Como no recordar aquel 27F de 1989 cuando las calles se trasformaron en escenario de lucha, violencia, dolor, lágrimas y muerte.

Nunca antes había ocurrido un estallido de esta naturaleza de muchas y muchas personas, que sin importales nada, arrasaran con todo, saqueando con ira hasta el pequeño negocio de su barrio. A su paso temerario, la violencia se adueño de las calles, haciendo añicos lo que se ponía adelante. El odio de clase se había desatado y la gente humilde cansada que la jodan se arrecho y arrasó con todo.

Esta vez la burguesía sintió el impacto de la lucha y perdió el control; la burguesía pensaba gobernar tranquila, sin sobresaltos con engaños y falsas promesas mantendría quieta a una sociedad crédula, que aceptaba pasiva la corrupción de su clase dirigente.

Estos días tristes de la historia venezolana nos recuerda la reacción de un pueblo cansado, subestimado, tratado inhumanamente, condenado a vivir en la miseria, el hambre y la represión por los dueños de las riquezas de Venezuela, dilapidada en el casino capitalista, mientras los verdaderos dueños a penas recibían migajas para sobrevivir. Como era posible otra vez engañados por el partido del pueblo?

Carlos Andrés Perez había prometido sacar al país del atraso, recorriendo Venezuela en la campaña electoral del '88 y haciendo alardes de su verborragia demagógica, se metió con cintura a la gente convenciéndola de que el era capas de gobernar para los mas humildes.

Venezuela en ese momento presidida por sus compañeros de partidos, un adeco de pura cepa que instalo la corrupción mas grande que recuerde el país. Ya Perez en su primera presidencia, con el IV plan de la nación se gasto la enorme bonanza petrolera favoreciendo a la burguesía emergente los 12 apóstoles - y desarrollo los índice de pobreza mas altos el pueblo. Hizo crecer a la clase media alta gerenciadora del Estado y particularmente de PDVSA, la mayor colectora de petro-dólares.

Nadie imagino que Perez un político hábil, y bien dotado de populismo despues de asumir la presidencia con la presencia de Fidel Castro, D. Ortega y otros lideres sentados en el acto de juramentación, pueda aceptar el receptorio del F.M.I. El populismo no fue ningún atenuante y de una vez en forma acelerada aplico el ajuste.

EL ajuste fue directo a los alimentos y al trasporte colectivo. Mas de cuatro veces crecieron los precios y el valor del pasaje. En menos de unos meses de gobierno, Perez lanza el paquete antipopular. La sorpresa de la gente fue enorme, no se la esperaba, como era posible que un país rico, con petroleras en alsa, con un estado empresario, con la clase media nadando en dolares y un pueblo pobre y humillado tenga que aguantar esta situación económica.

Esta clase política, los lusinchis, los calderas y ahora nuevamente Perez, hayan contraido la deuda mas grande de la historia.

Un despropósito de la clase dirigente, que le significa a los pobres un esfuerzo inaguantable, imposible, terminal para la vida de los venezolanos. A la burguesía no le importa nada y se compromete con el F.M.I a pagar deuda impagable, contraida por la corrupción.

Esta situación exploto por la mañana, arrasando todo en las calles, quemando autobuses, saquenado abastos y negocios. La ira popular se hizo sentir en forma terrible. Las nefastas medidas neoliberales lanzo a la gente a las calles. Los barrios de caracas, desde los cerros baja el anónimo, el trabajador, el vecino, las familias, los jóvenes, que se transforman perdiendo el miedo a la represión y el podes político. La burguesía quedo aterrada por dos días 27 y 28 F; el control de la ciudad estuvo en manos de la gente.

A penas pudo el gobierno salir del pánico se lanzo a reprimir violentamente.

Las F.F.A.A ocuparon la ciudad capital con un saldo de miles de muertos y encarcelados. Una parte de las FAN se negó a reprimir. Esa fue la fuerza de Chávez, los bolivarianos que hacían su primera aparición publica junto a los venezolanos, ahí nace ,a nueva Venezuela, se crean las bases de la reconstrucción de la patria de Bolívar. El dolor la angustia y la ira y muchos cojones le pusieron el pecho a los asesinos, a los responsables del hambre, la represión del antipueblo. La burguesía representada por C.A.P. Henry Ramos Allup y el cogollo adeco, queda atrás con el peso de la lucha del hombre común, el anónimo, el desconocido, el de los ranchos de techo de cartón, aquel que bajo de los cerros, el que a penas comía, respiraba y dijo basta!

Este en un recuerdo de homenaje al heroísmo de este pueblo, a la gente a los que lucharon y vencieron y se reencontraron en el 4F del '92 con "el hombre", con su líder, con esa patria del joven y valeroso teniente coronel, el comandante Hugo Rafael Chávez Frías!

Muchos luchadores de la izquierda que pregonábamos el socialismo no teníamos la plena confianza que el pueblo bajaría de los cerros a enfrentar a los ajustadores, nuestra puesta estuvo puesta en generar la alternativa revolucionaria en forma idealista, por eso hicimos en el '88 la campaña electoral apoyando a José Vicente Rangel para crear la opción contra el bipartidismo. No pudimos movilizar a las masas, no entendimos que el estallido, el caracazo, la ira social estaba pisandonos los talones.

Como todo hecho histórico, la acción decisiva de masas es única e irrepetible. Se tiene que dar todas las condiciones para que suceda y una de ellas a gota que desborde el vaso, el paquetazo fue el detonante de la explosión popular. La violencia en la partera de la historia- Leon Trosky- y la violencia abrió de par en par las puertas al 4F, juntando los dos elementos conformativos de una nueva historia: las masas y la dirección. Fue el comandante eterno que mejor leyó este capitulo del estallido social y se puso al frente de un nuevo tiempo, el de la espada de Bolívar y la consciencia de un pueblo ansioso de libertar.

Muchos actos de calle ejemplificaron esos días la conducta social. Me cuenta una compañera del 23 de enero - " ahí saquearon a todos, menos a una portuguesa, porque cada vez que lo intentábamos ella nos recibía a botellasos de cerveza. A los negocios que nos daban fiado cuando no teníamos un céntimo y podíamos llevar a la casa el pan, no los tocábamos"- un hecho de esta historia que llamo la atención fue un hombre que venia del Silencio por Av. Lecuna en dirección al Parque Central con un colchón de dos plazas al hombro; el hombre muy cansado se para en medio de la calle y lo prende fuego. O aquel otro con un pesado cuarto trasero de res lo arrastraba como podía por la calle. La gente quería llevar a su casa alimento, carne que hacia tiempo no comía. En los saqueos no hubo conflictos, el problema era con la policía que tiraba a matar.

Esta epopeya popular siguió su rumbo y no hubo represión que la detuviera.

Tres años despues este movimiento se encuentra con Chávez. Porque la acción no tuvo lideres, se manejo anárquicamente dejandonos perplejos a las fuerzas revolucionarias, al PCV, la liga socialista, Ruptura, POR posadista, que apostamos a la alternativa anti AD-COPEI, con la actividad electoral, pero jamas alcanzo a producir el cambio.

Construir una opción estuvo siempre en el centro de la escena política, pero a penas nuestra lucha acarreaba fuerzas pequeñas para combatir al bipartidismo. Tuvo que darse el 4F para provocar la reacción social masiva y romper con los partidos tradicionales de la derecha.

Fue la acción de los militares nacionalista el factor clave que produjo la ruptura de las masas pobres con la demagogia de AD-COPEI. Por su acción y ejemplo el 4F constituyo el núcleo referencial de millones de venezolanos descreídos de la IV República y sus lideres.

Venezuela despertó políticamente a partir del 27F y se funde con un abrazo revolucionario revolucionario con los hombres del 4F para trasformar el país. El 27F es la madre real del chavismo y es hoy la lucha del pueblo, el poder de los bolivarianos, que enfrenta a la derecha fascista y los resabios de un pasado que en cada momento pretende aparecer y hacer retroceder la Revolución, sus logros y la lucha por el socialismo.

Por eso hay que mantener la calle, la movilización, las presencias en las esquinas calientes para impedir que la derecha dañe el proceso político con medidas parlamentarias como la Ley de Amnistía, un verdadero intento de golpe parlamentario. Hay que volver a derrotarlos con la calle, con la gente, con el pueblo movilizado porque contra eso no hay Ramos Allups que pueda provocar y tener éxito. La Asamblea Nacional tiene que volver a ser chavista y un parlamento democrático al servicio de Venezuela bolivariana y socialista. Permitir que los asesinos, los corruptos, los terroristas queden libres, es un despropósito, la Revolución Bolivariana no puede ni lo va a permitir.