De un “terremoto”, a un teatro de operaciones militares, pobre pueblo

Los Objetivos evidentes, serian Cuba, Venezuela, Bolivia, Nicaragua y Ecuador, en primer orden y segundo evitar la conformación de un collar de islas independientes y soberanas en el Caribe, que junto a los demás pueblos del continente, construyan el sueño de Miranda y Bolívar, La Patria Grande.

Teatros de operaciones militares, es un término usado en Fuerzas armadas para describir los territorios geográficos continentales con sus áreas marítimos que confinan, islas, costas adyacentes y espacio aéreo.
La división de áreas continentales y marítimos grandes asiste a determinar los límites dentro de los cuales los planes para la operación de militares estratégicos grupos de fuerzas se convierten, permitiendo conducta de operaciones militares en significativo específico estratégicas. Ya lo decíamos hace un año y pico, en un artículo de este servidor, titulado:“Viene la Cuarta Flota”, de una serie de artículos llamados: “ Hipótesis de conflicto”, de Lorenzo Angiolillo, donde tratamos de alertar de los escenarios venideros, y la posibilidad de hacerles frente a tiempo, decíamos que: Curazao y Aruba, por ejemplo, son la puerta del Golfo de Venezuela y Latinoamérica y el paso obligado de todo el petróleo hacia esa región, ruta que pretende militarizarse en UNA AUDAZ OPERACION NAVAL de la Cuarta Flota, creada en 1943 durante la Segunda Guerra Mundial y reactivada 58 años después. Un plan donde el Pentágono y sus Halcones buscan combinar la presión que ejercerán a través de sus maquinaria militar imperialista y lo que han denominado la DIPLOMACIA DE CUATRO ESTRELLAS, es decir, dejar la decisión o resolución de cualquier posible impase o conflicto en manos militares, según los escenarios o informaciones que manejaría la inteligencia Norteamericana, concretamente, la Agencia Nacional de Seguridad. La vieja receta del manual de “Guerra de Baja Intensidad”, que busca intentar aislar al Presidente Chávez, sobre la base de hipotéticos escenarios de conflicto de guerra que propenden a la imposición de salidas negociadas y práctica usual del imperio en su política intervencionista y conspiradora, en ámbitos nacionales e internacionales, con el pretendido eufemismo de minimizar los efectos negativos y costos de una intervención directa. Advertimos los riesgos, y específicamente cuando la Guerra de Baja Intensidad contra Venezuela, el presidente, el gobierno y sus instituciones, llega a niveles sin precedentes. Agreguemos la reciente firma urgente del Reino de los Países Bajos, a solicitud de la embajada de EEUU en Holanda, de ampliar y extender el acuerdo de estatus de los civiles y militares de las fuerzas armadas norteamericanas en las Antillas y Aruba, el cual se extendió de un solo plumazo este 3 de mayo hasta el mismo día del 2009, producto, y hay que decirlo, de la falta de política y lobbies de nuestra embajada en la Haya. Este hecho permeabiliza aún más, la hipótesis de conflicto y nuestras debilidades en el área, urge entonces, que revisemos la estrategia hacia las Antillas y Colombia: es IMPERIOSO que Venezuela, a través de su Cancillería y misiones en el Caribe, sincronicen la defensa y la incorporación de neutralidades hacia nuestra patria. En la medida que esta área del Caribe sea propensa a la neutralidad por lo menos lograremos que la militarización de la misma no se acreciente por las fuerzas del imperio. Estamos en un momento histórico inédito, en el marco de un contexto internacional nada fácil, no subestimemos la locura imperial que se mueve en esa lógica capitalista de ver “la guerra como una extensión de la política por otros medios”. Hoy se impone una labor descomunal de DIPLOMACIA ACTIVA. En Haití, se han desplazado fuerzas de intervención las mismas que operaron de forma eficaz en otras invasiones, Grenada, Panamá, Irak, etc., agregamos el hecho de que en el Caribe, se encuentra desde más de un año desplazada dicha flota naval, la presencia de Batallones norteamericanos en República Dominicana, como yo lo constatara personalmente,( en ocasión de uno de mis viajes, donde revelo por primera vez, forme parte del embrión fundacional del Movimiento Bolivariano de República Dominicana, de lo cual me siento muy honrado y orgulloso) , y que son parte de una fuerza de tarea o teatro de operaciones.

La reciente, Propuesta de Militarización y Activación de las Bases, nuevamente en mi querida y recordada Panamá, donde también conocí de forma directa el proceso de Invasión, cuando fui Presidente del Comité de Solidaridad, y además durante dos años asesor, de las Fuerzas de Defensa, dentro de esta oficialidad, había también una ingenuidad, muy parecida a la nuestra, se confiaron unos en supuestos pactos con el grupo Halcón, del Pentágono, y otros en que la guerra de baja intensidad, iniciada por los gringos durante más de tres años tendría un final de conciliación, ni lo uno ni lo otro, todo lo contrario: Invasión a la hermana Panamá, como siempre lo advertí incluso al mismo Noriega en ocasión de conocerlo dos años antes, trayendo la muerte a miles de soldados y pueblo Panameño , y el posterior desmantelamiento de la Fuerzas de Defensa.

Ahora ocurre un,” Terremoto”, en Haití, donde también tenemos que considerar o dejar constancia para la historia el hecho que, EEUU tiene la tecnología militar para generar terribles catástrofes naturales: proyecto Haarp, pero aun considerando que es un hecho natural , lo que si no es lógico el despliegue militar y la toma de control estratégico por parte de los Marines, de este Nuevo Teatro de Operaciones Militares, que es Haití, desde donde en la historia partieron, contingentes de Liberación del yugo Español, hoy conforma una amenaza real a los países del Caribe, Cuba es una de las más amenazada dentro del área , pero también todos aquellos movimientos de independencia y liberación de muchos de los pueblos del Caribe e incluso algunos que aun son Colonias Europeas, y quizás sea este el interés no solo de los EEUU, incluso de algunos países de Europa, y la misma OTAN, en tener control imperial del aérea, ahora si les advierto como lo hecho de forma personal, a la oficialidad de otros países de Europa, estacionados en distintas islas del Caribe a la hora de contingencia movilización y conflicto, todas esas fuerzas europeas se someten a las ordenes del comando Sur, como se llamaba antes comando del Caribe, ya hay Jurisprudencia al respecto cuando la segunda guerra mundial y se creó este pacto militar. Así que todo el Caribe junto a las fuerzas Europeas bajo el mando de los norteamericanos sería un gran teatro de operaciones gringas.

*Embajador

langiolillo977@hotmail.com


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Lorenzo Angiolillo Fernández*

Ex Embajador, escritor, analista político, e Ideólogo Bolivariano

 angiolillo777gmail.com

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