Madrid, 29 Jun. Venpres.- Las víctimas del ex militar argentino Ricardo Miguel Cavallo, aportarán nuevos documentos y testimonios para reforzar la acusación sobre la red financiera que creó en las últimas décadas con patrimonio de los afectados, reveló la agencia Notimex.
Cavallo, quien llegó este domingo a Madrid extraditado por el gobierno de México para ser juzgado en la Audiencia Nacional española por crímenes de genocidio y terrorismo, es también investigado aquí
por sus negocios en varios países de América de Latina.
Dentro de la causa penal que en Madrid se sigue a la dictadura militar argentina, una de las vertientes sobre las que se acusan a los ex militares es la del enriquecimiento con el dinero y bienes de las víctimas.
El perfil económico de Cavallo se remonta a décadas atrás, cuando junto a otros ex militares formaron sociedades anónimas en Argentina, presuntamente con dinero de los presos y desaparecidos, y creó su compañía Talsud.
El argentino Federico Gómez, hijo del empresario Conrado Gómez, desaparecido en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (Esma) en 1977, denuncio que Cavallo junto a otros ex militares se apropió de tierras y propiedades valoradas en más de 10 millones de dólares.
En declaraciones a la prensa afuera de la Audiencia Nacional, Gómez señaló a Miguel Angel Egea como principal socio de Cavallo en lo que calificó como "delitos económicos" al crear sociedades
anónimas "para administrar el botín de las víctimas".
Consideró necesario que las autoridades argentinas se sensibilicen con las peticiones de las víctimas, que piden se castiguen los crímenes de la dictadura militar (1976-1983), entre los que están éstos de la red financiera que crearon.
Marcelo Hernández, una de las víctimas que pasó dos años recluido en la Esma, acudió este domingo a la Audiencia Nacional española para ver la llegada de Cavallo a ese tribunal y habló de su caso personal.
"Fui secuestrado el 10 de enero de 1977 y sí puedo identificar a Cavallo en la Esma. A nosotros nos usaron como excusa para montar una empresa de dinero", dijo Hernández al comentar la forma en que se
apoderaron de los bienes de los detenidos.
Hernández, empleado de Conrado Gómez y testigo del desmantelamiento de las propiedades del empresario de Mendoza, Argentina, es unas de las voces para argumentar la forma en que se creó la trama financiera con el dinero de las víctimas.
La empresa Talsud, creada por Cavallo, se especializó en base de datos para emisión de licencias de conducir, controles de vehículos, armas, transportes y personas, y además extendió sus negocios a México, El Salvador, Bolivia, Brasil, Zaire y Argentina.
Con esa compañía, que estuvo asociada a la francesa Gemplus y Henry David, Cavallo logró se le concediera en 1999 la gestión del proyecto del Registro Nacional de Vehículos (Renave) en México.
En El Salvador, los negocios de Cavallo se identifican con la firma Sertrace (Servicios de Transporte Centroamericano), filial de Talsud y operada por Oscar Eduardo Cavallo, hermano del acusado.
En 1999 también su empresa ingresó en Bolivia donde adquirió la licitación del Registro Nacional de Identidad, con lo que tendría como clientes a la Policía Nacional de Bolivia y el Registro Único Nacional.
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La fuente original de este documento es:
Venpres (http://www.venpres.gov.ve)
