Sí algo es necesario en estos días de presunta confrontación bélica contra las fuerzas del mal que nos quieren arrebatar el paraíso de abundancia, paz, democracia, libertad, honestidad gubernamental en que vivimos (estoy tratando de no ser irónico) son unos tallercitos de oratoria o de comunicación verbal. Yo no me voy a poner a decir que es carencia de ácido fólico o cosa parecida, decir esto me parece ofensivo, pero es que tratar de entender a un diputado a la respetadísima Asamblea Nacional no es nada fácil. Coloco por aquí una especie de rueda de prensa preparada y no una pregunta realizada por sorpresa a un diputado, trate uste amigo lector de escuchar con atención a este flamante diputado que según algunos militantes del madurismo parece ser un clon de nuestro gran tribuno del siglo XIX Juan Germán Roscio. https://www.instagram.com/p/C_IaBkWuSd4/

No me imagino a este flamante diputado arengando al pueblo venezolano a resistir los embates del imperio intergaláctico, llamando a ofrendar la vida por nuestros salvadores, llamando a defender las grande conquistas salariales, nuestro solido símbolo monetario, exigiendo con su verbo florido, extenso, ilustrado y amplio la defensa de un gobierno pulcro, transparente, honesto hasta más allá de lo creíble, se que los venezolanos saldríamos con convicción a defender todas esas grandes conquistas sociales como las dignas jubilaciones o el maravilloso salario y prestaciones sociales de los empleados públicos, vuelvo aclarar no es "ironía".

Veamos algo acerca de Roscio. Roscio llegó a Estados Unidos después de estar en la Jamaica británica. Su obra Triunfo de la libertad sobre el despotismo se publicó en Filadelfia en 1817, y en 1818 se encontraba en Angostura apoyando a Simón Bolívar en la reconstitución de la República de Venezuela y en la creación de la Gran Colombia. Durante este lapso se desempeñó como director general de Rentas, presidente del Congreso de Angostura, vicepresidente del Departamento de Venezuela y vicepresidente de la Gran Colombia. Ocupaba este último cargo cuando murió, en vísperas de celebrarse el Congreso de 1821, del cual sería presidente. https://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Germ%C3%A1n_Roscio

Yo no sé si Edgar González o el "Juan Germán Roscio del siglo XX" como creo haber escuchado a mi amigo Pedro referirse al flamante diputado nacional, no sé si será discípulo de ese talentoso prohombre de las letras venezolanas el diputado Fernando Soto Rojas, quizás pudo haber sido discípulo de ese talentosísimo intelectual valenciano Arnoldo González P. Pero creo que si no es el Roscio del siglo XXI está muy cerca y quizás con un empujoncito bastará para estar o entrar en la historia de los grandes tribunos del país en toda su historia republicana.

Edgar González todo el pueblo de Carabobo conoce del talento verbal que te acompaña desde siempre, de esa capacidad que seria solo comparable a la de Demóstenes y acudo a Wikipedia y es que leyendo me doy cuenta que parece que te estuvieran describiendo a ti, veamos. Sus dotes de oratoria constituyen la última expresión significativa de las proezas intelectuales atenienses, y permiten el acceso a los detalles de la política y la cultura de la Antigua Grecia durante el siglo IV a. C. Demóstenes aprendió retórica mediante el estudio de los discursos de oradores anteriores. Pronunció sus primeros discursos judiciales a los veinte años de edad, cuando reclamó a sus tutores que le entregaran la totalidad de su herencia. Durante un tiempo, Demóstenes se ganó la vida como escritor profesional de discursos judiciales y como abogado, redactando textos para su uso en pleitos entre particulares. https://es.wikipedia.org/wiki/Dem%C3%B3stenes

Va un abrazo y creo que sería justo que el camaradisima González abriera talleres de oratoria que tanto vamos a necesitar en estas difíciles horas donde estoy seguro la palabra tendrá un papel tan importante como los pertrechos. Edgar tócate el corazón y ayuda a decenas o a cientos que te escuchan con atención y ven tu soltura, tu modulación, tu voz como modelo de lo que debe ser un discurso que aclare lo que está por venir. Gracias Edgar por existir y deleitarnos con tu palabra preclara y directa (sin ironía).