Actualmente se encuentra en marcha el plan oposicionista con la finalidad de provocar un golpe de Estado el día 8 de octubre, en base a las experiencias previas desde el año 1999 hasta el día de hoy podemos identificar los actores, las acciones y la estrategia que será utilizada para este año.
Es necesario generar ciertas condiciones que lo hagan posible. Preparar y mantener un clima de conflictividad social, de malestar general, una mezcla de angustia y miedo que justifique salidas violentas y fuera de la constitución. Existen tres etapas dentro del proceso general que culmina el 7 de octubre: precalentamiento, calentamiento y punto crítico.
El precalentamiento consiste en crear y mantener las matrices de opinión positivas o negativas por medio de una campaña desinformativa. Algunas de las negativas son: desabastecimiento, inseguridad, gestión ineficiente, FANB narcoterrorista, los chavistas desencantados están pasando a la oposición, crisis económica, regaladera a otros países, deterioro de los servicios públicos, corrupción, burocratismo, represión y violación de los derechos humanos, desprestigio de PDVSA, ataques a la propiedad privada, falta de autonomía de los poderes públicos, deslegitimación internacional. Los actores principales son los partidos políticos (la MUD) que nutren a los medios de comunicación y las encuestas, por eso vemos como los medios transmiten cualquier tipo de “noticia” que contribuya a mantener estas matrices.
Con respecto a las encuestas siempre han tenido la intención de ganar credibilidad reflejando los resultados reales, sin embargo a medida que se acerca el evento electoral empiezan a invertir los resultados dando como ganador a la opción oposicionista y hacer el ridículo con márgenes de error de más de 10 puntos. Esto explica porque actualmente todas las encuestadoras dan como ganador a Hugo Chávez por más de 25 puntos a favor, seguramente este panorama irá cambiando a medida que se acerque al 7 de octubre. Datanalisis y Luis Vicente León es un ejemplo claro, por tres años sostuvo que la oposición tenía el 70% de preferencia y cuando se iba a realizar el referendun revocatorio en agosto del 2004, para no hacer el ridículo tan grande, tuvo que reconocer el 3 de agosto que había un empate técnico y el 8 de agosto aceptó que Chávez tenía la mayoría.
En la etapa de calentamiento participan los grupos económicos (ganaderos, banqueros, empresarios (La Cadena Capriles, El grupo Cisneros y las empresas Polar), Organizaciones no gubernamentales (Sumate, las Manitos Blancas de Otpor), universidades, cuerpos policiales de gobernaciones y alcaldías oposicionistas, Embajada de EEUU, paramilitares, la iglesia y organismos internacionales. Las acciones están planificadas en función de reforzar las matrices de opinión contrarias al gobierno: Empresarios > Desabastecimiento, banqueros > crisis económica, Manos Blancas > represión y violación de los derechos humanos, ONGs > FANB narcoterrorista, Universidades > Desprestigio de PDVSA, la iglesia > corrupción, Organismos Internacionales > deslegitimación internacional, SUMATE > falta de autonomía en los poderes públicos, paramilitares junto a las policías oposicionistas y embajada de EEUU > Inseguridad, Partidos Políticos > todas las anteriores.
El objetivo de esta etapa es agitar la calle con acciones diarias y un aumento de la campaña desinformativa, incrementar el clima de conflictividad social, crear situaciones reales de malestar para luego ser magnificadas y exageradas por los medios. Los empresarios con el acaparamiento y la especulación provocaran el desabastecimiento y la sensación de crisis, la iglesia y las universidades emitirán comunicados, SUMATE y otras ongs impugnaran al CNE y la FANB, la OEA y otros organismos internacionales darán curso a interposiciones legales orientadas a mostrar la dictadura en Venezuela, operación morrocoy en la administración pública. Las manitos blancas promoverán recuperación o invasión de espacios simbólicos como edificios, terrenos o zonas prohibidas para desgastar a los cuerpos de seguridad y incentivar la violencia, huelgas de hambre, los oposicionistas realizaran compras monopólicas comprando masivamente los productos que la gente necesita, se pronunciaran algunos militares con el objetivo de “mostrar” la inconformidad de la FANB, la quinta columna con disfraz de rojo saltaran la talanquera intentando evidenciar la fractura y el descontento en el chavismo (caso el “gato” Briceño). Bajo la dirección de la embajada de EEUU cuerpos policiales oposicionistas y paramilitares realizaran sabotajes de líneas eléctricas provocando apagones, enfrentamientos violentos en la frontera con el fin de culpar a las FARC, aumento de secuestros a personalidades, robos y asesinatos a choferes de líneas de transporte para provocar protestas y paros, estimulación de protestas y reyertas en las cárceles.
Los días previos al punto crítico, el 7 de octubre, el oposicionismo quiere consolidar la matriz de opinión de que todo el país quiere un cambio, que ese cambio no va a ser conflictivo, se va a unir el país para ser todos felices, a Chávez le queda poco tiempo de vida y el cambio es inevitable, las misiones se van a mantener, va a existir trabajo y seguridad para todos los colores.
El escenario perfecto para el oposicionismo es el aumento de la conflictividad social a través de la consolidación las matrices de opinión que justifiquen la salida violenta y la aceptación de Radonski por las buenas o por las malas. Subir la cantidad de votos opositores y promover la abstención en los votos blandos del chavismo, este punto es crucial ya que, aunque es imposible superar los 30 puntos a favor de Chávez (no se descarta un evento que impacte en los votos como un supuesto atentado a Radonski o un apagón general días antes de las elecciones) tienen que reducir esa ventaja para acusar al CNE de manipular las cifras. La noche de las elecciones Radonski declarará el fraude del CNE y la complicidad de la FANB, las manitos blancas activaran las guarimbas, reprimirán a los sectores populares para desmovilizarlos, intentaran asesinar al presidente o personajes claves (incluso de oposición). Los grupos de operaciones especiales estadounidenses con los paramilitares y policías ejecutaran una operación que impulse definitivamente el golpe como el ataque a un hotel u otro sitio por supuestas fuerzas bolivarianas y donde mueran ciudadanos estadounidenses. Esto causará la indignación de la “comunidad internacional” y justificará la intervención directa de EEUU y la OTAN, de inmediato se pondrán en marcha el intento de derrocamiento al estilo libio y sirio. Todas están acciones deben concluir con la salida forzada a corto o mediano plazo del presidente, ya que la salida a largo plazo sería una guerra civil donde todo el país sería la víctima final. Frente a estas pretensiones debemos prepararnos para demostrar que la revolución venezolana (socialista y bolivariana) llegó para quedarse y dejar claro que el impulso está dado.
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