Las noticias sobre Venezuela continuamente también son manipuladas en España por los diarios y los noticiarios televisivos. Con respecto a la reseña informativa que hizo el diario "El País" de la convocatoria realizada por el gobierno en Caracas es evidente tal manipulación. Intentaré destacar tres puntos resaltantes de tal manipulación:

1. La noticia la encabezan con un titular que expresa "Decenas de miles de partidarios de Chávez..." luego en el cuerpo de la noticia insiste sobre esta información (sobre la cantidad de participantes en la convocatoria,) pero finalizan el párrafo introduciendo la cantidad de participantes en la marcha de la oposición, y a esta se le asigna una cifra precisa "Tampoco hubo disturbios en la manifestación "antichavista" del pasado miércoles que, según fuentes opositoras, reunió a más de 500.000 personas"; como para que el lector compare. No obstante, un lector perspicaz no dejará de preguntarse que así como señalan la cantidad precisa de la marcha "antichavista" (500.000 personas), ¿no era posible conseguir una cifra más precisas, aunque fuese tambíién de fuente "chavista", que evitara tal ambigüedad informativa? ¿Por qué en un caso sí y en el otro no? Suponemos que el propósito cognitivo era alcanzar precisamente dicha ambigüedad, de modo tal que al lector le quedara impoluta la grandiosa cantidad de la marcha opositora, mientras que quedara vaga y difusa la de los "chavistas". Esto no es información, esto es manipulación con fines cognitivos-informativos muy claros.

2. Otra parte de la noticia la dedica aclarar a los lectores españoles qué ha justificado tanto la convocatoria de los "opositores" como la de los "chavistas" y expresa que están motivadas con la posibilidad de realizar un referendo revocatorio. Pero es aquí en donde vuelve a manipular la objetividad este diario. Dice textualmente: "La polémica hunde sus raíces en el artículo 72 de la Constitución Nacional... , que prevé la posibilidad de separar de su cargo al jefe del Estado mediante un reférendum revocatoria." Quizá para el venezolano informado esto no sea significativo (es decir, no establezca la pertinencia de proponer una más exacta aclaración), pero a la hora de informar al ciudadano extranjero sí lo es. Nuestra Constitución en el mencionado artículo lo que expresa textualmente es que "Todos los cargos y magistraturas de elección popular son revocables." TODOS. En la información periodística esto no es simple forma. Tratar así el mencionado artículo lesiona vivamente su espíritu y no posibilita que el lector español (desconocerdor de tal instrumento) logre ver el alcance del mismo y la transcendencia de su aplicación con respecto al actual gobierno (no del presidente, sino de todos los actuales cargos públicos en Venezuela).

3. Por último, y lo que me resulta más chocante del tratamiento que hace este corresponsal se refiere a su reseña del pacto firmado entre el gobierno y la oposición auspiciado por la OEA. En la noticia, el corresponsal trata claramente de dirigir la interpretación de los lectores hacia la creencia de que dicho pacto fue un logro de la lucha política de la oposición, que prácticamente fue un pacto que se le haya impuesto al gobierno, y que en dicho pacto se expresa textualmente la realización obligatoria del referendo revocatorio al presidente como punto fundamental. Primero, todos sabemos que dicho pacto fue más bien un "parto" para ambas partes. Segundo, que la oposición poca credibilidad le daban al mismo y que sus actividades han estado dirigidas hacia salidas anticonstitucionales (golpe de estado, paro general, etc.) Por último, que en este acuerdo lo que se expresa textualmente es la realización de todos los referendos revocatorios, una vez cumplidos los trámites legales, de aquellos gobernantes que hayan cumplido la mitad de su mandato, incluidos el del presidente de la república.

Todo indica que en estos tiempos de relatividad absoluta, nada está seguro y todo es cuestionable. Por ello, las ideas se vuelven borrosas e intentar promover la necesidad de la objetividad noticiosa es una necedad. Antonio Pascuali insiste en que prefiere unos medios de comunicación que se excedan a unos medios que sean coartados y censurados. Yo insisto que frente a tanto refugio en la indecible, también queda mucho espacio para aprovechar el conocimiento generado hasta ahora. Que ya que los medios se autoproclaman como el "Cuarto Poder" es necesario hacerles frente con el "Quinto Poder" (ojo, no la "Quinta República", que es otra cosa). Si es verdad que no hay seguridades absolutas, también es cierto que hoy por hoy sabemos más de nosotros como seres culturales que hace cien años atrás. Este "Quinto Poder" debe ser, entonces, la crítica constante a los excesos (venga de donde vengan), la reflexión sesuda de nuestras interracciones y sus consecuencias en nuestras vidas. La racionalidad es un bien al cual nunca debemos renunciar.

(*) Catedrático de Comunicación.