Hoy Gonzalo Gómez de Marea Socialista ocupa primera plana del periódico fascista El Nacional, con el título de la entrevista “Hay condiciones para que el pueblo esté molesto. El gobierno de Maduro está extraviado”; señalando Gómez, “Más allá de los argumentos del gobierno referidos a la llamada guerra económica, el gobierno es el responsable de la política económica. Hay rabia, malestar y decepción debido al ajuste económico que ha instaurado. Estamos en un proceso involutivo con altos ingredientes de militarización. El gobierno de Maduro perdió la conexión con el pueblo”. Rematando con la frase: “En este momento todos en el gobierno no están buscando soluciones, sino salvar su pellejo”.
Declaraciones enmarcadas en lo que denomina Marea Socialista “el chavismo crítico para construir una oposición a la izquierda del gobierno”. ¿Cómo interpretamos esto? Leamos parte del último editorial del equipo operativo organizacional: “hay la necesidad de construir una nueva referencia política y reconstruir el proyecto nacional” ¿Se referirán al Proyecto Nacional Simón Bolívar que plasmó el comandante Chávez en su Libro Azul? ¿O más bien al Plan de la Patria?
Para entender mejor tal editorial, leamos lo siguiente acerca de la política del gobierno de Maduro: “Se trata de una involución totalitaria y represiva, de violación de derechos constitucionales, bonapartista”. La palabra que faltó fue “estalinista” para ubicar Marea Socialista en los planteamientos de la IV Internacional y de su Secretariado Unificado que abandonaron el centralismo democrático, para fomentar el trotskismo y la proliferación de partidos que se declaran anticapitalistas; en respuesta ahora al paradigma postmoderno y el fraccionalismo que tanto daño hacen a nuestras revoluciones progresistas latinoamericanas.
Sólo hay que abrir el Portal de la Izquierda en Aporrea, para darse cuenta de tal proliferación: MES en Brasil, MST en Argentina, Sol.bo en Bolivia, Unidad Popular en Ecuador, MPGT en Perú, Redacción Insurgente en Paraguay, PT en Uruguay y BAM en Chile; supuestos partidos de izquierda deslindados del PT de Brasil, Partido Justicialista de Argentina, MAS de Bolivia, AP de Ecuador, FA de Perú, FA de Uruguay y PS de Chile, respectivamente.
Igualmente, las declaraciones de Gómez y el editorial de Marea Socialista tienen un claro sesgo oportunista y socialchovinista, cuando entre líneas profesan la “defensa de la libertad”, señalando que “en cuanto a derechos constitucionales (el gobierno) limita al extremo el derecho a la organización y la protesta social y política de la población” reza el editorial; con lo cual Marea Socialista se coloca del lado de la MUD, opuesta a la revolución bolivariana y ganando centimetrajes y audiencias escuálidas en los medios mercantiles de información y comunicación.
Finalmente, recordemos a dos importantes partidos políticos de Chile en la década de los 70, plagados del infantil izquierdismo y que contribuyeron a derrocar al presidente mártir de Chile, Salvador Allende, con posiciones y tácticas radicalizadas: el Movimiento de Acción Popular Unitaria (MAPU) y el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR).
Por ello, no permitamos que Marea Socialista y sus secuaces invadan los espacios del chavismo; hay que impedirles penetrar y sabotear las instituciones del Estado, así como debilitar al PSUV y al Polo Patriótico.
No pasarán estos traidores de pacotilla que infantilmente se ponen al servicio del Departamento de Estado de EEUU, de la burguesía criolla y de sus instrumentos mediáticos de disociación y mentiras.
