22 de agosto 2008. - El presidente Hugo Chávez deseó que arribe a la presidencia de Estados Unidos “un hombre serio con quien se pueda hablar: que no sea un borracho, que respete al mundo, que no sea un loco”, al recordar este viernes imágenes divulgadas por varios medios y en Internet del mandatario de esa nación, George W. Bush, durante su estadía en China para presenciar las Olimpiadas.
El jefe de Estado, durante la inauguración de una planta procesadora de plátanos en la región de Barlovento, en el estado Miranda, al norte del país, ratificó su convicción de que las fotografías no son un montaje y advirtió el riesgo que implica tal conducta tratándose de alguien que dirige un gobierno tan poderoso.
“¡Y es el jefe del imperio! ¡Vaya, qué peligro para el mundo!” agregó, al considerar también que “todos los candidatos de la oposición son los candidatos del borracho de Pekín”, recordando también el respaldo que el Gobierno estadounidense les ha dado ahora y cuando dirigieron el golpe de Estado de abril de 2002.
Mientras bromeaba en torno al contenido de las fotos describió algunas de las imágenes: “Tuvieron que sacarlo de la cancha de voleibol de playa. Bajó a la cancha y quería tocar a las muchachas. ¡Se volvió loco! Bueno, más de lo que normalmente es (…). Él se cayó y se rompió el codo, el codo lo tiene roto”.
Al ratificar su deseo por que se produzca un cambio en la política estadounidense luego de las próximas elecciones presidenciales, Chávez expresó que el mundo quiere paz y que Estados Unidos siempre será un país grande, sólo que está dejando de ser un imperio y sus dirigentes tienen que aceptarlo.
“Estas fotos no las sacan. Imagínense ustedes que le hubiese pasado eso a Hugo Chávez. Eso estaría en primera plana, con videos y todo eso. Las escondieron, nosotros las conseguimos por ahí con nuestras agencias de inteligencia mundiales que están funcionando por todas partes, comentó entre sonrisas.