimentación conjuntamente con los Consejos Educativos (resolución 058), además de absolver al personal de madres procesadoras como trabajadoras ordinarias de esta última , para evitar que las mismas emigren hacia mejores condiciones de trabajo.

Por otra parte, el ministro ha señalado palabras más palabras menos: que no debería haber déficit de docentes si existe en promedio, según él, un maestro por cada 20 estudiantes, cifras que no la ponemos en duda, lo que nos causa sospecha es: ¿si buena parte de esos docentes están laborando en sus respectivos puestos de trabajo? Lo decimos, porque estamos seguro, que un alto porcentaje de éstos profesionales de la docencia se encuentran de reposos ilegales, en nóminas fantasmas cobrando sin trabajar, en necesidades de servicios chimbas, en clausulas laborales trampeadas, en permisos injustificados, en actividades politiqueras, etc. Esta vergonzosa realidad representa miles de horas académicas no desarrolladas lo que atenta contra la formación integral de nuestros muchachos. Pero lo más grave es que con estas prácticas contribuimos a ponerlos al servicio de la delincuencia y criminalidad.

Sinceramente sugerimos al ministro Rodríguez hacer como uno vez lo hizo el Presidente Chávez: darse una vuelta por algunos liceos y escuelas de nuestra geografía nacional de manera “sorpresiva”, sin que medie toda esa estructura burocrática y protocolar que en muchos casos maquilla realidades y encubre irregularidades, para constatar de primera fuente los problemas inherentes a la educación, como por ejemplo la falta de algunos docentes especialistas en el área de ciencias: biología, química, física e informática, entre otros aspectos. El otro elemento que señalaba el rector de la educación básica, era lo que tenía que ver con la formación docente bajo los parámetros de la Educación Bolivariana, que en nuestro criterio tuvo un gran impulso cuando el camarada Aristóbulo Izturis fue ministro, pero que actualmente dicha filosofía educativa ha venido siendo un triste saludo a la bandera en las instituciones oficiales salvo honrosas excepciones y execrado por completo de la educación privada. Ante preocupante diagnóstico proponemos retornar las jornadas de formación educativa docente (compromiso establecido en reunión de docentes con el Presidente Maduro en el lanzamiento de la consulta nacional por la calidad educativa calidad educativa 10/04/ 014) que además sirva de espacio para el debate critico-constructivo de la realidad educativa- esperamos que así sea --y en definitiva se construyan las propuestas para elaboración del reglamento que complemente la ley Orgánica de Educación (2009) y la resolución colectiva de los múltiples problemas que subyacen en nuestro sistema.

Por último el ministro se ha referido al IPASME en el sentido de mejorar su función de asistencia y previsión social. De verdad ministro ha sido una tragedia para nosotros los docentes y familiares, el poseer un seguro de 20 millones de bolívares que no alcanza ni para una cirugía ambulatoria y de paso nos encontramos con un IPASME de servicio medico deficiente que se ha convertido en muchos casos en agencias de venta de reposos y incapacitaciones ilegales. En este contexto también proponemos después de una rigurosa supervisión la intervención de esta institución para transformarla radicalmente en un servicio digno y orgullo de nuestra profesión.

Reciba pues camarada Héctor Rodríguez de parte de un grupo de docentes y trabajadores nuestro apoyo moral y político a la hora de tomar las grandes decisiones—sin prisa pero sin pausa- que deberán encausar la educación pública Bolivariana hacia los senderos de la sociedad igualitaria que una vez soñó el libertador y que después de 200 años Hugo Chávez retomó.

Los pueblos marchan hacia su grandeza en los mismos términos que camina su educación.
Simón Bolívar

rebar2@hotmail.com


Esta nota ha sido leída aproximadamente 2556 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter