Felizmente nadie tiene que habilitarme ni expedir documentos que autoricen, y menos imponga necesidad de escuchar todo cuanto se le ocurra decir a los descontrolados que manejan los sistemas del chisme y desinformación que alimenta a los opositores.
Ejemplo, estos clientes de las medicinas que recomiendo JJ Rendón, sin tener la menor idea de lo que contiene la solicitud de la ley habilitante que debe presentar el Presidente Maduro a A.N, de inmediato la descalifican y niegan con furor propio de patologías y signos de histeria agresiva.
Furia debida a fragilidad conceptual y desquicio neuronal. Fiebre que parece se altera cuando la ambición de poder preña a inexpertos asambleísta y convierte en polvo esclavo y ceniza, sus breves y baratas ideas. Se estima malestar incurable que florecer con regularidad lunar para brinda nuevas necedades. Como esa de que después del 8 de diciembre darán, por fin, el – soñado - golpe de estado.
El candidato perdedor también se arrebató y gritó, que si era otorgado este derecho, -que cuenta con todo el necesario fundamento Constitucional-, él lo desconocería. Alarido que sin duda promueve risa
Imagino que este nuevo “pasón” o arrebato histérico, con “mala nota”, tendrá el mismo efecto que su anterior negación para aceptar los resultados electorales, minucia de la cual nadie se acuerda y sigue siendo motivo de problemas entre los miembros de su cogollo. Sin duda materia para mover la burla y risa entre sus seguidores por la baratija argumental que utilizó.
Otros, sobre todo del mundo jurídico, niegan la solicitud, por considerar que con el esquema legal actual es suficiente. Cometen calculado error de calculo, y tino, puesto que, el delito y la corrupción hoy avanzan a tal velocidad y mal vivencia que hasta los capta-huellas, recurso impensable anticorrupción hace dos meses, puede, estar mañana en desuso. Es tanta la voracidad de los corruptos e imaginación febricular que los empuja a la codicia, que, solo contando con novedades legales y técnicas y posiciones políticas firmes, mas la vía expedita de una ley habilitante es que esto se pueda manejar.
