La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, envió un mensaje al pueblo de su país, luego de que la Administración Trump impusiera aranceles del 25% contra productos mexicanos que ingresen al mercado de EEUU, como una represalia para que la nación latinoamericana contribuya más, según Washington, al combate al narcotráfico y a la migración ilegal.
En un video difundido en sus redes sociales, la mandataria mexicana expresó su desacuerdo con la imposición de gravámenes por parte de la Casa Blanca, lo que podría marcar el inicio de una guerra comercial en Norteamérica.
Sheinbaum afirmó que los intereses del pueblo mexicano siempre serán la prioridad de su Gobierno ante los embates de Estados Unidos, que han ido desde esta introducción arancelaria hasta amenazas con declarar "organizaciones terroristas" a los cárteles de la droga que operan en México, lo cual abriría la puerta para que el Ejército estadounidense realice operaciones especiales en territorio mexicano. hispanohablante.
"Tenemos valentía y firmeza, pero siempre, como lo he dicho en otras ocasiones: hay que actuar con la cabeza fría y el amor al pueblo. Nada de lo que hagamos nosotros afectará la dignidad y los intereses del pueblo de México", añadió.
Sheinbaum consideró que los aranceles no son un buen camino para solucionar el tráfico ilegal de drogas y de personas migrantes. Por ello, dijo, volvió a proponer a la Administración Trump que se restablezca el diálogo entre los equipos bilaterales de seguridad y de salud pública.
Asimismo, expresó su sorpresa de que haya sido el propio presidente Donald Trump el impulsor del T-MEC, tratado de libre comercio entre EEUU, México y Canadá que ahora estaría siendo violado con la imposición de aranceles, de acuerdo con las autoridades del país hispanohablante.
Sheinbaum se lanza contra Washington
En su mensaje, la mandataria mexicana lanzó algunos cuestionamientos al Gobierno de Estados Unidos, que desde hace años se ha empeñado en culpar a terceros —como México, China o Canadá, países a los que ya impuso aranceles— de los problemas de adicciones que enfrenta su sociedad.
"¿Por qué no empieza combatiendo la venta de estupefacientes en las calles de sus principales ciudades? ¿O cómo es que las personas con adicciones compran esa droga? ¿Por qué nunca hemos oído de detenciones en Estados Unidos de los grupos delictivos estadounidenses?", expuso Sheinbaum.
"¿Cómo es que no se investiga el lavado de dinero de los grupos delictivos de allá? ¿Por qué no ponen toda su inteligencia a trabajar, para detectar a los grupos delictivos que venden fentanilo en su territorio o de otras drogas?", agregó.
Según la presidenta, el consumo y la distribución de drogas ilegales en Estados Unidos es "un problema de salud pública que nunca ha sido atendido". En ese sentido, Sheinbaum lanzó la siguiente pregunta: "¿Por qué no se preguntan cuál es la razón de fondo de tanto consumo de drogas que lleva tanto tiempo en los Estados Unidos?".
Para Sheinbaum, la epidemia de opioides sintéticos en la sociedad estadounidense tiene su origen en la "prescripción indiscriminada de medicamentos" de este tipo, que fue autorizada hace años por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés).
"Terriblemente irresponsable"
Claudia Sheinbaum acusó nuevamente a Estados Unidos de cometer "calumnias" por asegurar, sin pruebas, que el Gobierno mexicano está coludido con el crimen organizado y el narcotráfico.
"Pero aún más irresponsable, terriblemente irresponsable, es que la Casa Blanca emite un documento donde dice que 'hay vínculos entre el Gobierno de México y la delincuencia organizada'", dijo Sheinbaum.
"Primero que nada, como ayer [1 de febrero] lo dije: rechazamos categóricamente la calumnia que hace la Casa Blanca al Gobierno de México, de tener alianzas con organizaciones criminales, así como cualquier intención injerencista en nuestro territorio", señaló.
Un día antes, el presidente estadounidense, Donald Trump, finalmente anunció que impondrá aranceles a los principales socios de su país, Canadá, México y China.
Washington impondrá un gravamen del 25% a las importaciones procedentes de Canadá y México, con una tasa del 10% sobre los recursos energéticos canadienses, hasta que ambos países colaboren con Estados Unidos para frenar el tráfico de drogas y los flujos migratorios ilegales, de acuerdo con la Casa Blanca.
Los productos procedentes de China, según la Casa Blanca, se enfrentarán a aranceles del 10%.
Los tres países afectados por la decisión comercial de Washington han mostrado su descontento y han respondido a Estados Unidos con medidas igualmente arancelarias.
