Preocupación en Venezuela por la crisis capitalista mundial

Los cables de noticias continúan informando, de forma muy prolífera, sobre la nacionalización, la quiebra y estatización de grandes empresa financieras, aseguradoras y comerciales del mundo. Ya se ha producido la quiebra de AIG, con activos por un trillón de dólares, la quiebra de dos de los cinco principales bancos de inversión, Lehman Brothers y Merrill Lynch, con valores por 1,5 trillones de dólares, y el rescate de las dos mayores agencias hipotecarias, Fannie Mae y Freddie Mac, con capital de 1,8 trillones de dólares. La pérdida de valor ocasionada por la virtual quiebra o intervención de cinco de las principales empresas financieras norteamericanas superó los 4,3 trillones de dólares, que representan el 32% del PBI de EE.UU, que superó ya los 13 trillones de dólares. La ola de despedidos ya supera los cuatro millones de trabajadores, de los cuales más del 12% del total de obreros estadounidenses y más del 3% de empleados del gran país del norte son empleados.

¿Cómo se origina esta crisis? La misma tiene su historia. Según el Open Society Institute, que se dedica a promover la gobernabilidad democrática y la tolerancia política en EE.UU, la Reserva Federal, a consecuencia de la crisis que nació al reventar la burbuja de Internet en el año 2000, tomó la decisión, para fortalecer a los inversionistas, de bajar los intereses de los fondos federales de 6,5% a 3,5%. Después del 11 de septiembre de 2001, Allan Greenspan bajó los intereses a 1%, mínimo histórico en 50 años, una reducción sin precedentes en el costo de la moneda estadounidense.

Esta situación produjo un tsunami inmobiliario, disparándose el valor de las propiedades por una gigantesca demanda a consecuencia de muy bajos intereses. Aún cuando la economía real no creció, los bancos siguieron prestando a familias ansiosas de adquirir bienes, incluso a muchos que no tenían capacidad para pagar sus hipotecas. Así se produjo un conjunto de deudas “basura” que fueron vendidas por los tenedores de esos papeles a instituciones dispersas en varias partes del mundo. En 2005, la evaluadora de riesgos Merryl Lynch estimó que alrededor de 50% del crecimiento económico de EE.UU se debió a la construcción de viviendas. En junio y julio de 2007, algunos bancos hipotecarios cayeron en la bancarrota.

Toda esta situación en el centro mundial del capitalismo es la consecuencia se atribuye a tres causales principales: 1) La desregularización de los mercados financieros; 2) la globalización de los mercados que le dio dimensión mundial a un problema estadounidense; y  3) la convicción de que un crecimiento ilimitado del crédito es capaz de elevar sin límites la prosperidad de cualquier país. Nosotros tenemos nuestra propia hipótesis. La crisis es provocada por quienes manejan los grandes capitales financieros internacionales en la búsqueda, en el mediano plazo, de un nuevo orden económico internacional donde ellos salgan fortalecidos aun más de lo que han representado en los últimos sesenta años.

En tanto, ¿cuál ha sido el impacto en Venezuela? Algunas agencias internacionales informan que el mundo financiero se conmovió en los días cruciales del 25 de septiembre al 3 de octubre por la subida de la bolsa de Caracas, mientras las del resto del mundo se hundían. Voceros gubernamentales, incluyendo al Presidente de la República, manifestaron que no seríamos afectados por esa crisis, aunque luego ha habido rectificaciones. En los tres primeros meses de 2009, la crisis ha impactado de manera muy solapada la economía nacional, principalmente por la caída de los precios de los hidrocarburos.

Analistas serios señalan que, ante la crisis financiera del mundo capitalista, urge que en el país se adopten medidas precautelativas. El hecho de que la actividad económica nacional tenga un alto componente internacional, como lo son sus exportaciones petroleras y el elevado volumen de importaciones, además de ser un país con una deuda externa pública de unos 50 millardos de dólares entre el gobierno y PDVSA, incide en que resultemos afectados porque lo que ocurre  en los mercados financieros, lo cual tiene consecuencias ineludibles en el país. Esos gigantescos compromisos internos que ha contraído la república, donde el incremento secular del empleo público, así como los compromisos externos por concepto de las importaciones se mantiene con los ingresos en dólares provenientes de las exportaciones petroleras, puede debilitar nuestros ingresos en divisas si la recesión se prolonga y profundiza, afectando nuestra exportaciones de la cesta petrolera, debilitando así el músculo financiero de la república.

Este lunes 30 de marzo de 2009, en la búsqueda de soluciones para sus países, se reunieron en Doha, República de Qatar, los líderes de América del Sur y los países Árabes; allí afloró una  serie de propuestas, como el Banco de la Opep, la petromoneda y otras más, que esperamos conocer en el transcurso de los próximos días.

cepo39@gmail.com


*Economista - Investigador. 



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(*)César Prieto Oberto

Profesor. Economista. Miembro de Número de la Academia de Ciencias Económicas del Estado Zulia. Candidato a Dr. en Ciencia Política.

 cepo39@gmail.com

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