El concepto paleontológico de quimera se refiere a un fósil compuesto por partes de individuos de diferentes especies, que cuando fueron descubiertos se creyeron restos de una sola, por lo tanto al final no era verdadero, así es la MUD y el Gran Polo Patriótico no puede convertirse en eso, sería un error histórico imperdonable y pondría en riesgo, no sólo las elecciones del 2012, sino la revolución socialista bolivariana.  

El Polo Patriótico (parte I), donde participaron el PPT y Podemos fue un fósil compuesto por partes de diferentes especies que dio un resultado electoral muy puntual, pero en el fondo fue una quimera paleontológica, que incluso llegó a combinarse con la acepción de la mitología griega que define a la quimera como un moustro que vomitaba llamas y tenía tres cabezas: una de león, una de cabra y una de dragón que salía por la cola.  

Sin embargo la revolución soportó esta condición moustrosa de una quimera que llegó a ser necesaria producto de una coyuntura, para deslastrarse en su devenir de las cabezas de dragrón, cabra y león, y detener las llamas vomitibas, depurando su estructura para ir superando las condiciones de necesidad electoral para iniciar una verdadera discusión sobre un proyecto de unidad para el país (así podríamos decir que en la actualidad la quimera es la MUD, donde en la actualidad se ubica Podemos y PPT). 

Para llegar a donde estamos, se ha tenido que pasar por una propuesta de reforma constitucional fallida, pero que generó la movilización necesaria como para hacer deslindar a aquellos falsamente socialistas. También hemos tenido que pasar un ejercicio de mea culpa que invocó a unas 3R que al hacerse inviables (por la arrogancia del estilo de liderazgo dentro del proceso revolucionario), obligó al Presidente Chávez a rehacer la convocatoria a unas 3R², que al sol de hoy y después de casi un año, apenas empiezan a encontrar luz en vocería de quien en definitiva le puede dar factibilidad política a la convocatoria. 

Otro evento que ha transcurrido para llegar a donde estamos hoy (la convocatoria al Gran Polo Patriótico) ha sido el resultado de las elecciones parlamentarias del 26S, donde el balance final no satisfizo las expectativas creadas por la revolución, convocando nuevamente a la reflexión necesaria pero frustrada por intereses tendenciosos.  

Por último y sin pretender ser exhaustivo, para poder llegar a donde estamos nos encontramos con unas extraordinarias jornadas de reflexión a lo interno del PSUV, a través de 5 líneas estratégicas, que develaron en sus conclusiones profundas diferencias entre las bases y la forma de conducción de la dirigencia del partido, y que aún, después de seis meses no han sido publicadas por temor de algunos sectores a develar lo que es un secreto a voces.  

Ha sido dramático el retraso que se ha dado para la constitución del ahora llamado Gran Polo Patriótico, sin embargo, la beligerancia de organizaciones sociales y políticas como el Frente Nacional Campesino Ezequiel Zamora, El Movimiento de Pobladores y Pobladoras, La Corriente Revolucionario Bolívar y Zamora, Aporrea.org, Marea Socialista, algunos sectores de UNETE, el Bloque Socialista Unido de Liberación Homosexual, la Coordinadora Simón Bolívar, ANCLA, el PCV, el MEP y muchos otros que escapan de mi memoria, colectivos e individualidades que han sido aisladas por ser críticos y propositivos, han permitido que llegara el momento del debate profundo y sincero, en unidad, con un liderazgo claramente definido y no en función de una repartición de cargos o cuotas de poder, sino en función del destino de un proyecto político de país bolivariano y socialista. 

No tengo duda de la resistencia que a lo interno del PSUV algunas tendencias han generado ante la constitución del Gran Polo Patriótico, algunos obstaculizando su avance frontalmente y otros que con su omisión ya aportan lo suyo dificultando una realidad inevitable; la hora de colectivizar los procesos decisionales revolucionarios, con método, con sentido, con ética y sin burocratismo.  

El método de constitución del Gran Polo Patriótico (Socialista) debe partir de una relación horizontal y entre iguales, con vocerías rotativas, incluyente y de actividad regular, que planifique el abordaje de un conjunto de puntos de agenda priorizados que den respuesta a lo importante y luego a lo urgente, que pretenda debatir los grandes temas y no sólo la cotidianidad, y que desde su seno nazcan una serie de propuestas para el gobierno revolucionario. El Gran Polo Patriótico, casi por principio debería tener restringido el tema electoral, con el fin de no distraer su atención, y así permitir discutir lo importante para el país en cuanto a lo social, económico y político, además de tener un espacio mensual permanente de encuentro con el Presidente Chávez para que no se creen los vicios de la intermediación política.  

El Gran Polo Patriótico por otra parte, debería ser un centro de producción de críticas leales y propuestas comprometidas, que den pie a un debate abierto, donde se inviten permanentemente a líderes locales, comunales y sectoriales, campesinos y campesinas, obreros y obreras, clase media, artistas, deportistas, estudiantes, pequeños y medianos empresarios, intelectuales, académicos y académicas, activistas y militantes a proponer sus proyectos e ideas por tiempo silenciadas, en aporte al crecimiento del proceso revolucionario.   

Si el inicio de constitución del Gran Polo Patriótico (que creo inevitable llamar “socialista”, en conciencia del llamado a la prudencia en el uso del término por parte del Presidente Chávez) es contundente, inclusivo e incluyente, diverso y plural, tolerante, eficiente y eficaz, incorporando para ello las tecnologías de la comunicación e información, estaremos hablando de una verdadera plataforma para ir más allá del 2012 hacia un rumbo socialista certero, de lo contrario, ésta quimera nos quemará, el PSUV no puede ni debe ser el único responsable del buen rumbo.

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