El periodismo basura

Los dueños de los periódicos entienden que les asiste la libertad editorial de decidir qué contenidos incluyen en sus páginas. Y advierten que “cualquier tipo de censura previa sobre ellos vulneraría la libertad de expresión”. Es el mismo argumento que utilizan en la televisión para justificar sus programas denigrantes: que son muy libres de ganar dinero con los espacios ilícitos que les parezca oportunos. Por muy irrespetuosos, injuriosos, infamantes o vejatorios que les resulten a alguien los contenidos de periódicos como Tal Cual, La Razón, el Nuevo País o Sexto Poder, si no hay sentencia en su contra, ellos son muy libres de publicar lo que les venga en gana. La basura de este modelo de “periodismo” injuria o difama a las personas y se les somete al escarnio público sin derecho a la defensa.

El Nuevo País y La Razón son un ejemplo del periodismo de la mentira y la difamación, que mezclan información con opinión. Cualquier ingenuo lector que leyó la noticia que da La Razón sobre el “narco gobierno” al pasar del titular al texto, buscará ávido la prueba de esa información. Pues será inútil, porque no hay ninguna prueba, sólo especulaciones. El que firma el artículo-noticia no aporta nada que pueda corresponderse con alguna investigación seria y con pruebas. Sólo deduce lo que afirman sus “fuentes”.. Este periódico supone que son muchos más los que leen los titulares que los que leen el texto. Unos son más descerebrados que otros, pero casi todos dan por supuesto que la noticia es cierta. Uno podría esperar que los ciudadanos de un país democrático el interés por estar bien informado y de esa manera opinar con criterio.

Para eso sería conveniente disponer de uno o varios medios de comunicación cuyas líneas editoriales coincidieran en mayor o menor medida con el pensamiento de cada cual. Pero para conformar una opinión verdaderamente libre e independiente, sería necesario además, echar algún vistazo a otros medios discrepantes con nuestra forma de pensar, de lo contrario nos convertimos en meros peleles, o hooligans fanatizados al servicio de intereses espurios del periodista y del medio. Y aunque sean medios discrepantes con nuestras ideas y muy críticos, si informan con ética, principios y dignidad, es entonces cuando nos damos cuenta de cuáles son los medios que podemos considerar serios y los que son simplemente panfletos amarillistas que alimentan el fanatismo de gente con pocas luces pero muy vociferantes. El Nuevo País, Tal Cual, La Razón y Sexto Poder son un atajo de vagabundos y ejemplo de periodismo basura. Han traspasado la frontera de lo permitido para convertirse en paladines del periodismo mierda.

Compiten entre ellos para alimentar tanto a ignorantes como fanatizados y sus editores solo informan (o eso creen) a través de esos medios deleznables. Los tribunales no son jarrones chinos, hay que actuar.

*Diseñador Gráfico.


Esta nota ha sido leída aproximadamente 1870 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter