31 de octubre de 2022.-
Alrededor de catorce familias de varios sectores de la parroquia Caraballeda, en el estado La Guaira, fueron enviadas al refugio solidario de la Escuela Hilda Vásquez, por funcionarios de Protección Civil y cuerpos de seguridad, debido a las condiciones de riesgo en la que se encuentran sus viviendas.
La medida forma parte del plan de riesgo del gobierno regional, en el que están siendo habilitados los centros educativos o instalaciones públicas por un lapso de quince días de forma preventiva, a fin de resguardar la vidas.
Activan sede de Comuna
También fue activada la sede de la Comuna Guaicamacuto, parroquia Macuto, para el resguardo de las familias del edificio Agua Marina, que resultó inundado con la crecida del río El Cojo; así como familias de las residencias Centro América y María Luisa, donde se contabilizan unas veinte familias.
Según el reporte de organismos de seguridad y resguardo en La Guaira, fue activado el Centro de Adiestramiento Naval Santigo Esteves (Canes) en Catia La Mar, para atender las familias afectadas del sector Zamora y Chichiriviche.
Entre tanto, Protección Civil continúa la evaluación de las zonas en riesgo, para acciones preventivas en el litoral guaireño ante las lluvias.
Familias de varios sectores en riesgo
Residentes de las calles El Río y Los Mangos y del callejón El Pegón en el barrio El Teleférico de Macuto solicitan apoyo a las autoridades regionales, pues el caudal del río El Cojo también afectó viviendas en la zona.
«Lo del río El Cojo no son solo los edificios y la avenida La Playa. La crecida del río El Cojo ha dejado a más de 50 viviendas expuestas en la parte alta de El Teleférico. Esa parte del río nunca se embauló después de 1999 y ahora estamos pagando las consecuencias», indicó Manuel García, vecino de El Cojo.
En la zona alta de la cuenca El Cojo, se observa un canal completamente natural lleno de rocas arrastradas por las lluvias del viernes. Vecinos de esta zona pidieron la intervención de las autoridades, para evitar que otra lluvia de menor o igual intensidad genere una tragedia que cobre vidas.
Esta misma realidad viven los edificios y urbanismos aledaños a la cuenca de Cerro Grande en Tanaguarena, parroquia Caraballeda, quienes solicitan al gobierno regional el saneamiento del cauce, específicamente en su parte baja.