Caracas, 29 mar (PL) Autoridades sanitarias venezolanas determinaron efectos dañinos en el chimó, extracto de tabaco cocido y sal, que se mastica en algunas regiones del país suramericano.
Un estudio del Instituto Nacional de Higiene Rafael Rangel desmiente el criterio generalizado que el chimó es benévolo y su uso podría evitar el consumo de cigarrillos entre niños y jóvenes.
Beatriz Mosquera, una de las investigadoras, indicó en un taller organizado sobre el tema que el análisis demostró que el producto venezolano posee el Ph más elevado de otras modalidades de tabaco para masticar existentes en otros países.
La investigación demuestra que esa característica favorece la absorción de la nicotina e incluso, al dejar de ser su producción artesanal, el proceso industrial manipula su contenido y el Ph para hacerlo más adictivo.
Pruebas con ratones blancos determinaron daño en el tejido subcutáneo tras ser inyectados con una solución cruda de chimó, evidencia de su toxicidad y nocividad.
El Programa Nacional Antitabáquico capacitó en tres años a nueve mil 479 docentes sobre prevención del consumo de cigarrillos y chimó, pertenecientes a cuatro mil 740 centros declarados Libres de Humo de Tabaco.
Las normas del país prohíben vender tabaco y derivados en centros educativos y su comercialización en forma de golosinas, así como la publicidad y prohíben obsequiar a niños objetos que inciten al consumo.