En primer término no todas las provincias que componían el territorio de la Capitanía General de Venezuela se habían sumado a la gesta libertaria del 19 de abril de 1810 ni  al  5 de Julio de 1811; Maracaibo, Coro, Guayana, se manifestaron a favor del rey. Lo que suponía un enfrentamiento entre ambos partidos a favor y en contra de la independencia. 

 La frágil unidad civico-militar republicana, la creciente crisis económica del territorio, la inexperiencia bélica y algunos acontecimientos van cambiando el curso de una entusiasta y naciente república donde las nuevas instituciones están en un proceso de asentamiento y consolidación para darle forma a una nueva nación independiente.  Numerosos elementos propician la resistencia del imperio español ante la pérdida eventual de sus colonias. En un primer intento por someter a los realistas de Coro  había fracasado la expedición del Marqués del Toro, designado para dicha misión, de igual forma Valencia se subleva y Miranda, después de grandes perdidas logra reducir a los sublevados de aquella ciudad, sin embargo la caída de la República solo es posible cuando los elementos mencionados se conjugan dándole forma a nuestra primera derrota como República independiente.

 El Terremoto de Caracas y la reacción realista.

 El terremoto del 26 de marzo ha dejado una sangrienta en  estela en varias de las provincias del territorio venezolano . Alrededor de 10.000 civiles solamente en Caracas han fallecido a causa del fenómeno natural, que de paso, va alimentado el debate de la aplicación de justicia divina contra las acciones  revolucionarias de los provincianos.  A su vez puede catalogarse como el punto donde comienza  el declive de la Primera República, las guarniciones de Barquisimeto y San Felipe fueron parcialmente destruidas. El cataclismo catalogado por la iglesia como un castigo a la rebelión   repotencia las reacciones  realistas  que se habían iniciado días atrás desde Coro, con Domingo de Monteverde  quien de ser solamente un Oficial de de la Real Marina de guerra de España se convertirá en el jefe militar de las tropas realistas desconociendo  la autoridad militar de el hasta entonces gobernador y jefe militar, el Brigadier José Ceballos.

 Desde el 10 de abril el gobierno provincial de  Caracas había  ordenado a Francisco de Miranda que marchara hacia la ciudad de Valencia para que sus servicios fuesen utilizados “del modo más conveniente a la salud de la patria”, el momento no era el más propicio para exigencias y por la profunda crisis económica en la cual rápidamente había afectado a la naciente república y Miranda requería urgentemente fuese dotado de tropas y navíos para poder detener el avance de los realistas de occidente, recuperar Guayana y capturar Maracaibo.

La pugnas contra Miranda, El  Generalísimo.

 Desde el 10 de abril el gobierno provincial de  Caracas había  ordenado a Francisco de Miranda que marchara hacia la ciudad de Valencia para que sus servicios fuesen utilizados “del modo más conveniente a la salud de la patria. Para ello  Miranda fue nombrado General en Jefe de  las armas de la Confederación Venezolana el 23 de abril con todas las facultades necesarias para salvar al territorio “ invadido por los enemigos de la libertad colombiana”

 Cabe destacar que desde el nombramiento de Miranda hasta su aprisionamiento en el puerto  de La Guaira hubo algunos desacuerdos entre algunos oficiales y civiles miembros de la cámara de diputados del congreso, encabezados por el Marqués del Toro.   A pesar de que Miranda tenía partidarios entusiastas de su causa, durante los siguientes meses, la falta de unidad en torno a su mando, el recelo personal de algunos mantuanos y otros militares criollos  envueltos en el proceso revolucionario quienes no cesaron de intrigar y conllevar acciones de oposición contra el Generalísimo, desde su toma de decisiones hasta sus acciones  administrativas y militares. Convirtieron la República en blanco de comentarios malsanos motivando la falta de unidad en el alto mando patriótico para que la primera república caiga rápidamente en manos de los partidarios del Rey.

 La pérdida de la región Centro Occidental del territorio.

 Monteverde al mando de una tropa otorgada  por  la gobernación de  Coro avanzó sobre Barquisimeto, Quíbor  y El Tocuyo donde fueron aclamados por la población,  destaca al Capitán Francisco Mármol para que someta a la población de Araure y en efecto esta misión es cumplida a cabalidad con la cooperación de la deserción de  los patriotas que desertan en masa y van a engrosar las tropas realistas.  Con solo 600 hombres  Monteverde ocupó San Carlos, la inexperiencia de las tropas republicanas, la indisciplina, la escasez de armas se convirtieron en los grandes aliados del enemigo.

 En Valencia se rebelan contra el gobierno repúblicano, Miranda había dejado la ciudad en manos del coronel Miguel Uztáriz, y parte inmediatamente a Caracas para conferenciar con las autoridades provinciales y obtener nuevas tropas, sin embargo ante los continuos asaltos que sufren los  soldados y oficiales repúblicanoa dentro de la ciudad aún antes de que se aproximen las fuerzas de Monteverde,  decide evacuarla destruyendo hecho buena parte del material de guerra que en su evacuación había estimado no poder transportar. Ni Miranda ni Ustáriz  tienen grandes medios para defender la ciudad. Miranda, que ha salido de Caracas hacia Valencia con el grueso de sus fuerzas el 1 de mayo, no logra llegar a la ciudad y esta es ocupada por los realistas.

 Un mes después de perder Valencia acaeció un suceso aún más desastroso y letal en la suerte de nuestra primera e incipiente República, la pérdida del Castillo de Puerto Cabello. Guarnición asignada por el General Miranda al joven Coronel Simón Bolívar, donde estaban resguardados los pertrechos de las tropas republicanas; por donde se establecía comunicación con La Guaira y donde estratégicamente era la puerta de entrada de socorros y armas del extranjero para la guerra. 

 El 30 de Junio estalló una rebelión  en el Castillo encabezada por los prisioneros españoles recluidos en ese sitio condenados por conspiradores contra la República desde el año de 1810 quienes aprovechando la ausencia ocasional del comandante de guardia sublevan al resto de los prisioneros y aprovechando alguna que otra cooperación de origen venezolano se apoderaron del castillo y comenzaron a bombardear la ciudad. Después de varios días de combate para recuperar el castillo entre las fuerzas patriotas y los refuerzos realistas que fueron enviados a apoyar a los sublevados finalmente queda en manos del enemigo los recursos bélicos, alguna fuerza marítima y gran parte de las comunicaciones con otros puertos y por ende con el extranjero. La caída de Puerto Cabello fue la gota determinante que lleno el vaso y produjo el desenlace final de la pérdida de la Primera República.  

 La capitulación

 Diversos motivos allanaron la causa de la rendición de la República, la situación económica era insostenible, la producción de víveres esenciales para racionar las tropas estaba limitada, el papel moneda emitido por la autoridades gozaba del descrédito y  profunda era la desconfianza para las operaciones comerciales internas, los soldados se negaban a recibir la paga en dicho papel, la ausencia de rentas y en fin una crisis económica limitaba el accionar de las fuerzas republicanas. La indisciplina   militar, el flujo constante de deserciones y  traiciones generaban el más profundo pesar sobre el cuartel general de La Victoria, donde se hallaba el General Miranda.

   Solamente después de ver analizar esta situación aunada a la insostenible fuerza militar posterior a la caída de Puerto Cabello es que Miranda consulta con el Ejecutivo Federal, la posibilidad de una negociación que evite la guerra civil y un mayor el derramamiento de sangre producto de una pugna mortal entre castas y poderes.

 Entre el 12 y el 28 de julio y se llevaron a cabo las negociaciones para el armisticio, después de una serie de intercambios de correspondencia oficial entre ambos ejércitos . Se recogieron las condiciones  en 11 puntos a través de un documento final que fue reconocido entonces por ambas partes, sin embargo al poco tiempo después el nuevo Capitán General de Venezuela, Domingo de Monteverde violaría las clausulas de la capitulación , llevando la muerte y el pillaje  a las ciudades y a la sociedad republicana provocando con ello la desolación y la amargura en aquellos que en un futuro no muy lejano volverían a tomar las armas y a desconocer nuevamente la autoridad del rey sobre nuestro territorio.

Pa segui lellendo:

PARRA, P.,Caracciolo, Historia de la Primera República de Venezuela. Tomo II, Caracas,Tipografía Americana, 1939.

ARCHIVO DEL GENERAL MIRANDA, Campaña de Venezuela, Prisión y muerte del General Miranda. 1811-1816. Tomo XXIV, La Habana, Editorial LEX.1950

VILLANUEVA, Carlos A. Historia diplomática de la Primera República de Venezuela, Caracas, Talleres Altamirano, 1957.

OPCIONES - PARATEXTOS.

1.-) “ La patria se ha perdido en mis manos....mi espíritu se halla de tal modo abatido que no me hallo en ánimo de mandar un solo soldad...ruego a usted que me destine a obedecer al más ínfimo oficial, o que me de algunos días para tranquilizarme” 

Bolívar a Miranda  6 de Julio de 1812.

2.-) “ Acaba de nombraros el Poder ejecutivo de la unión, general en jefe de las armas de toda la Confederación Venezolana con absolutas facultades para tomar cuantas providencias necesarias a salvar nuestro territorio...”  Caracas, 23 de abril de 1812, II de la República.

 José de Sata y Bussy

 Secretario De Guerra

3.-)  “Ciudadanos: los muertos os llaman de la tumba para que venguéis su sangre derramada, los enfermos para señalaros las heridas que han sacado de acciones gloriosas. Los viejos, las mujeres y los niños, para que os escapeis del cuchillo asesino; y nosotros, para tremolar en Valencia, Coro, y Maracaibo el pabellón de Venezuela.

 F. de Miranda.

 Cuartel General de Maracay, 29 de mayo de 1812 año II de la República.

4.-) “ En cuanto a mí, yo he cumplido con mi deber; y Aunque he perdido la plaza de Puerto Cabello, yo soy inculpable, y he salvado mi honor. ! Ojala no hubiese salvado mi vida, y la hubiera dejado bajo los escombros de una ciudad que debió ser el último asilo de la libertad  y la gloria de Venezuela !”

  Simón Bolívar. Caracas, 14 de Julio de 1812.

poevia@yahoo.es