El lunes 24 de septiembre acudí a la oficina de atención al cliente Movistar ubicada en el centro comercial Metro Center en Capitolio. La razón que me motivó a asistir a esta agencia se debió a que le hacía el favor a mi hermano de 19 años, quien se empeñó en adquirir uno de estos equipos costosos, modernos y de última tecnología, vainas de muchachos. El celular de más de 900 mil bolívares tenía la cámara desconfigurada.
Mi mayor sorpresa se originó cuando llegué a la oficina de reparaciones técnicas y observé la cantidad de personas que se encontraban en la cola, pero eso no fue más preocupante que escuchar de dieciocho personas, de las más de 25 que se encontraban allí que “tenían que reparar equipos nuevos”.
Los comentarios eran: “mira yo compré este celular el martes y la pantalla se puso negra”, otro, “lo compré el sábado y se me apaga y prende sólo”, otro comentario: “esto es una estafa cómo es posible que un equipo nuevo me lo tengan que reparar y no me lo quieran cambiar”. El peor de los casos es que la compañía telefónica Movistar tiene como “normativa” cambiar los equipos sólo dos (2) días después de la compra, de paso la agencia donde lo adquieres no se hace responsable de los equipos que estén en mal estado, “debes dirigirte a una agencia de atención al cliente”, y por supuesto mientras haces estas diligencias el plazo de cambio se ha vencido.
Es absolutamente necesario, que los funcionarios del Instituto Nacional de Defensa del Consumidor y Usuario, INDECU, realicen una investigación al respecto porque la empresa telefónica estafa a los usuarios y usuarias, vendiendo equipos tan costosos y en mal estado.
Para terminar mi cuento; no me quedé callada ante tanto abuso y como dicen en mi pueblo: “abrí mi gran bocota”, y exigí el cambio de equipo, la joven que me atendía en tono burlón me indicó que sería atendida por el supervisor, pero que igual no me cambiarían el celular, y debía dejarlo unos diez (10) días en el taller. El supervisor fue receptivo al recibir mi denuncia, indicándome que debía dejarlo en revisión pero que lo llamara en la tarde, así lo hice y me informó que en diez (10) días me entregarían un equipo nuevo pues no tenían en disposición el modelo, sólo tocará esperar para saber que tan bien responden.
Acoto, que saco a colación esta historia porque quiero alertar no sólo al INDECU, sino a la comunidad interesada en obtener estos equipos a estar atentos ante cualquier irregularidad, y sepan que tienen el derecho de exigir las debidas soluciones según sea el caso y denunciarlo ante el Instituto defensor del usuario sino se toman las medidas correctas.
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