“Las fatigas los sufrimientos
/ no se ven, están bajo tierra/moviéndose, rompiendo seres”. Pablo
Neruda.
Alegría: gratifica saber que podemos contar con la vida de 33 mineros. Anima que estas almas llenas de polvo y tierra le hallan hecho mutis a la muerte.
Indignación: mirar que tan espeluznante experiencia se quiera transformar en Sábado Sensacional.
Bochorno: no perder de vista que mientras se reza por la vida de los obreros, Piñera monta con los arreos de su aliada CNN un aquelarre destinado a relanzar su poco lúcida imagen.
Melancolía: observar la historia de la minería chilena y saber que cuenta con reclamos históricos, en 1945 Pablo Neruda expuso al Congreso: “¿Cómo es posible, Señor Presidente, tolerar que nuestros compatriotas estén entregados a esta explotación ignominiosa?”.
Cuando cantó, el minero: “No sale del infierno sino /cada cuarenta y ocho horas”. Todo sigue igual.
Ficción: que nos azota en prosa: "La galería del Chiflón del Diablo tenía una siniestra fama. Abierta para dar salida al mineral de un filón recién descubierto... Los apuntalamientos aumentaba el costo del mineral... Así, se fue descuidando poco a poco este trabajo..., economizando todo lo que se podía"...
Paquete Chileno: al no realizar
trabajos de fortificación de los techos de los socavones, y el derrumbe
es su evidencia y notable trampa de los señores de la ganancia y el
capital. No contentos con esto, incumplieron las condiciones de
seguridad de los lugares de trabajo, los rescatados, reconocen no haber
tenido zonas de seguridad. Todo se hizo mas difícil en su estadía
bajo tierra al no tener instalada la señalización visible en
las zonas de peligro. Esta realidad fraudulenta era del conocimiento
de las autoridades el Ministro de Minas Maurice Galore y la CODELCO
chileno. En síntesis se delata sencillamente algo que ya desde la crisis
del Wall Street sabíamos de los capitanes de empresa capitalista: codicia
desenfrenada, trampa y negligencia de los dueños de la mina, y la complicidad
funcionarial, con estos componentes el camino hacia el derrumbe
estaba mas que asegurado.
Realidad: que intenta burlarse de la narrativa y enrostra un informe del Ministerio de Minería 2008: "La Compañía está en su derecho para tomar las medidas que más convengan a sus intereses" ....¿ podemos entender¿: descuidar su obreros pues son: desamparados..., y contra quienes toda injusticia e iniquidad está permitida...
Paradoja: Se salvaron … mañana qué : ¿volverán a la oscuridad, el barro, la pulpa, por donde camina la mina adonde la única insuficiente es la seguridad.
Ausencias: de los propietarios del complejo industrial minero San Esteban dueños de la mina San José, Alejandro Bohn (45) y su cuñado Marcelo Kemeny (46). Huyeron a Santiago a “negociar” el futuro de la compañía y sus activos. Por lo pronto volvieron a Copiapó, se les vio en las reuniones a las que asistieron para recibir el préstamo de $ 180 millones que Enami efectuó a San Esteban y que se utilizó para pagar los sueldos de septiembre de los más de 300 trabajadores de la Mina.
Contradicción: ¿ sostendrá el régimen neoliberal de Piñera el curso de la demanda indemnizatoria por $ 4.900 millones que familiares de los trabajadores atrapados presentaron a fines de septiembre en contra de los dueños de la empresa, a la que podrían sumarse otras acciones civiles y penales ¿. Sin olvidar que tiene otro juicio en marcha por un derrumbe que el 3 de julio le costó al operario Gino Cortés la amputación de una pierna.
Oportunidad en que fueron imputados por lesiones gravísimas y se decretó permanencia nacional para ambos.
Evidencias: Según Kurt Kandora, ingeniero, “en esta, la Mina del Diablo, ha habido muchos accidentes, murió el geólogo Manuel Villagran, sufrió mutilamiento Gino Cortez; el peligro de derrumbe esta siempre presente”.
Cinismo: Los propietarios de la mina Marcelo Kemeny Füller, Alejandro Bohn, dijeron que "no tenían seguros para sus trabajadores", antes “habían reconocido no tener como seguir pagando salarios". Circulan rumores de una posible declaración de quiebra de la empresa, dejando en la indefensión a sus trabajadores. Los Kemeny son de origen húngaro; emigraron a Chile "para escapar del comunismo", 1948. Huían del comunismo y aquí podrían hacer la América y colorín colorado este húngaro explotador se ha armado.
El rey está desnudo: el terrible accidente y la dificultades demostradas para el rescate desvelan una falsa imagen de país potente, lleno de yuppies sabios, propietarios de una fortaleza minera única en el mundo para descubrir un poder ejecutivo y carente de equipamiento tecnológicamente apto para realizar el rescate. ¿Cómo es esto posible cuando se trata de una economía fundada sobre la riqueza y tradición minera¿. Vemos que estamos frente una industria totalmente manualizada y precaria, sin tuneladoras, robots para operaciones difíciles y sin sistemas computarizados. Explicable por que todo está en manos privadas adonde la ley es la ganancia y la avaricia la norma. Sepamos la explotación en Chile, la hacen las transnacionales y las manos privadas.
Estupidez, pero vamos a preguntarlo:
¿es posible nacionalizar los recursos naturales para su explotación
y comercialización en beneficio de todos los chilenos ¿. Obvio que
eso solo se reconoció con el gobierno de Allende, por eso lo asesinaron,
con Piñera y la gente de la derecha esto es un tema supletorio, tabú.
Esperemos opinión de la Mud venezolana.
Operación Fenix-Piñera: Curioso que los publicistas hallan apodado la operación y maquina huevo que traslada a los obreros: Fenix. Esta es ave que por estar en gracia al no haber probado la fruta prohibida, tiene vida eterna, muere, y renace cada 500 años. El éter de CNN pone a revivir al Fénix Piñera que estando como muerto renace en toda su gloria con reality show incorporado para cruzar el cielo estrellado con su mito que se robustece con la vuelta a la vida de cada rescatado, “un niño que nace”, cada uno bautizado con un nombre que parece se los coloca Don Francisco: EL Escritor, El Líder que le saco la piedra a Piñera, El Boliviano, El Galán con dos amores, El Hijo de Doña Rosa, El Tio Dario y sus sobrinas, El Rejuntado que se casa por la iglesia. De forma que el show siga, siga y siga.
Conclusión y angustiante pregunta:
¿Quien pagará los gastos de la operación
de salvamento y su show mediático? . Se calcula que los equipos, aproximadamente,
cuestan 10 millones de dólares. Sin duda que el pueblo chileno; el
10% que controla el 90% de la riqueza que son clásicos sectores poderosos
del país, es probable que ayuden. Será cosa de ver. Sabiendo que cuanto
se haga para salvar la vida de un obrero nunca será mucho, esperemos
que la derecha no se oponga.
Despedida y honor: a los mineros
rescatados y por rescatar:
“las chilenas de arriba, / las minerales hijas de la mina, /un ramo
entre mis manos, unas flores / de Punitaqui, unas rojas flores, /geranios,
flores pobres” Pablo Neruda.
