"En Venezuela los trabajadores hemos pagado toda la confrontación política que han llevado a la clase trabajadora a una verdadera crisis, con salarios de hambre y en estado de semi esclavitud", así lo dijo Horacio Silva, trabajador petrolero de la refinería de El Palito, estado Carabobo, quien se ha expresado sobre el marco general de la situación que está atravesando el país, a propósito de la pandemia del Covid-19.
"Los trabajadores no tenemos una central de trabajadores que ofrezca orientaciones con un plan sindical, que nos lleve a la recuperación económica del país, que hable de los despidos, entre otras cuestiones" dijo.
Para Silva, la aplicación del artículo 148 de la Ley Orgánica de Trabajadores y Trabajadoras, le da al patrón la potestad de despedir a los empleados sin necesidad de aplicar el despido masivo, y que han venido usando los inspectores del trabajo de la mano con el empresario.
Venezuela ha vivido con inamovilidad laboral por muchos años y esto ha quedado solo en la gaceta oficial, porque cada día hay denuncias de trabajadores despedidos o suspendidos de su cargo. Por tal razón, la extensión de la inamovilidad en el marco de la emergencia por Covid-19 no garantiza la estabilidad laboral
El trabajador petrolero, también resaltó que en el país hay una central de trabajadores ilegitima (CSBT) que se ha mantenido por 10 años sin renovarse, sin elecciones. De la misma manera se encuentran muchos sindicatos de trabajadores.
Horacio Silva acotó que la medida del gobierno de mantener en cuarentena a la clase trabajadora y garantizar el salario mínimo para las nóminas solo beneficia al empresario y que como siempre no se consultó a los trabajadores.
Silva ve como necesario y urgente refundar el movimiento sindical venezolano: "Hay que partir por la unificación de las centrales que no tienen legitimidad (sus direcciones) ni representan a todos los trabajadores del país", concluyó.