"Al imperialismo se le llama globalización y a las víctimas del imperialismo, se les llama países en vía de desarrollo" (Eduardo Galeano)
Uno no deja de impresionarse, por las constantes formas en que el imperio logra mimetizarse y ajustarse a las circunstancias, para mantener su papel hegemónico, utilizando variables de la relación amenaza – miedo, para seguir ejerciendo control a través de una garra de 4 puntas afiladas, con su veneno incluido en lo político – militar - financiero – económico, apoyados en un complejo y poderoso aparataje mediático, que hacen la propaganda sobre las necesarias bondades del imperialismo y los injustos y malvados rechazos de los pueblos libres, que en el mundo, se consideran antiimperialistas…
Ahora la garra imperial, tiene otras formas y estrategias para atacar a pueblos y acabar con Estados legalmente establecidos: sanciones y bloqueos, es un dúo perverso, que hace tanto o más daño que las guerras convencionales e intentan reducir, los costos que giran alrededor de las intervenciones militares extranjeras…y para darle un rostro legitimo a su despiadado e inescrupuloso injerencismo, el imperio capta y financia a sectores políticos que tengan una perfecta afinidad con los pragmáticos intereses imperiales en un momento determinado, con una permanente actitud supremacista, que se burla y desprecia a conceptos tales como: patria, soberanía, independencia, igualdad entre los Estados y se ríen de algo que se conoce como, "la libre autodeterminación de los pueblos"…
La unipolaridad es la base central del accionar estratégico del imperio, es mantener intactas las condiciones de injusticia social y desigualdad, y fortalecer a un astuto desequilibrio económico- tecnológico…que impidan el avance y la liberación de los pueblos, obteniendo recursos naturales barato, para luego vender sus productos procesados y manufacturados, para mantener estimulado a el gran capital…
Para el imperio, el resto del mundo, solo somos un mercado de consumidores y una mercancía de intercambio comercial...
